La mediocridad de Luis Álvarez Landa, quien despacha como Oficial Mayor de Gobierno es insultante, al grado que explica el enorme fracaso que logró en los pasados comicios federales en donde se desempeñó como coordinador en Tlaxcala de la campaña presidencial del priista José Antonio Meade Kuribreña y su pésimo trabajo para realizar la compra de nuevas patrullas para la policía estatal.

Sólo un idiota sería capaz de reconocer que incurrió en acciones ilegales en una licitación pública para beneficiar a un proveedor.

Los funcionarios podrán ser acusados de corruptos, cínicos y ambiciosos, pero jamás de ser tontos o pen.. por llevar a cabo estafas maestras o transas millonarias, porque el sistema está armado y pensado para que en Tlaxcala y en México se realicen negocios ilegales al amparo del poder y del servicio público sin que nadie enfrente la ley por esas irregularidades.

El ex marianista Álvarez Landa decidió salir de su madriguera para asegurar a los periodistas que lo entrevistaron ayer que el concurso para adquirir 200 patrullas y que fue declarado desierto el viernes pasado fue legal y que no existieron dados cargados para beneficiar a algún proveedor en específico.

Cuando no se conecta el cerebro con la lengua y se deja que hable la soberbia combinada con la estupidez, suelen salir desafortunadas declaraciones que dibujan la torpeza del funcionario estatal encargado de esa licitación que de forma hipócrita pide se acrediten las pruebas de los señalamientos que se hicieron en torno al amañado concurso.

Las pruebas y evidencias fueron publicadas en este espacio, por lo que bien vale la pena repetirlas para que ese flojo y retardado funcionario pueda leerlas y entenderlas.

Resulta que las especificaciones solicitadas por el gobierno del estado en la anterior licitación estaban dirigidas a una marca específica, que en ese caso era Ford, lo cual incumplió el artículo 26 fracción IV de la Ley de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios del Estado de Tlaxcala que ordena establecer en las bases del concurso requisitos que garanticen la libre participación.

También en las bases del concurso se exigió que los bienes usados en el equipamiento de la patrullas contaran con “Patentes”, situación que está prohibido incluir en una licitación pública.

El funcionario que hoy se dice respetuoso de la ley solicitó en la licitación una carta garantía del fabricante del equipo y no del fabricante del vehículo, situación que dejaría a las nuevas patrullas sin respaldo de la armadora Ford en caso de sufrir fallas mecánicas o en sus partes eléctricas porque sencillamente la unidad fue alterada.

Durante el apresurado concurso también quedó evidenciada la vinculación de tres concursantes que se inscribieron a fin de garantizar la venta de las patrullas, pues Ford Rivera sería la proveedora de los vehículos, Jomtel Telecomunicaciones sería el distribuidor autorizado en México del equipo de patrullas solicitado en las bases de la licitación y Grupo Comercial Vakart sería el proveedor e instalador de todos los aditamentos en las unidades automotoras.

Lo anterior se demostró y se comprobó que tal situación era violatoria del artículo 36 fracción VI de la Ley de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios del Estado de Tlaxcala.

Además, ya no se pudo documentar los sobreprecios de las patrullas que serían adquiridas, porque el concurso fue cancelado durante la evaluación de las propuestas técnicas y legales, pues los sobres de las propuestas económicas fueron escondidos para evitar más cuestionamientos y las ganancias que implicaría ese lucrativo negocio.

Al final, los proveedores perfilados para ese negocio fueron descalificados con absurdos al no presentar algunos documentos actualizados, pero no dude ni tantito que en la próxima licitación estarán presentes para concretar la venta de las patrullas que ya estaban siendo armadas en el vecino estado de Puebla.

Y si la mentada licitación fue legal, entonces por qué un proveedor ajeno a ese negocio fue amenazado al igual que este reportero.

En fin, la corrupción en el gobierno del estado está presente y pronto empezaremos a documentar algunos casos que sin duda salpicarán a muchos.