Las nuevas administraciones municipales iniciarán funciones el próximo sábado y los presidentes y las presidentas municipales deberán mostrar que tan eficientes y capaces son, porque les espera un complicado arranque ante la escasez de recursos públicos, las demandas laborales generadas por despidos del personal, la inexperiencia de sus colaboradores y la soberbia con que algunos ya se conducen.
De entrada, sólo una tercera parte de los 60 ayuntamientos tlaxcaltecas podrá presumir que contará con un director de la policía municipal debidamente acreditado y aprobado por el gobierno estatal, lo que implica un problema porque en el resto de los municipios tendrá que trabajar con encargados en esas importantes áreas.
También se dice que los alcaldes están teniendo problemas para encontrar los perfiles para los tesoreros, debido a que no todas las propuestas cumplen con los requisitos de ley. Por eso, algunos que trabajan en las actuales administraciones municipales y que han demostrado que son buenos para los negocios, ya encontraron otro ayuntamiento para seguir llevando sus malas prácticas en los siguientes tres años.
Se rumora que la tesorera que actualmente labora en el ayuntamiento de Amaxac, María Teresa Hernández López, se irá a trabajar a la alcaldía de Santa Cruz Tlaxcala. Movimiento que no es el único, porque al parecer se están replicando en otras presidencias municipales.
Y lo mismo pasa con los directores de Obras Públicas, quienes sólo se rotan para seguir con la red de negocios que han establecido bajo el amparo del Órgano de Fiscalización Superior (OFS) a cargo del mediocre ex tesorero del municipio de San Pablo del Monte y ex funcionario lorenista, Arturo Lucio Salas Miguela.
Usted cree que de esa forma se podrá terminar y combatir la corrupción y que las nuevas administraciones municipales serán más eficientes y honradas.
Quién podrá creer que Salas Miguela estará en condiciones de revisar y abrir expedientes a personajes como su ex jefe, el ex alcalde de San Pablo, el ex panista Cutberto Cano Coyotl, quien anda loco de contento presumiendo que recientemente fue designado como director general del Instituto Tlaxcalteca de la Infraestructura Física Educativa ( ITIFE), cuando se sabe que fue puesto para tapar todas las transas y anomalías que el anterior encargado de esa dependencia, Miguel Piedras Díaz, se negó a firmar y solapar, de ahí que no se descarta que pronto saldrán a la luz pública.
Ese atrevido y petulante funcionario lorenista de apellido Cano se siente tan poderoso que no para de presumir que también gobernará los próximos tres años San Pablo del Monte a través de la joven alcaldesa electa, Ana Lucy Arce, quien según sus palabras el triunfo de la verde ecologista se lo debe a él y a su operación electoral.
Por esa razón, será interesante ver cuál será la actitud del OFS sobre estos casos y sobre la designación de funcionarios en los ayuntamientos por parte de los presidentes municipales electos que al parecer están en la sintonía de violar la ley.
El OFS determinó en el 2017 que el entonces director de Obras Públicas de Apizaco, Alberto Palestina Moreno, no cumplía con el perfil profesional estipulado en la Ley Municipal del Estado de Tlaxcala para ocupar el cargo, sin embargo hoy nuevamente el castrado y mandilón alcalde electo de la ciudad riela, Javier Rivera Bonilla, decidió designar nuevamente a ese panista con chaqueta de Morena en ese puesto.
Es obvio que el ex priista Rivera busca gobernar Apizaco con sus amigos del PRI y del PAN, pues lo anterior es evidente por los nombramientos que ha realizado donde los morenistas han sido excluidos del ayuntamiento, lo cual también aseguran que pasará en el municipio de Tlaxcala que pronto estará gobernado por el también Alfonso Sánchez García, hijo del ex gobernador perredista Alfonso Sánchez Anaya.
Por cierto, le cuento que la gobernadora Lorena Cuéllar Cisneros está analizando los nombres de quién podría ser designado el próximo Director de Gobernación de la Secretaría de Gobierno. Se habla que podría llegar una mujer, pero también se habla de un varón que gozaría de la confianza y respaldo absoluto de la mandataria.
El gobierno lorenista ha mostrado en los últimos meses una debilidad y una falta de capacidad para adelantarse, atender y resolver los problemas de gobernabilidad, de ahí que se habla que el próximo funcionario será una persona muy cercana a la mandataria y de resultados.
Será.
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