Por lo que se puede observar los diputados locales de la actual legislatura no perdonarán la corrupción y han decido sacar la guadaña para cortar la cabeza y las aspiraciones de aquellos presidentes municipales que presuntamente han malversado recursos públicos para su beneficio y para apuntar sus aspiraciones de convertirse en candidatos a legisladores en los comicios del próximo 6 de junio.
El primero en enfrentar su cruda realidad y ser castigado por el enorme desorden administrativo que registra su administración fue Arturo Rivera Mora que mal gobierna el municipio de Tzompantepec, donde los ciudadanos no sólo se quejan de la falta de los servicios básicos como el agua potable, sino de las condiciones en que operan los policías municipales que carecen de vehículos y equipamiento para enfrentar a la delincuencia.
Rivera Mora que llegó a la alcaldía por el respaldo de PAC se olvidó de ese partido y en los últimos meses buscó el respaldo del PAN, PRI, PRD y hasta de Morena para hacer realidad su absurda obsesión de llegar a despachar como diputado local, porque según él es un brillante alcalde y un mejor político que se merece eso y más.
Hay grabaciones y evidencias de cómo Rivera Mora recorrió varios municipios ofreciendo vales de gasolina para obtener el respaldo que necesitaba a fin de lograr una candidatura a legislador. Lo cierto es que su operación fue tan burda y rupestre que los partidos políticos que llegaron a considerarlo como una opción se enteraron de su torpe actuar y decidieron borrarlo de la lista de probables aspirantes al Congreso del Estado.
Al iniciar el proceso de revisión y aprobación de las cuentas públicas correspondientes al ejercicio fiscal del 2019, los diputados locales encontraron un presunto daño a la hacienda pública por 8 millones 692 mil 421.28 pesos, lo que que representa el 14.30 por ciento del total de fondos manejados en ese año.
Es la segunda cuenta pública reprobada al actual ayuntamiento de Tzompantepec, pues la del 2018 también fue rechazada por registrar inconsistencias contables. La administración municipal de Arturo Rivera rebasó el margen otorgado por la Comisión de Finanzas y Fiscalización del Congreso del Estado para tener la posibilidad de ser avalada.
Hay muchas anomalías como el hecho de que el edil no ingresó a las cuentas bancarias del ayuntamiento recursos propios por cerca de 900 mil pesos, así como pagos excesivos por renta de maquinaria y el sobreprecio liquidado a un proveedor que vendió equipo y material para el alumbrado público.
Los detalles de los excesos y presuntos malos manejos en Tzompantepec pronto se conocerán. El Órgano de Fiscalización Superior (OFS) será el encargado de dar seguimiento a las observaciones pendientes por solventar.
Pero por vía de mientras, los legisladores locales exhortaron a la Contraloría del Ejecutivo del gobierno del estado a aplicar la Ley de Responsabilidades Administrativas a efecto de llevar a cabo los procedimientos resarcitorios a que haya lugar en el caso de la mala gestión de Arturo Rivera.
La reprobación de la cuenta pública de Tzompantepec puso nervioso a muchos alcaldes y a diputados locales como la petista María Félix Pluma Flores, quien empezó a buscar a cada uno de sus compañeros para pedir su ayuda y voto a fin de evitar que el ejercicio fiscal del 2019 que su padre Rubén Pluma Morales llevó a cabo como presidente municipal de Tlaltelulco sea avalado pese a las inconsistencias que se detectaron en las auditorías del OFS.
Y no crea que la cuenta pública de Tlaltelulco es la única que algunos mañosos diputados pretenden salvar, pues también se habla de la desastrosa administración de Apetatitlán donde el tonto edil con aíres de galán de quinta, Eloy Reyes Juárez, pretende obtener la aprobación de sus estados financieros del año pasado a fin de aparecer como candidato del PT a la diputación local por el distrito 8.
La lista y los detalles de los diputados locales que andan jugando a limpiar cuentas públicas pronto se la daremos a conocer, pues es necesario que usted conozca quiénes son los legisladores que por unos pesos y otros arreglos protegen la corrupción en Tlaxcala.