La visita oficial a Tlaxcala que el fin de semana realizó el Embajador de Estados Unidos en México, Christopher Landau, fue ampliamente difundida y aprovechada por el gobernador Marco Antonio Mena Rodríguez para presumir la riqueza histórica, cultural, artesanal y gastronómica del estado.

Sin embargo, la versión oficiosa de la estancia de Christopher Landau tiene que ver con la desaparición y asesinato de una mujer estadounidense en el municipio de Chiautempan, crimen que se perpetró el año pasado sin que las ineficientes autoridades de la Procuraduría General de Justicia en el Estado (PGJE) a cargo del oscuro José Antonio Aquiahuatl Sánchez hayan hecho algo para esclarecerlo y castigar al responsable.

El Embajador de Estados Unidos habría venido a exigir que se detenga al culpable de ese brutal homicidio, el cual logró escapar presumiblemente hacia el estado de Veracruz debido a las filtraciones que recibió de agentes de la PGJE y/o de la policía municipal de Chiautempan.

El caso de Daysy habría sido tratado en una reunión entre las autoridades de Tlaxcala y el Embajador. Ahí quedó de manifiesto que las denuncias interpuestas por la ciudadana norteamericana no merecieron ningún trato o atención de la dependencia que controla con pereza José Antonio Aquiahuatl. No hubo ninguna investigación ni acción de protección, de ahí que la indolencia e indiferencia propició el homicidio de una forma brutal de esa mujer.

De acuerdo con la versión no oficial que contaron agentes federales que conocieron los detalles del caso, se sabe que el “académico” procurador hizo quedar muy mal al gobierno de Tlaxcala y a su dependencia porque ahora si no pudo justificar los yerros cometidos en la investigación y porque tampoco tuvo elementos para disculparse por nunca haber atendido la denuncia que la ciudadana de Estados Unidos presentó por violencia familiar y violación.

Los vecinos de Daysy pueden acreditar que eran constantes las llamadas de auxilio que hacía a la policía de Chiautempan, pero como su pareja sentimental es un influyente abogado éstas sencillamente eran ignoradas. En marzo, un grupo de personas que conocían a la estadounidense reportó su desaparición sin que la Procuraduría General de Justicia en el Estado iniciara la investigación formal.

La presión ejercida por los conocidos de la mujer de Estados Unidos finalmente obligó a la procuraduría a arrancar la investigación sin llegar a ninguna conclusión, por lo que una vez que el caso fue planteado a las autoridades norteamericanas éstas intervinieron y pidieron que la Interpol llevara a cabo su propia indagatoria que al parecer dio resultados en tan sólo 20 días.

Con tecnología de avanzada y siguiendo las pistas de los últimos lugares donde fue vista Daysy, los elementos de la policía internacional que operaron bajo una rigurosa secrecía pudieron ubicar que en el patio de una casa-despacho de Chiautempan había restos humanos.

El pasado sábado la Procuraduría General de Justicia del Estado reveló que desahogó un acto de investigación consistente en un cateo en un inmueble ubicado en el municipio de Chiautempan, donde se localizaron y extrajeron restos óseos humanos. En ese acto se llevó a cabo el aseguramiento de una mujer de nombre Araceli N. por el delito de violación a las leyes de inhumación y exhumación.

Un Juez de Control otorgó una orden de cateo a petición del Representante Social, con el propósito de inspeccionar el inmueble ubicado en el barrio de Texcacoac, municipio de Chiautempan, lugar de donde se extrajeron restos humanos o indicios de origen biológico.

Con el mandamiento judicial, la noche del 14 de agosto peritos en sus diferentes ramas y oficiales de la Policía de Investigación se constituyeron en el mencionado lugar, donde observaron en una de las habitaciones una apertura en el piso y tierra ligeramente removida, por lo que excavaron y localizan diversos restos óseos que fueron asegurados y llevados al Servicio Médico Forense, lugar en el que peritos en diferentes ramas científicas realizarían estudios que permitirán determinar sexo, edad, estatura y la identidad de a quién pertenecen.

La autopsia a los restos óseos encontrados reveló que se trataría de una mujer que murió por múltiples golpes. Su osamenta presenta varias facturas.

Todo lo anterior se llevó a cabo mientras el Embajador Landau recorría en compañía del gobernador Marco Mena los Murales del Palacio de Gobierno, el ex Convento de San Francisco y la Basílica de Ocotlán en la capital.

Posteriormente, el diplomático conoció la zona arqueológica de Cacaxtla-Xochitécatl y el complejo turístico Val´Quirico.

Su exigencia de esclarecer el homicidio de Daysy ya estaba siendo atendida y seguramente el diplomático hará la presión necesaria para que el responsable de ese salvaje asesinato sea detenido y puesto tras las rejas.

Si alguien quedó mal con el Embajador de Estados Unidos, la Interpol y su jefe el gobernador Marco Mena, es el procurador José Antonio Aquiahuatl.

Los estadounidenses y los elementos de la policía internacional se llevaron un informe “secreto” que contiene datos sobre el presunto encubrimiento y participación de altos funcionarios de la PGJE con varias bandas, entre ellas, trata de personas.

Ay nanita.

Christopher Landau vino a Tlaxcala a exigir justicia y no a pasear. Así de fácil.