A los partidos políticos les restan 21 días para definir o ajustar su estrategia para enfrentar los comicios locales del 2 de junio, pues de eso dependerá sus posibilidades de obtener más posiciones o de perder presencia en el Congreso del Estado.
El 29 de febrero vence el plazo para que los institutos políticos definan si establecerán candidaturas comunes o irán solos en los comicios para diputados locales.
Si bien el PRI y el PAN registraron a principios de año la coalición denominada Fuerza y Corazón por Tlaxcala, con la cual competirán en los 15 distritos locales de mayoría, no se descarta que ese acuerdo sea desconocido de un momento a otro para optar por las candidaturas comunes a fin de abrir espacios al PRD que fue relegado, sobre todo cuando las encuestas revelan que ese grupo sería más competitivo si también van juntos en la elección de diputados.
El PRI ya tiene en su cancha la propuesta y si decide apoyarla deberá desconocer el acuerdo de coalición con el PAN para avanzar a las candidatura comunes que modificará el pacto que establecía que los priistas pondrían abanderados en 8 de los 15 distritos, es decir, el 1 de Calpulalpan, 2 de Tlaxco, 3 de Tetla, 4 de Apizaco, 7 de Tlaxcala, 11 de Huamantla, 13 de Zacatelco y el 14 de Papalotla.
Mientras que el PAN haría lo propio en los distritos 5 de Panotla, 6 de Ixtacuixtla, 8 de Contla, 9 de Chiautempan, 10 de Huamantla, 12 de Teolocholco y el 15 de San Pablo del Monte.
El tiempo ya se convirtió en un factor que empezó a jugar en contra de los partidos políticos, toda vez que les restan 21 días para recomponer o definir su estrategia para la elección de diputados locales en Tlaxcala.
Morena y sus aliados el PT, el PVEM, Nueva Alianza, Redes Sociales Progresistas y Fuerza por México Tlaxcala deberán acelerar sus negociaciones y resolver el caso de las diez candidaturas comunes que pretenden armar para enfrentar los comicios del 2 de junio.
Se sabe que Morena pretende reservar cinco distritos donde existe una baja competencia opositora y prácticamente está asegurado el triunfo, para ceder al PT y al PVEM dos distritos a cada uno de las candidaturas comunes.
En ese sentido se entregará una candidatura común a Nueva Alianza, a Redes Sociales Progresistas y a Fuerza por México Tlaxcala. Finalmente Morena se quedará con tres distritos bajo esa figura, con lo que buscará asegurar la misma presencia que tiene en la actual legislatura y que le ha garantizado el control del Poder Legislativo.
Lo malo para sus aliados y Morena, es que las pláticas no han aterrizado en propuestas concretas de nombres ni tampoco se han definido los distritos locales que entrarán en las candidaturas comunes, razón por la cual hay incertidumbre y nerviosismo porque el tiempo sigue avanzando y el plazo para definir esas fórmulas vence el 29 de febrero.
Los diferentes estudios de opinión revelan que la intención de voto en Tlaxcala no será lineal, porque cada vez es más creciente el porcentaje de electores que está optando por el voto diferenciado.
Si bien existe una consistencia en las tendencias del voto para la presidencia de México, al Senado y a las diputaciones federales, en lo que respecta a los legisladores locales y a las presidencias municipales no se replica esa preferencia.
Es evidente que en la entidad existe el elector cambiante o el votante inestable o volátil, el cual se caracteriza por ciudadanos y ciudadanas que su lealtad a cierta fuerza política no es tan fuerte y tiende a cambiar de acuerdo con su conveniencia.
Los plazos se agotan y los partidos deben aprovechar el tiempo.
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