Llegó la hora de nuevos y comprometidos apagafuegos porque Mena Rodríguez y Méndez Acametitla, simplemente reventaron.

Caricatura 1, Congreso Marco Antonio Mena, PRI, Salvador Mendez Acametitla, PRD, No Pasan Cuentas Ejecutivo, Tlaxcala Online

No solo han quedado mal en la encomienda de aprobar la cuenta pública del Ejecutivo estatal, hoy, la comisión de fiscalización y la junta de coordinación y concertación política, se culpan mutuamente por dicho incumplimiento.

Teóricamente no tendrían por qué fallar pues obedecen a los mismos intereses, pero en la práctica se trata del amotinamiento de una tripulación urgida de culparse entre sí por los boquetes que hoy los han puesto a pique.

1.- Hacer inmaculados los estados financieros fallidos a la vista de todos, unos más que otros, ha sido un grave error. Asegurar ante un Pleno, suspicaz y unos aliados insatisfechos en sus demandas, que no hay falla alguna en la cuenta pública es una empresa tan grande y complicada, como imposible parece su aprobación sin cuestionamiento alguno.

2.- Quizás operadores menos tensos habrían pugnado por reprobar ciertos rubros –la casa de las Artesanías por ejemplo padece una administración garrafal, igual que el C-4- con el propósito de mantener a salvo temas tan delicados como el de la obra pública. Ello habría despresurizado a la asamblea.

3.- Pero a los subordinados los invadió la soberbia. Y pensaron que la perinola les garantizaba ganar todo. Nunca imaginaron que algunos de sus aliados de la oposición se zafarían así de fácil al primer momento en que los compromisos les fueron incumplidos. Menos pensaron que entre la propia bancada del PRI habría sujetos insaciables, dispuestos a poner las peras a catorce.

¿Cuál ha sido el resultado?

La parálisis que afecta al Congreso del Estado. La violación constitucional a la fecha límite, 30 de octubre, para que todas las cuentas públicas se incluyesen en dictámenes aprobatorios o reprobatorios, según la labor del Órgano de Fiscalización Superior (OFS).

Bueno, esto es consecuencia de las facultades supra legales otorgadas a una comisión, la de Fiscalización, con apariencia democrática… nada más apariencia, porque su verdadera función consistía en confrontar al OFS en caso de dictámenes inconvenientes.

Nadie pensó que ese arbitrio derivaría en el superlativo de corrupción manifiesto por el diputado perredista presidente de la Comisión de Fiscalización, Salvador Méndez: “ustedes (OFS) limítense al trabajo técnico… nosotros nos encargamos de las negociaciones”.

Es decir, la crisis de hoy la podemos atribuir a la voracidad de quienes se vieron ricos y llenos de poder porque podían cambiar dictámenes del OFS.

Graciosamente, Méndez Acametitla, subraya la conclusión de los trabajos de la comisión a su cargo… de hoy en adelante, todo es culpa de la JCyCP. En su lenguaje podríamos interpretar un: “comprometí a tu causa (Ejecutivo) mi pertenencia a un partido de oposición, si no me beneficias ya no cuentes conmigo”.

Este, curiosamente es momento para los emergentes. No tarda en conocerse el nombre del encargado de recoger todos los trozos de los intereses del gobernador, que se hicieron añicos en este encontronazo entre un liderazgo blandengue y un mercenario, improvisado e irresponsable.

Amenazas

Por si los desacuerdos entre priístas y perredistas, otrora cómplices, no fuesen suficientes, el grupo parlamentario panista reveló ser víctima de actos intimidatorios tras radicalizar su postura en torno a las cuentas públicas del Poder Ejecutivo de Tlaxcala.

Llamadas anónimas han advertido a legisladores panistas desde daños físicos hasta incriminaciones legales, según los afectados.

Y en medio de esta situación crítica, poco aporta quien vea en la extorsión el camino ideal para salvar los intereses marianos.

Poco informado

Parece que mandos medios y otros más bajos, han tomado el control de las acciones, provocando desinformación y confusión en un coordinador de los esfuerzos, enterado a medias o, después de haberse tomado las decisiones.

El hartazgo inunda el desempeño de quien en 2010 sentía posible el cobro de tantos pendientes.

Y no es exageración elucubrar en episodios donde el interesado prefiera tirar la toalla tras haber inscrito, como quiera que sea, su nombre en la historia moderna.

Aspectos tan incómodos como reclamar el papel de Mariano González Aguirre, en la administración del estado, son usados por la propia burocracia gobernante para tomar acciones a nombre de su superior. Lo grave es que ellos mismos lo propician.

Los tamaños de Richie

Al presidente-aspirante del tricolor se le veía como el germen inocuo del marianismo para un descobijado tercer distrito electoral federal. No era duro pues, negociar a tan frágil personaje.

Pero del propio PRI ha surgido la figura de Teodardo Muñoz, como una especie de protesta de una militancia, mayor a la que en su vida ha visto el dos veces doctor (y criado en el comunismo).

Dicen que eso no le gustó a Alfonso Sánchez Anaya pues rompería el equilibrio pactado de origen entre estos que se sienten dueños del estado.

1.- De qué manera se entera uno del peso real de los políticos, como ese presidente-aspirante-inocuo y sin vigor.

2.- Está en riesgo el pacto ese del que les hablaba. Y si Teodardo le sigue, y el PRI se fortalece en el 3º, comenzará la guerra sin cuartel… acaso la parálisis legislativa es parte de esos enfrentamientos.