Beatriz Paredes Rangel ha sido, es y será un factor de poder no sólo en el PRI sino en Tlaxcala.

 

 

La ex gobernadora tiene buen olfato político y quizá es la priista más experimentada que sabe leer muy bien los tiempos de la sucesión y la forma en que hay que jugar ese proceso en Tlaxcala.

 

Su estilo puede gustar o no, pero lo que es un hecho es que siempre aparece como aliada del gobernador o gobernadora en turno.

 

Con la actual mandataria Lorena Cuéllar Cisneros el rompimiento o distanciamiento se dio antes de lo programado, pues la salida de dos beatricistas puros del gobierno estatal como Enrique Padilla Sánchez y de Elia Sánchez González, ésta última coordinadora de Radio, Cine y Televisión de Tlaxcala (Coracyt), obligó a la actual senadora a asumir el control del PRI y de sus candidatos rumbo a los comicios del próximo 2 de junio.

 

La tlaxcalteca intentó convertirse en la candidata presidencial del PRI, el PAN y el PRD, pero no logró su objetivo, de ahí que utilizó su posición para obligar a Alejandro Morena Cárdenas, líder nacional del PRI, a ceder posiciones y el control del ex partidazo en Tlaxcala, lo que frenó las intenciones de los marianistas de manejar para sus intereses ese instituto político.

 

Beatriz Paredes impuso a Anabell Ávalos Zempoalteca como dirigente estatal y más tarde como aspirante al Senado, con lo cual hasta ahora tendría asegurada su llegada a la Cámara Alta del Congreso de la Unión como la primera minoría al mantener una ventaja considerable sobre los otros contenientes del PT y del PVEM.

 

La noche del miércoles, Beatriz Paredes reunió a los candidatos priistas a diputados locales juntos con la abanderada al Senado y a la diputación federal, así como a militantes considerados como cabeza de grupo y a algunos aspirantes a las presidencias municipales para hacer realidad la unidad y garantizar un trabajo real y sin simulaciones a fin de lograr triunfos electorales.

 

El encuentro se llevó a cabo en el Hotel Presidente Intercontinental de la ciudad de Puebla. Ahí la clase política del PRI tlaxcalteca estuvo presente y salió en la madrugada del jueves más que motivada para dar la pelea.

 

Al hacer uso de la palabra, Beatriz Paredes aprovechó parte de su discurso para aclarar que Anabell Ávalos sería senadora, pero de inmediato aclaró que eso no la hacía candidata a la gubernatura como todos estaban pensando, pues precisó que ese sería otro proceso y que el partido estaría obligado a considerar otros perfiles.

 

Las palabras de la senadora tuvieron un efecto más que positivo en Mariano González Aguirre, hijo del ex gobernador Mariano González Zarur, porque asumió que Paredes Rangel le abrió la puerta a la sucesión prevista para el 2027.

 

Hasta ahora son pocos los detalles que se han filtrado de ese cónclave priísta, sin embargo los aspirantes a los diferentes cargos de elección popular que están en juego salieron más que motivados para tratar de competir y alcanzar el triunfo en las urnas.

 

Beatriz Paredes está construyendo la base que le permita armar poco a poco el bloque opositor que intentará conformar para enfrentar a Morena en el 2027. Intuye que el actual partido en el poder saldrá debilitado en los actuales comicios y que el lorenismo perderá fuerza al evidenciar que su grupo no fue capaz de ganar la primera minoría al Senado ni arrasar en las elecciones para diputados locales y presidentes municipales.

 

Por cierto, el PRI sigue en la lucha para lograr la aprobación de sus candidatos a diputados locales que el Instituto Tlaxcalteca de Elecciones se negó a validar por algunas inconsistencias. El caso ya se encuentra en los tribunales y pronto se sabrá si los priistas tienen la razón o si ésta le asiste a la autoridad electoral.

 

Algunos dicen que el ex partidazo se quedará sin candidatos porque su impugnación está mal y porque ésta fue presentada de manera extemporánea, sin embargo otros aseguran que en breve se confirmarán las nominaciones y se evidenciará que el ITE está coludido con Morena.

 

Pronto veremos quién tiene la razón.

 

Para concluir, le cuento que la disputa por la candidatura del suplente del abanderado al Senado José Antonio Álvarez Lima concluyó.

 

El INE ya confirmó que el suplente de Álvarez Lima es Luis Vargas González, con lo cual termina la controversia legal que sostenía el ex alcalde capitalino Jorge Corichi Fragoso, quien pese al revés se mantendrá como coordinador de la campaña del ex gobernador y de la actual senadora que busca también la reelección, Ana Lilia Rivera Rivera.

 

Corichi Fragoso ha demostrado que es un buen operador y que pese al abandono que los candidatos al Senado por Tlaxcala han sufrido por parte de la dirigencia de Morena y del equipo de la gobernadora Cuéllar, éstos siguen sumando simpatías y afianzando la ventaja que llevan sobre sus adversarios.

 

Por cierto, dicen que una vez más se movió la visita de Claudia Sheinbaum Pardo, candidata presidencial de Morena a Tlaxcala, la cual estaba prevista para finales de abril, específicamente en el arranque de las campañas de los candidatos y candidatas a diputados locales y presidentes municipales.

 

Ahora, se dice que la ex jefa de Gobierno de la Ciudad de México estará en Tlaxcala el 11 de mayo y que esa será la única ocasión que visite la entidad durante su campaña presidencial.

 

Será.

 

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