El mismo Mariano de siempre, echando porras a su régimen de regresión,  en la más absoluta soledad interna

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Que cruel es el tiempo. Transcurrió implacable y hoy pasa factura a quien procuró comportarse como un gobernador rasposo y autoritario, pero mirenlo, hoy se desgañita y sus propios funcionarios lo ignoran.

Preocupado por enviar invitaciones a quienes más fuese posible, no dejó su informe ciudadano de tener mensajes simbólicos para guardarlos en su deteriorado disco duro.

Rosario Robles, por ejemplo con la representación presidencial y ausente el anunciado líder nacional del PRI, Manlio Fabio Beltrones, opacaron la ilusión del moribundo, de aspirar al perdón superior por ser incapaz de controlar su instintivo e improvisado liderazgo.

La primera, por ser una icónica mujer del régimen de Peña Nieto, asentando reglas en el pequeño estado del misógino que,  en palabras propias demoró 24 años en llegar al poder.

El sonirense, porque tuvo cosas más importantes que aplastarse a escuchar una sesión de culto personal de un sujeto con quien ha tenido desencuentro tras desencuentro, incluso atestiguados por el leal Jackson a los desfiguros del agonizante criador de reses bravas metido a mandatario.

Por ejemplo organizó la foto con los aspirantes de Oaxaca y Veracruz, posando en la reunión por la unidad tricolor en ambas entidades federativas (y le sigue, hoy recibe a los aspirantes al gobierno de Sinaloa).

Ya chale

¿Pues qué más sino loas a su atropellado gobierno ciudadano -eso lo dice para pintar su raya con el PRI- y la descripción de obras que  han sentado las bases del desarrollo para los próximos tres lustros?

Se quedó corto. Deben ser más lustros,  nada más que en la dirección contraria,  como quien dice, un largo período de parálisis.

Este es el gobierno de la regresión agrarista. De la compra compulsiva de parcelas para meterlas en la dinámica de la especulación. En Nativitas, por ejemplo, hay un desarrollo mamon en la ex hacienda de Santa Águeda,  sustentada en permisos chuecos, por cierto avalados por la administración de quién ayer presentó en el Centro de Convenciones su última jornada de autoelogio (no lo creo capaz de hacer lo mismo en 2016, porque  entonces será  un auténtico personaje salido de los walking dead.

Para que  fue

Muy hecho a un lado, por ahí -como la muñeca fea de Cri-Cri, por los rincones- el candidato Marco Antonio Mena Rodríguez, una de cuyas cláusulas chiquitas en su contrato de humillación, es no robar cámara al pseudo libanés.

Y cinco ex gobernadores, también insistiendo en no desaparecer del mapa.
Beatriz y su interesante y descuidado papel en Brasil  (ni modo de no venir con manchis nomas por estar en la embajada).

José Antonio Álvarez Lima y su estigma de traidor al PRI. Alfonso Sánchez Anaya, por el estilo, y teniendo que soportar los madrazos del primo manchis quien dice haber rescatado a Tlaxcala de 12 años de retroceso (seis le tocan).

También se vio a Tulio,  bueno lo que  queda del querido Tulio, ah y al alegre Samuel Quiroz de la Vega.

Evento francamente malo sobre el cual ningún espacio nacional se ocupó.  Esa es la verdadera imagen de Mariano González… un equis.

La presión en los hombros de Adriana

Opina la senadora panista que si su partido actua resposablemente debe ponerla de candidata a gobernadora. ¿Y si el paomeado es Alejandro Aguilar López, entonces el PAN será un irresponsable?

Hoy Adriana sopesa su verdadero capital en el PAN. No lo tiene de su lado. Dispone de una parte, pero nada más con ella, fracasa en la urna. Sobre la alianza volvió a decir a Agustín Basave Benítez, que se siente cabuz del tren propuesto por el PRD.

Para ser candidata deberá aceptar las condiciones de su partido, el verdadero, no el bodrio comandado por su mayordomo Carlos Carrión .

La enceguecio la encuesta que efimeramente vio al PAN con ella al frente como un proyecto competitivo.

Hoy hay hasta quien la ve tocando la puerta del PRI. ¿Qué tal si no le abren?