De no existir algún cambio, será este día cuando Morena dé a conocer, por fin, el nombre de su candidata al gobierno de Tlaxcala.
Se comprobará si la que sea ungida será un factor de unidad y si las otras y otros aspirantes a ese cargo se suman al proyecto que resulte ganador.
Se espera un cargada hacia la designación que haga Morena y se termine la simulación, pues no sólo hay priistas, funcionarios estatales y hasta alcaldes que si bien han prometido lealtad al ex partidazo y respaldar al bloque opositor amplio, también han hecho lo mismo y se han comprometido a trabajar por alguna de las probables candidatas (Lorena Cuéllar Cisneros y Dulce Silva Hernández) que impulsa la Cuarta Transformación que encabeza el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
Se da por un hecho que Lorena Cuéllar será la elegida en Morena, aunque hay quienes siguen creyendo que Dulce Silva podría dar la sorpresa.
El gobierno de Marco Antonip Mena Rodríguez y el BOA dan por un hecho la imposición de Cuéllar Cisneros como candidata de Morena, de ahí que han establecido un cronograma de trabajo para no dar ni una ventaja o respiro a la ex delegada de programas de desarrollo de la Secretaría de Bienestar del gobierno federal.
El PRI puso en marcha su maquinaria y prácticamente el sábado ungió a la ex presidenta municipal de Tlaxcala, Anabell Ávalos Zempoalteca, como su abanderada dejando sin ninguna posibilidad al mediocre líder estatal del tricolor, Noé Rodríguez Roldán, quien burdamente secuestró a la estructura del ex partidazo para presionar su designación.
Ayer, el PAN confirmó a través de su dirigente nacional Marko Cortés Mendoza, que un requisito para concretar la alianza con sus otros adversarios es que se designe a una mujer con un perfil competitivo como candidata al gobierno de Tlaxcala.
Para disimular un poco y tratar de jugar a la democracia, Acción Nacional impulsa la participación de la senadora Minerva Hernández Ramos, quien se ha convertido en su carta fuerte para disputar la candidatura del bloque opositor amplio conformado por el PRI, PAN, PRD, PAC y PS, pero su injerencia en ese proceso es de mero trámite porque desde ahora ya se da como un hecho que la elegida es la priista Anabell Ávalos.
Y mientras Morena y sus dirigentes le dedicarán tiempo a tratar de establecer la unidad en su partido y repartir posiciones a los grupos como candidaturas a diputaciones locales, alcaldías y presidencias de comunidad, el bloque opositor amplio concretará en esta semana los siete distritos donde registrarán candidaturas comunes al igual que los 20 municipios de mayor peso electoral donde irán juntos en los comicios del 6 de junio del 2021.
El pasado sábado quedó claro que Marco Mena no dejará solo a su partido y menos a su virtual candidata Anabell Ávalos. El 3 de diciembre durante el Cuarto Informe de Gobierno el mandatario dictó las líneas discursivas a seguir en la futura campaña, mismas que fueron seguidas al pie de la letra en el registro de la ex alcaldesa capitalina como aspirante a la candidatura del ex partidazo, pues en ese evento no se cansó de presumir los logros y resultados del actual mandatario.
La maquinaria priista está operando, lo mismo la estructura electoral del PAN y el PRD. Los orticistas a través del PAC están trabajando en lo suyo y los militantes del PS también. El bloque opositor amplio dará la batalla por la gubernatura de Tlaxcala y Morena y sus aliados se equivocan si piensan que no enfrentarán una real y auténtica competencia.
Al final los pronósticos se están cumpliendo.
Anabell y Lorena se enfrentarán nuevamente en las urnas.
Ambas se conocen y para nadie es desconocido que sus diferencias no son nuevas y que vienen desde hace años cuando militaban en el PRI.
