Los plazos legales ya se conocen y ahora sólo falta saber si PAN y PRD van juntos.
El calendario electoral aprobado por los consejeros del ITE estableció plazos fatales para los partidos, sus dirigentes y virtuales candidatos a suceder a Mariano González Zarur.
Prácticamente las dirigencias de los partidos tendrán este mes para definir o negociar una alianza rumbo a los comicios del primer domingo de junio del próximo año. Si no hay acuerdos deberán informar en los próximos días el método que utilizarán para elegir a sus candidatos a gobernador, diputados, alcaldes y presidentes de comunidad.
Los procesos internos de todos los partidos arrancarán el 2 de diciembre y en enero se llevarán a cabo las precampañas a fin de proceder al registro legal de los candidatos a gobernador y diputados locales del 16 al 25 de marzo del 2016.
En cuestión de días se sabrá si Adriana Dávila cedió y aceptó sumarse a Lorena Cuéllar o si la perredista se bajó de la lucha por la gubernatura y finalmente decidió por respaldar a la panista.
Si no hay acuerdo, a partir de diciembre ambas políticas encaminarán sus esfuerzos para preparar sus estrategias que les permita ganar la gubernatura, pero sobre todo mantenerse en los primeros lugares de la intención del voto ciudadano, porque la primera que caiga en las preferencias ya no podrá recuperarse.
El PRI es el instituto político que más avances tiene rumbo a los comicios locales, pues este fin de semana no sólo autorizó a su dirigencia estatal iniciar las negociaciones formales para firmar una alianza total o parcial con otras fuerzas, sino que además determinó que su abanderado al gobierno será designado en una convención de delegados, así como los 60 aspirantes a las alcaldías.
La mitad de candidatos a diputados locales serán electos por convención de delegados y se reservó la otra mitad para que los abanderados sean designados por una comisión especial que se integrará para tal fin.
Los aspirantes priistas a la candidatura al gobierno de Tlaxcala Noé Rodríguez Roldán, Anabell Ávalos Zempoalteca, Guadalupe Sánchez Santiago y Marco Antonio Mena tendrán que afinar sus habilidades para dirigir sus proyectos a un puerto ganador.
Después de 15 de noviembre empezarán a recibir señales claras sobre sus aspiraciones, pues los resultados de las encuestas para medir su posicionamiento serán analizados detenidamente y se abrirá el proceso de negociación interna que evite la fractura.
Sobre las alianzas, el PRI es casi seguro que lleve como aliados al Partido Verde y al PANAL, aunque tampoco se descarta que sume al partido local conocido como PS que encabeza Rosalía Peredo.
En Morena la suerte está echada bajo la virtual nominación de la senadora Martha Palafox Gutiérrez, que goza del respaldo de Andrés Manuel López Obrador.
El PAC estirará la liga para lograr un acuerdo con algún partido nacional como el PRD, aunque en los hechos está más que preparado para ir sólo y para lo cual ya inunda al estado con bardas y espectaculares con la frase “Tlax formación”.
Si en los comicios locales hay cinco o más candidatos a la gubernatura de Tlaxcala, el PRI y su abanderado serán los más beneficiados porque de entrada ya habrá logrado que el voto opositor se pulverice.
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