Manlio Fabio escogió a Tlaxcala como su primer destino, al día siguiente de protestar como líder nacional del PRI; desde entonces no deja de observar a Mariano González

(etlaxcala) Monitorean PRI Presidencia Mariano Gonzalez, Manlio Fabio Beltrones, Enrique Pena Nieto, Tlaxcala Online

Solo él sabrá la causa que lo llevó no recibir personalmente a Rosario Robles Berlanga, el pasado viernes. Y ustedes me dirán, pero mandó a su hija Mariana. Cierto, pero el señor manchis ya olfateaba un ambiente enrarecido.

Eso ocurrió el viernes cuatro de diciembre. Y seguramente fue entonces cuando el plan urdido de la renuncia a la Sedesol haya llegado a su etapa culminante. Para el domingo seis detonó la renuncia de Anabell Ávalos a la delegación. El entramado se hallaba sin punto alguno de riesgo.

Ese domingo va a ser inolvidable para el iracundo, quien seguramente contó hasta diez y optó por enviar a su amigo el secretario de Desarrollo Social, Pepe Toño Meade Kuribeña, la terna ideal para él. Lo que le permitiese buscar y encontrar detalles para aprovecharlos en una contraofensiva.

Pero esa terna no prosperó. El gobierno federal parece tener en reserva ese, que es uno de los despachos infalibles del gobierno federal en el estado más pequeño pero, con un megalómano prototipo. Y quedó la directora administrativa, Lidia Galván, como encargada del despacho. Un lugar con el blindaje suficiente como para mantener a raya al hacendado.

Puede verse que para cada embate marianista hay una medida de quienes lo tienen estudiado y monitoreado. No sé si a ustedes les parezca necesario pero, a lo mejor la presión de junior –un chavo con bastante inmadurez y bastante poder- sea la persuasión innecesaria que allá arriba hayan detectado.

¿Qué tal si lo vuelven a emplear fuera del estado?

Digo, al partido le hacen falta delegados así, con temperamento en otras latitudes para poder sacar los procesos internos.

Y matan dos pájaros de un solo tiro. Porque limpian el ambiente aquí (y les mandan a un novillo, qué tal a la linda Petatera de Colima).

Mujeres al abordaje

Tres senadoras y una ex funcionaria federal podrían redondear los carteles para la gran corrida de 2016.

¿Quién a estas alturas podría arrebatar a Adriana Dávila la candidatura panista, si hasta perredistas como Lupe Acosta Naranjo luchan para no concretarlo? Tiene la Dávila la experiencia a su favor. Ya fue candidata y, aunque perdió la elección de 2010, hoy es más intensa. Se le ve con el corazón caliente, pero la cabeza fría.

El mérito de Lorena Cuéllar Cisneros, puede ser al récord de elecciones ganadas, tres en las que participó como priísta. No ha sido fácil para ella lidiar en un partido tan distinto como el PRD. Pero hela ahí, dando certidumbre a las tribus, aunque algunas estén determinadas a hacerle permanentemente la guerra.

Andrés Manuel López Obrador y su impresionante expediente, con dos intentos fallidos para llegar a la Presidencia, es el mecanismo que da vigor a Martha Palafox Gutiérrez, la promotora de la Soberanía Nacional del Movimiento de Regeneración Nacional. Crear una estructura nueva y al mismo tiempo evadir los intentos divisorios, son retos que suple con la convocatoria de un Peje, decidido a dar la batalla hasta obtener resultados positivos.

Esas son algunas de la características de las aspirantes a suceder a Mariano.

Pero, Anabell qué ofrece.

Tal vez la buena relación con los altos mandos, como no la tiene Mariano. Lo que a González lo hizo incapaz de incrementar los presupuestos de egresos y al contrario, a devolver cantidades estratosféricas de dinero por carecer de proyectos (y sobre todo de voluntad).

Hace falta la disciplina técnica susceptible a la evaluación diaria, como suelen hacerlo en la Sedesol, para que el estado funcione. Claro, sin descuidar la relación personal con mujeres y hombres, priístas y no priístas, lastimados por las embestidas marianas.

No le quiten lo sencillo

El exquisito extranjerismo de Mariano lo fue haciendo el personaje que no es la monedita de oro. Hizo compleja su relación con una clase política a la que no se le va una.

Sí, lo detestable de manchis es su soberbia. Y si suman ustedes la tremenda cola administrativa y los litigios perdidos, estamos ante un candidato a Puente Grande.

No digo que a Manlio eso le entusiasme, pero tampoco creo que le disguste.

Y Manlio es Peña.

Y a Manchis debería caerle el veinte.