Con la renuncia de Marcelo Ebrard Casaubón a la secretaría de Relaciones Exteriores, inició el proceso formal de sucesión presidencial en Morena.

 

 

Se espera que antes del 15 de septiembre se conozcan los resultados de la única encuesta que se aplicará para determinar quién será la candidata o el candidato presidencial que contenderá en los comicios del 2024.

 

De acuerdo con la información que ha trascendido de una reunión que sostuvieron el pasado lunes en un restaurante del Centro Histórico de la Ciudad de México, el presidente Andrés Manuel López Obrador con la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo, el secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, el Canciller Marcelo Ebrard Casaubón y el coordinador de los senadores morenistas Ricardo Monreal Ávila que participen en el proceso interno de su partido, se acordaron las reglas a seguir a fin de evitar las rupturas.

 

De confirmarse estos acuerdos, será el 15 de junio cuando las corcholatas que aún tienen algún cargo renuncien definitivamente al mismo a fin de iniciar abiertamente su promoción entre los ciudadanos y las ciudadanas de todo el país.

 

Los aspirantes a la candidatura presidencial de Morena podrán hacer proselitismo entre el 15 de junio y la tercera semana de agosto sin confrontaciones directas ni debates entre los aspirantes.

 

Se tiene previsto una sola encuesta nacional que se aplicará a finales de agosto. Los resultados deberán difundirse antes del 15 de septiembre. El ganador o ganadora de la encuesta será designado como «Coordinador de los Comités de Defensa de la Cuarta Transformación» antes de ser registrado oficialmente como aspirante presidencial.

 

No se necesita ser genio para visualizar que una vez concluido ese proceso inmediatamente iniciarán las negociaciones y los jaloneos para designar a los candidatos de Morena al Senado y a las diputaciones federales, dejando para otro tiempo los nombramientos de los abanderados que contenderán por las diputaciones locales de Tlaxcala, las alcaldías y las presidencias de comunidad.

 

Si los actuales suspirantes tlaxcaltecas al Senado mantienen sus intenciones de conseguir esa candidatura, al menos dos secretarios cercanos a la gobernadora Lorena Cuéllar Cisneros tendrán que renunciar, lo que obligará a la mandataria a realizar nuevamente ajustes en su desgastado y dividido gabinete.

 

Para finales de este año Tlaxcala podría tener un nuevo secretario de Gobierno y de Infraestructura, ya que el ex panista Sergio González Hernández y el junior Alfonso Sánchez García, hijo de ex gobernador Alfonso Sánchez Anaya, respectivamente, deberán separarse definitivamente de sus posiciones para estar en posibilidades de participar en el proceso interno de Morena, en el cual también podría inscribirse la secretaria de Educación Pública Federal, Leticia Ramírez Amaya, así como Roberto Salcedo Aquino, titular de la Secretaría de la Función Pública de gobierno federal, Oscar Flores Jiménez, responsable de la Unidad de Administración y Finanzas de la SEP, entre otros más.

 

Además, no se descarta que los actuales senadores por Tlaxcala, Ana Lilia Rivera Rivera y el ex gobernador José Antonio Álvarez Lima, busquen la reelección o que algunas diputadas federales como la morenista Dulce Silva Hernández y la petista Irma Garay Loredo intenten conseguir esa posición por una negociación a través de las figuras nacionales que impulsan sus carreras políticas, como sería el caso del alcalde capitalino de Morena, Jorge Corichi Fragoso.

 

Seguramente en los próximos comicios veremos caras viejas y rostros nuevos. No lo cuente en voz alta, pero dicen que el ex alcalde capitalino, el panista Adolfo Escobar Jardinez, anda operando para convertirse nuevamente en presidente municipal de Tlaxcala con el respaldo del PAN, el PRI y el PRD.

 

Como señal de que en Tlaxcala se vive un relevo generacional, no pierda de vista a Fernanda Espinosa de los Monteros Cuéllar, hija de la gobernadora Lorena Cuéllar, quien sigue creciendo en las preferencias entre los electores al grado que no tendría ningún problema para disputar una candidatura para una diputada federal o local.

 

El avispero morenista ya se alborotó y conforme pasen los días crecerá la lista de aspirantes al Senado, a las diputaciones federales y locales, así como a las alcaldías y a las presidencias de comunidad, lo que obviamente se traducirá en conflictos y disputas internas que deberá contener y aplacar el débil e intermitente dirigente de Morena en Tlaxcala, el ex priista Carlos Augusto Pérez Hernández, sobre quien pesan dudas si tendrá o no la capacidad para conducir los procesos internos de su partido.

 

El ambiente político en Tlaxcala comienza a calentarse.

 

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