Es un concierto destructivo que no piensa dejar piedra sobre piedra, al cual se incorporaron solistas como un juez, encargado de hundir el estoque a quienes de manera colectiva habían solicitado el beneficio del amparo ente la justicia federal.
Al huracán marianista cuyo encargo es no dejar piedra sobre piedra, se habría sumado un elemento más para añadir saña al aplastamiento de los notarios de reciente desempaque. Bueno no a todos, porque los hay (como el junior de Aris Calva, entre otros digamos de corte incondicional) recorriendo uno como calvario light, con la esperada luz al otro lado, eso sí.
Don Otón Manuel Ríos, de planta en el Juzgado 28 de Distrito llegó a Tlaxcala hace como once años, y desde entonces aplica a fondo su carácter de juzgador de hierro. Ha de ser por eso que crió fama entre los integrantes de ese gremio, varios de los cuales manifestaron su preferencia por mantenerse a distancia (y de ser posible evitar cualquier tipo de relación).
En ese contexto, a dicho funcionario del Poder Judicial Federal se atribuye el rechazo de cada una de las solicitudes de amparo presentadas por los notarios con patente recién desconocida.
El tiempo transcurre y el poder suma decíamos, componentes proclives a sepultar a los fedatarios que nacieron con mala estrella y a la hora más inconveniente.
Deducimos que a los dieciséis casos se les pasó por delicados filtros, para aplicar diversas fórmulas (sí, a los orticistas les aguardan momentos aciagos, pero a los más identificados con aquella corriente, pues cómo le diré… ¿ha escuchado de las enfermedades incurables?), bajo la premisa disuasiva y efectiva que halló éxito pulverizando cualquier posibilidad de cohesión.
Entonces cada quién comenzó a ver qué hacía para salvar su hacienda particular. y cada quién tuvo que rascarse con sus propias uñas.
El resultado ya lo puede usted ver.
Creo que más o menos la mitad de los notarios (por sus innegables nexos con el ex mandatario estatal) no observará tregua en la insistencia marianista de exterminarlos.
Y la crueldad de don Otón es prueba fehaciente de que el lío se complica, que puede llevar años o de plano, no hay posibilidad de subsistencia.
Parte del plan
Corre la versión de que uno, el más viejo de todos los notarios jóvenes (qué contradicción verdad) optaría por retirar cualquier recurso en contra de manchiproceso, con un atractivo futuro, mediano y no tanto:
1.- Es posible su inclusión en el gabinete. A lo mejor en lo que será la dos veces demolida Segob con Anabel y Noé al frente de ella. Pero no crea que ello obedezca a los grandes talentos como profesionista, sino a los efectivos resortes a su favor, uno de los cuales responde al nombre de Humberto Moreira.
2.- Perdida la patente, aguardaría un tiempo perentorio –bajo formal promesa- que la misma sería otorgada a la joven su vástaga. Y así, todos ganan. Bueno no todos. Hay unos con sino de fracaso desde ahorita mismo.
Como puede usted ver, si la defensa ha sido intensa, el ataque es irreversible.
Se actúa con la premisa de tirar a todo lo que huela a Ortiz, y no culpo al actual dueño de las decisiones, pues seguramente uno de sus proyectos es causar el mayor daño posible a su antecesor, de quien no puede ni imaginar como eventual ganador de la elección federal, pues entonces adquiriría la inmunidad necesaria para no tocarle ni un pelo.
El mapa de antros y prostíbulos
La petición del diputado Fulgencio Torres Tizatl, para elaborar una prosti-ruta fue formulada en los terrenos de un tremendo realismo en busca de eliminar las condiciones necesarias para la trata de personas.
Si la petición se hubiera hecho a través de alguien más le asistiría mayor credibilidad, mas a cargo del bohemio y popular representante, el intento pudiera caer en una especie de vacilada.
Entre los inquilinos del edificio de Allende 31 se le conoce como el “prostipirumapa” y los mal pensados le ven formas como de un atlas para usarse en uno de los incontables momentos de convivencia en los que suele pensar cada fin de semana más de una docena de representantes populares. Y creo que entre ellos se encuentra el señor Torres Tizatl.
Que se usen los grandes ahorros del sexenio
La economía de la enorme mayoría de los gendarmes tlaxcaltecas es tan raquítica que al jefazo a su cargo, mister Orlando May Zaragoza, se le dificulta lograr un verdadero compromiso, partiendo del único y gran valor mediante el cual se logra la lealtad: la palabra empeñada.
En estos tiempos globalizados y de alta tecnología, el gremio de los tiras se encuentra más que desfasado.
Vamos, lo pudiéramos comparar con la clase interesante impartida a un alumnado que a diario se presenta con la panza vacía en el aula de los trabajos más rudos y sin fin.
Así que sería muy bueno destinar una pequeña parte de lo ahorrado en este sexenio a los endebles ingresos de quienes tienen bajo su encargo la seguridad de nosotros y nuestro patrimonio.
Hombre, con tan baja percepción, cómo quieres una evaluación positiva. Antes di que los polecías tienen aliento para presentarse a cumplir con su obligado turno.
Ahora bien, tantos burócratas han sido cesados que sus cheques seguro hacen una vaca bien gorda, para dividirla entre los pupilos de don Orlando May.
Está bien apelar a su lealtad de servidores comprometidos, pero no les caería mal un estímulo a su pedregoso camino, pues las penas con pan son buenas…
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