La caballada en el PRI no solo está flaca sino devaluada **La nueva terna y el debilitamiento de Mariano. ***Hepatitis, nuestro problema con un gobierno de cuarta

Carmen Salinas Candidata PRI Diputada Plurinominal Cuarta Circunscripcion, Calzonzin, Tlaxcala Online

Antaño solía el PRI reservar para alguno de sus destacados miembros tlaxcaltecas la diputación plurinominal por la Cuarta Circunscripción, que incluye a: Distrito Federal, Guerrero, Morelos, Puebla y Tlaxcala.

Esta ocasión, la desdibujada militancia de acá fue ignorada por los altos mandos. Digamos que entró en una severa etapa devaluatoria, e incluyeron en dicha propuesta a personajes de otros lares pues de aquí, como decía el famoso tigre de Huitzuco, Guerrero, Rubén Figueroa Figueroa: “la caballada está flaca”.

Nadie animó al partidazo a fijar sus ojos en Tlaxcala.

Mejor lo hizo con Carmelita Salinas, originaria de Torreón, Coahuila y un ícono del cine nacional, aunque últimamente destacó como productora de cabaret con: Aventurera.

Creo que una de las cintas inolvidables donde la simpatía y carisma de Carmelita, es Calzonzin Inspector, grabada en 1974 en locaciones michoacanas como una abierta sátira a la corrupción e intolerancia del diazordacismo y sus secuelas.

Pero ello no ha sido impedimento para que los tricolores de hoy pasen por alto el espíritu crítico de la viuda del gran músico Pedro Plascencia, con quien procreó a su único y malogrado hijo, del mismo nombre.

En otras palabras, para el partidazo los aspirantes priístas tlaxcaltecas valen menos que una corcholata…

La nueva terna

Rebeca Xicohténcatl Corona, Joaquín Cisneros Sánchez y Emilio Treviño Andrade, conforman la nueva terna propuesta por el gobernador Mariano González Zarur, de donde saldría el sucesor del magistrado Jerónimo Popocatl Popocatl, a unos días que fenezca su vigencia en el Poder Judicial de Tlaxcala.

Joaquín Cisneros Sánchez, actual delegado de Relaciones Exteriores en Tlaxcala, es hijo del ex candidato a gobernador Joaquín Cisneros Fernández, y nieto de Joaquín Cisneros Molina, ex secretario particular del presidente Gustavo Díaz Ordaz.

De incuestionable nivel académico y hasta ilusionado con gobernar Tlaxcala dentro de unos diez años, Cisneros Sánchez, es uno más de los compromisos cumplidos a medias por Mariano, cuyo eventual afianzamiento, liberaría al hacendado del tremendo peso ocasionado por las descortesías a Joaquín, quien fuera compañero de mil batallas y hasta de legislatura en la Cámara Alta.

Emilio Treviño Andrade, es el representante del Congreso ante el Consejo de la Judicatura. Es impulsado por la diputada del Partido Socialista (PS) Patricia Zenteno.

Y tal vez la menos conocida es la jueza Rebeca Xicohténcatl Corona, cuya constancia en el Poder Judicial no contendría a estas alturas la fuerza para defender una causa que suena a relleno de la verdadera disputa, entre el encastado Cisneros Sánchez y el bien querido (al menos de Zenteno) Treviño Andrade.

Compromiso cumplido

Debilitado de antemano, al mandatario estatal no le ha quedado más que atestiguar el desmoronamiento de nombres como el de la ex diputada Mildred Murbatian, a quien los lerdos priístas dieron un apoyo mermado por los oficios del secretario parlamentario, Héctor Martínez García, cuando en la oposición se daba un interesante lapso de apoyo.

Si a Cisneros Sánchez le va como a la Murbatián, estaremos frente al enterramiento mariano en un contexto nostálgico casi aparejado con la agonía de un sexenio entre azul y buenas noches.

¿Imparable Ramón Rafael?

Mientras en el Congreso se dan con todo para filtrar la nueva terna, otros no pierden el tiempo, y avanzan.

Dicen que así ocurre con el magistrado Ramón Rafael Rodríguez Mendoza, a quien la prolongación  como representante del Poder Judicial ante el Consejo de la Judicatura, para impedir su retorno, habrá de terminar nada más en buenos propósitos para no violar el artículo 79, y el magistrado de más que se dispone a ser.

Y al final de cuentas, el sistema de laberintos de corrupción que todo lo tienen controlado en el Judicial habrá de quedar impoluto  muy a pesar del ofrecimiento de Mariano para limpiar a ese poder, tal como lo prometió allá cuando andaba como candidato medio priísta y medio de la oposición, con la que pactó mil compromisos… la mayoría incumplidos.

Hepatitis

A todos nos choca que por ejemplo los gringos nos vean como el país tercermundista, sucio y corrupto, para venir acá a dejarnos su basura y sus armas, a cambio de satisfacer sus incontrolables apetitos de droga (ahí la llevan).

El caso es que, al menos en Tlaxcala nos esmeramos por recibir ese calificativo. Y el sector salud es un doloroso ejemplo de los reiterados brotes de hepatitis, como consecuencia de una política miserable, dedicada a hacer campañas y a engrosar las cuentas de los más ratas que a desplegar lo que debería ser una de las herramientas más poderosas del actual sistema priísta.

Nos pierde la debilidad de médicos y contadores por entrar en el mundo de las comisiones, y las ventas, y en general el latrocinio en este adelantado año de hidalgo.

¿Y cuáles son las consecuencias?

Ya lo verán: enfermedades de tercer mundo. Hepatitis que trata de ser escondida bajo las naguas de la ineptitud del equipo comandado por Alejandro Guarneros… re’ buena gente, dicen, en un ambiente donde la bondad tiene una relación directa con la muerte.

Lo mismo nos puede pasar con brotes de cólera o rabia.

Nuestro tercermundismo no parte de la gente, sino de esta horda de pseudo servidores públicos, buenos para la pachanga y para buscar su perpetuidad en la nómina.

Si la gente se muere, ese es su problema, pues mientras esta despreciable clase política siga hinchando sus bolsillos, hay lo suficiente para regodearse en medio del lodazal.

Ya viene la temporada de lluvias y, vean los drenajes a cielo abierto en la zona de Las Ánimas. No hay poder capaz de sensibilizar a estas autoridades… de cuarto mundo.