Este mañana los diputados locales sostendrán un desayuno con el gobernador Marco Antonio Mena Rodríguez, donde seguramente ratificarán sus deseos y anhelos de trabajar unidos y evitar las diferencias políticas que puedan obstaculizar la relación entre ambos poderes, sobre todo cuando el Congreso del Estado está en manos de los legisladores de Morena, el PT y el PES.

Hoy se pondrá a prueba el liderazgo del presidente de la Junta de Coordinación y Concertación Política del Congreso de Estado, Víctor Báez López, quien tiene la tarea de llevar al resto de sus 24 compañeros a la reunión privada que se realizará en Casa de Gobierno con el mandatario Mena Rodríguez.

Los legisladores morenistas seguramente serán los primeros en pasar lista, pues hace unos días recibieron la instrucción de Gonzalo Alfonso López Beltrán, hijo del futuro presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, de respetar el liderazgo del blandengue Báez López y evitar las confrontaciones internas.

El grupo de la chiquillada en el Congreso local, cuya jefatura está siendo disputada por el perredista Miguel Ángel Covarrubias Cervantes y el panista Omar Milton López Avendaño, acudirá y ratificará que está bajo las órdenes del jefe político del estado pese a que en ese conjunto de legisladores el PRI, el Verde Ecologista y Nueva Alianza sólo aportan un diputado cada uno.

Los dos diputados del Partido Encuentro Social Luz Vera Díaz y José Luis Garrido Cruz seguirán la instrucción de Morena y asistirán a la reunión, sin que eso quiera decir que apoyarán todas las decisiones y compromisos que asuma Víctor Báez, quien dicen ya recibió línea de López Beltrán y el líder de su partido Joel Molina Ramírez para apapachar y dejarse querer por el gobernador.

La fracción parlamentaria del Partido del Trabajo era la que no estaba muy convencida de acudir al encuentro privado, porque en la invitación que recibieron los cuatro legisladores no se precisaba si era una reunión de trabajo o un simple encuentro social.

Hasta anoche los petistas encabezados por Irma Garay Loredo mantenían la postura de no acudir al besamanos con el mandatario estatal, por lo que habrá que ver si mantuvieron su postura o si en el transcurso de la noche recibieron la instrucción de sumarse a los diputados de Morena y al PES.

Será en las próximas horas cuando se sepa si esa reunión dejó algo de provecho o si sólo se trató de un desayuno social que llevaron a cabo para conocerse y jurarse respeto mutuo.

Procurador farsante y mentiroso

Como suele ocurrir con funcionarios torpes, el viernes pasado José Antonio Aquiahuatl Sánchez, el farsante procurador General de Justicia en el Estado, no tuvo otra más que explicar sus actitudes de hacendado que tanto criticaba al ex gobernador Mariano González Zarur, pero que le encanta asumir, para explicar que si violentó los derechos laborales del personal de la dependencia al recortar de manera unilateral el periodo vacacional al que tienen derecho.

Su idiota decisión la justificó bajo el argumento que la tomó con el propósito de evitar rezagos en las diferentes áreas laborales de la PGJE y eficientar el trabajo de la dependencia.

Por esa razón, el personal administrativo y operativo gozará de su periodo vacacional completo una vez que haya cumplido con sus objetivos y metas establecidos, según la postura que fijó el procurador en el portal de noticias Nexostxt.

Lo anterior, sin afectar los derechos y con el afán de que no exista una acumulación de trabajo, así como evitar rezagos y pendientes que pongan en riesgo la atención ciudadana y el desahogo de diligencias.

La mentira del chafa procurador es más que evidente, porque difícilmente terminarán con el enorme rezago que arrastra la PGJE en materia de órdenes de aprehensión y que supera por mucho la capacidad de la policía ministerial e investigadora y porque eso implicaría echar abajo el lucrativo negocio que desde hace años genera pasar pitazos, esconder esos mandatos judiciales y chantajear a los probables responsables de algún delito para que paguen y eviten su detención.

El procurador calladito se vería menos tonto. O no.