Al celebrar un aniversio más de la promulgación de la Constitución, el orador oficial, Miguel Moctezuma, planteó un escenario virtual y ajeno a la realidad social que aquí vivimos.
Tal vez Miguelito Moctezuma, aprovechó ayer la ausencia de su jefe el gobernador para pronunciar, con motivo de un aniversario más de la Promulgación de nuestra Carta Magna, uno de los discursos con mayor contenido social, distinto por supuesto a la pifia de tendencia dogmática que buscó corromper con el sentido de pertenencia las raíces populares del Revolucionario Institucional.
¿Pero qué relación guardan?
Muy sencillo. Mientras el nuevo líder estatal del PRI, José Luis González Sarmiento, leyó un bodrio de discurso ante un incrédulo auditorio que se resistía ante la propuesta de cambiar Democracia y Justicia Social por, sentido de pertenencia, el recién desempacado (aunque muy apolillado) secretario de gobierno, planteaba un portento, sobre todo emanado del gobierno de un hacendado:
«Aquí en Tlaxcala se acabaron los latifundios y los maceguales; los peones de las haciendas se volvieron los señores de la tierra, libres de acción y pensamiento».
No es broma eh… lo dijo ayer cinco de febrero el segundo de abordo (al menos en teoría) en el organigrama del manchigobierno. Y no fue todo. Tome nota: «Cárdenas aceleró el reparto agrario. En Tlaxcala hay numerosas industrias en donde laboran más jefes de familia obreros que jefes de familia campesinos, hay derecho de huelga, jornada de trabajo de ocho horas, prestaciones sociales, asistencia médica y vivienda».
¡Madre Santa! Digo, esto es para aplaudir a Moctezuma pero, ¿no le jalarán la oreja, no le asestarán un zape, no le reclamarán por andar de boquiflojo?
Ah… de seguro confía en la dificultad mariana para interpretar más de dos frases seguidas. (sobre todo cuando farmacia e instintos rompen con su equilibrio).
«Los peones de las haciendas se volvieron los señores de la tierra»… Oiga, como cuántos años tiene Miguelito Moctezuma. ¿No se equivocaría de película?
Porque en la actualidad, los peones de las haciendas no se volvieron señores de la tierra. Se volvieron desempleados o perseguidos. Y los latifundios nada más se volvieron más dinámicos. Antes se medían en hectáreas. Hoy, en transacciones bursátiles de cuello blanco, a veces muy burdas, que van desde la asignación de la obra pública a precios estratosféricos, hasta la compra de conciencias en el Congreso, con ganancias exponenciales (te doy 180 pero gano verdaderos lingotes áureos).
Ah, también con la compra de chamarritas bien caras… de eso se encargó el carnal del amo, con pingüés dividendos el muy condenado, sinvergüenza, portarrolex.
A ver, dígame, qué diferencia nota entre el acaparamiento de antes en las haciendas, pagando el maíz injustamente y a los peones hasta con pulque, o vales para cambiarlos en las tiendas de raya, y el agandallamiento actual de las mejores posiciones del partido-hacienda, como ha comenzado a trascender con el tío dotor, as del bisturí y el sobrino Mariano, consejero nacional del partido, sí señor con mérito o sin mérito pero lo es aunque no les cuadre. Bueno pues ambos, encabezan, nos dicen, la lista de candidatos pluris a las diputaciones que se decidirán en julio próximo.
Señores, el abuso es el mismo aunque los tiempos son distintos.
Miguelito Moctezuma pasó toda la noche haciendo su discurso (no como Sarmiento, que ya se lo mandaron con la firma, creo que de Ricardo García Portilla). Lápiz en mano y suficiente papel, el secre de gobierno seguramente se dijo a sí mismo: «migue, de aquí a la gloria». Y en verdad los planteamientos corresponden a la realidad. Sutentan el Pacto por México. La Cruzada contra el Hambre.
Pero qué tan reales pueden ser estos propósitos si en lugar de estadista tenemos en el timón a un tahur, que juega, apuesta y él mismo se gana o… pierde, siempre a la cuenta del presupuesto que debiera ser para sacar adelante a esos peones de las haciendas hoy señores de la tierra (ajá).
Una de «28’s»
Mientras el grupo conformado por el actual director de Pensiones, el actual tesorero de Chiautempan y el señor JJ Temoltzin, han vivido de las arcas de San Pablo Apetatitlán, todo es felicidad. Pero cuidado cuando otros llegan al gobierno de ese próspero aunque pequeño municipio, donde la leyenda cuenta que a causa de la gripa la población se redujo a veintiocho familias.
Pues uno de los cuñaos del director de Pensiones, de nombre Salvador Temoltzin Durante, anda pidiendo la desaparición del ayuntamiento de Apetatitlán, ante la pésima administración ejercida (ya van tres cuentas públicas que no entregan). Así que asesorado por su carnal JJ y con el auspicio de otro de sus cuñaos, el zar del auto chocolate, Juan Eloy Berruecos, hace la debida presión para que en el partido tricolor se digan a sí mismos, démosle a Chava la candidatura a alcalde, o de a perdis de diputado local, pa que ya deje de estar jorobando.
Dados cargados
En la conformación de los órganos colegiados del PRI, crece la versión de lo ventajoso que es el trato para parentela e incondicionales del gobernador, y en consecuencia el descontento cunde como pólvora
Hay descontento serio de que se omitió la representación en el Consejo Político Estatal de los sectores con verdadera carga política o en reconocimiento de liderazgos, y se vio desde luego al cuñado, a hijo, a ahijados, amigos y los invariables incondicionales logrados a través de complicidades.
Fíjese, de confirmarse que Fernando León y Mariano González Aguirre, encabecen las listas pluris al Congreso, Rubén Flores Leal, se quedará con las ganas de ser diputado local… Es más, él mismo anduvo diciendo que sería diputado del PRI por la vía plurinomonal.
Ni modo, no se le va a hacer.