El hartazgo de los tlaxcaltecas por la inseguridad que prevalece en el estado es real y pronto se sumarán más voces a la petición que hicieron ayer por la tarde los dueños y conductores de las unidades del transporte público tras el asesinato de uno de sus compañeros y que consiste en exigir la destitución de Hervé Hurtado Ruiz como comisionado estatal de seguridad pública.
El diputado Alberto Amaro Corona no pudo resistir más y decidió emular al ex gobernador Mariano González Zarur, quien siempre traía a flor de piel su misoginia, de ahí que escudado en su posición de coordinador de los legisladores del PRD y con la complicidad y aval del dócil Mariano González Aguirre decidió remover de la Mesa Directiva del Congreso de Estado a la aun perredista Floria María Hernández Hernández.
La grave falta que cometió la perredista fue decir que buscará ser candidata de Morena al Senado, posición que Alberto Amaro sueña con alcanzar pero con el PRD o con una alianza con el PAN si es que logra convencer a los azules de que juntos son invencibles como Pinky y Cerebro.
Después de presumir su logro y su tremendo poder, el también presidente de la Comisión de Finanzas y Fiscalización de Poder Legislativo se sintió con los tamaños y la fuerza para, según él, enfrentarse al gobierno del estado por el tema de los ajustes trimestrales luego de acudir a una reunión del Consejo Permanente de Coordinación Hacendaria.
El líder de tianguistas se aventó una declaración sin sentido que dibuja su verdadera personalidad. Dijo que analiza los mecanismos legales para que al Poder Legislativo le restituyan los recursos de los ajustes trimestrales, bajo el argumento de que se está violando el artículo 299 del Código Financiero.
Su interés por el dinero público es mayúsculo y demuestra que lejos de ser un diputado de izquierda que ve por los más necesitados y las clases populares, le apuesta al capital para obtener un beneficio económico.
Pero alguien le debería decir al bravucón diputado que la ley no es retroactiva, es decir, si bien el pasado 30 de junio la oposición chamaqueo al bisoño presidente de la Junta de Coordinación y Concertación Política Mariano González al reformar el artículo 299 del Código Financiero para que el Congreso recobrara la facultad de distribuir los fondos de los ajustes trimestrales, su aplicación deberá ser a partir del tercer ajuste y no antes.
Al final de la administración pasada la legislatura saliente reformó ese artículo a solicitud del entonces gobernador Mariano González, a fin de que fuera el Ejecutivo el único responsable de distribuir los recursos de los ajustes trimestrales, medida que fue modificada por los actuales diputados que vieron afectada su economía.
Amaro Corona mostró sin ningún recato su ambición en la reunión del consejo y la confirmó con sus declaraciones, sin embargo si se asesora de un buen abogado es muy probable que le digan que su pretensión de recuperar dinero del primero y segundo ajuste trimestral es una ilusión que no tendrá una respuesta favorable.
Si el gobierno del estado se hubiera inconformado por la reciente reforma al artículo 299 del Código Financiero, es probable que las autoridades judiciales le hubieran dado la razón porque hay criterios de la Suprema Corte de Justicia de la Nacional en los que se establece claramente que ningún Poder Legislativo puede reformar leyes a su favor o en su beneficio.
Y es obvio que al cambiarse ese artículo los actuales diputados se benefician por la sencilla razón de que manejan recursos públicos cuya aplicación y destino siempre es un misterio.
Amaro Corona resultó ser toda una fichita. Si siendo diputado local se siente Hulk, no quiero pensar en que se transformará si llega al Senado.
La inseguridad imparable y Hervé Hurtado indiferente
El asesinato de un conductor de una unidad del transporte público a unos metros de la Casa de Gobierno debe ser motivo de preocupación.
La incidencia delictiva sigue a la alza y la estrategia de Hervé Hurtado Ruiz, comisionado estatal de seguridad pública en Tlaxcala, para tratar de contener esa problemática no funciona. Lo suyo es el patrullaje cibernético y no la delincuencia común que cada día gana más espacios y presencia en las calles.
Aficionado a las cartas aclaratorias, el funcionario estatal simplemente no puede con el trabajo y le guste o no hay que decir que los delincuentes le han ganado la batalla en estos casi ocho meses.
Para nadie es desconocido que su sistema de excesivo control ha limitado el actuar de las fuerzas del orden en la entidad. Es una realidad que los reportes que llegan al C4 sobre cualquier ilícito no son compartidos inmediatamente a las diferentes corporaciones policiacas sino hasta que Hurtado Ruiz lo autoriza y eso sucede cuando alguna patrulla de la Policía Estatal ya se hizo presente en la zona.
Esa situación es la que permite que los delincuentes escapen sin enfrentar mayores complicaciones.
Ayer por la tarde se comprobó que el pésimo trabajo de Hervé Hurtado ya se salió del círculo rojo y empieza a permear entre el imaginario colectivo, de ahí que los transportistas hayan pedido la destitución de ese ciberpolicía que ni siquiera tuvo el valor de dar la cara a ese grupo de personas que exigía castigo para los delincuentes que asesinaron a uno de sus compañeros.
La molestia y muestras de inconformidad de los tlaxcaltecas por la inseguridad irán subiendo de tono, porque no ven ninguna reacción contundente de parte del gobierno.
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