Ni de maquillaje requirieron, por ejemplo Alejandro Guarneros y su espeluznante caos administrativo en Salud, o Ubaldo y la extraña desaparición del director de Adquisiciones
Es que las imágenes hablan por si mismas. En la primera puede verse al manchis-fürer arengando a sus animados subordinados, aquí entre nos un conjunto de servidores públicos ya con hartas ganas de tirar la toalla.
Miren por ejemplo las tremendas ganas con las que Oreste de Jesús Estrada Miranda custodia nuestra integridad y nuestros bienes. Bueno, helo ahí aplastado junto con los demás, a los que… ya conocemos, y con esa actitud como pasada una fuerte sesión de programación neurolingüística (si podemos-sí podemos) haciéndonos una de las mejores demostraciones de sus nuevas actividades, a las cuales desempeñan de maravilla.
Esto ocurrió allá por la mañana del martes 27 de julio, un día después que el secre de oro, Jorge Valdés Aguilera, llamase al gabinete completito vía la red social que usa el gobierno para asuntos prioritarios…presentarse en el domo blanco del recinto ferial, atentamente su mero charro Geroge, el de los centavos.
Ahí tiene usted al gabinete en pleno acudiendo a dicha convocatoria. A lo mejor creían que el señor manchis, les iba a dar un bono de productividad (ajá), o que los iba a regañar, o tal vez a platicarles el plan suyo de no dar el Grito de Independencia en Apizaco (oigan ustedes en Apizaco tienen unas ganas de decirle unas cuantas por las malechadas de Romano).
Pues resultó que el llamado era pero para hacerla de guías con los niños que se inscribieron a los cursos de verano organizados por el DIF de Mariana González Foullón.
¿Y adónde creen ustedes que los llevaron?, ¡A la casa de los espantos, sí señores, qué miedo!
El estado se derrumba y nuestros funcionarios andan de patas de perro en el recinto ferial.
Yo creo que eso es vacío de poder. Una actitud indolente y valemadrista cuando aún faltan meses fundamentales para cerrar esta administración. Tienen muchos pendientes. Se han dedicado a dar la espalda a los compromisos, a las sentencias. Siguen en la borrachera generada tras la elección de junio, cuando realmente se aplicaron a fondo, como no lo hicieron el resto del sexenio.
Ojalá ese empeño hubiera sido en la obligación de cada servidor público. No, solo fue para ganar la elección. Para eso sí son buenos. Para andar jalando harta lana en talegas que les cuelgan de pescuezo, y repartirla en aquella que fue una versión actualizada de borrar unas horas la depresión por nuestra miseria, aceptando los billetes que se pueda a cambio de nuestro voto.
Ahora, pregunto verdad, ¿para qué ir a la casa de los espantos si en general los funcionarios son unos zombies?, ¿quiere hacer algún trámite por internet?, no funciona. ¿Se descuidad tantito dejando su auto por ahí? Ya no lo encuentra. ¿Se indigna usted porque los rateros horadan los ductos de Pemex? Ni se enoje, porque van a seguir, puede que con el concurso de al menos dos de los que ve usted aplastados en la primera foto.
Eso es, un gobierno de zombies, convenencieros y desobligados que se quieren hacer los simpáticos porque a su patrón los índices de aprobación de la gente están peores que los alcanzados por el presidente Enrique Peña Nieto, antes que se postrara ante la investigación de Carmen Aristegui respecto a la Casa Blanca, y que saliera a la luz, lo del depa rosado que un empresario le presta a la señora Gaviota. 7.3 de cada diez mexicanos reprueban el desempeño de Peña Nieto. O sea, 2.7 de calificación.
Aquí andamos peor. Lo malo es que quien osa ya no digamos cuestionar a Mariano, sino pedirle un poco de decoro en estos últimos meses de su gobierno, uta… lo regaña, lo escupe y le advierte que si se atreve, por ejemplo a cerrar una carretera, lo mete a la cárcel.
¡Bravo, señor Mariano, cierra usted con menos de 2.7 el gobierno por el que tanto se empeñó, por el que dio la vida entera, así acaba usted!
Tijuana caliente
Sí, claro, la temperatura en esa ciudad fronteriza es muy alta. Ayer que llegó el nuevo Arzobispo, Francisco Moreno Barrón, y mostró una baraja con ese juego a favor de los más pobres, repartido por el Papa Francisco, el júbilo fue desbordante.
Le dieron una bienvenida como al importante líder espiritual que requieren en una zona, acaso con los más altos índices de violencia en el país, que funciona de traspatio de los nada agradables gringos, algunos más pobres que nosotros, a satisfacer sus ansias por tener droga; no sé que sería de esos millones de estadounidenses cuando construyan el muro con el que sueña Donald Trump, qué bien, dejar de tener esas asquerosas visitas de sucios, viciosos y amorales.
El caso es que fieles y autoridades civiles están de plácemes porque llegó el Arzobispo que lleva la intención de superar esa etapa de relajamiento por la cual atraviesa la cúpula católica de allá.
Seguramente su arzobispado será por nota, con esa partitura sin error u omisión, necesarias para un lugar tan falto de un verdadero liderazgo espiritual.
Aquí, dejó muchos amigos. Es el obispo músico venido de Morelia al que un día le llegó el mandato vaticano que lo catapultó a niveles muy importantes de jerarquía.