Ante la complicada meta que la virtual candidata presidencial de Morena, Claudia Sheinbaum Pardo, le impuso a la gobernadora de Tlaxcala, Lorena Cuéllar Cisneros, de sumar 550 mil votos para los comicios del próximo 2 de junio, en la entidad han empezado a llegar “operadores” que están ofreciendo sus servicios para atiborrar la urnas con cientos de sufragios.

 

 

Trascendió que la mandataria no le tiene confianza a sus operadores políticos que en el 2021 la llevaron a conseguir la gubernatura y a convertirse en la mujer más votada de Tlaxcala, porque se da por un hecho la contratación de ex funcionarios poblanos que trabajaron en el gobierno morenista del fallecido Luis Miguel Barbosa Huerta.

 

Se trataría de un foráneo más que responde al nombre de Pierre Ramos Luis, quien se desempeñó como subsecretario de Desarrollo Político de la Secretaría de Gobernación del estado de Puebla.

 

Se dice que este personaje junto con el primo del ex gobernador poblano, Julio Huerta Gómez, operó los comicios del 2021 entregando buenos resultados para Morena.

 

El rumor es que Pierre Ramos Luis ya se hizo presente en la abastecida Secretaría de Bienestar de Tlaxcala, dependencia que controla la hija de la gobernadora, María Fernanda Espinosa de los Monteros Cuéllar.

 

La presencia del nuevo funcionario foráneo cayó muy mal en esa dependencia estatal, ya que empezó a amenazar a los trabajadores que no están nada contentos con la llegada de operadores que sencillamente desconocen la entidad.

 

Sin embargo, la que dicen que anda loca de contenta porque su dependencia comandará el ejército electoral para las elecciones del 2024 es María Estela Álvarez Corona, titular de la Secretaría de Bienestar de Tlaxcala, lo cual resulta absurdo porque no nos habían dicho y asegurado que los gobiernos de Morena eran diferentes al PRI y al PAN.

 

Trascendió que al interior del Colegio de Bachilleres de Tlaxcala las cosas y el clima laboral no anda bien y menos cuando el control de ese subsistema educativo está en manos del poblano José Alonso Trujillo, quien después de siete meses no ha podido hacer click con los trabajadores.

 

El malestar contra el director general del Cobat viene creciendo y éste se hizo presente hace unos días en el convivio navideño que la institución organizó para su personal.

 

Momentos antes de que se sirviera la comida, los trabajadores empezaron a golpear los platos con los cubiertos para exigir el pago de un retroactivo que estaba pendiente y de otros adeudos más, hecho que molestó a Alonso Trujillo que en ese momento decidió retirarse ante su incapacidad para dar una respuesta.

 

Trascendió que un diputado local anda feliz porque la gobernadora Cuéllar ha recurrido a compadres y amigos suyos para ocupar posiciones en la administración estatal.

 

Juan Manuel Cambrón Soria, el legislador perredista que ha asumido el papel de real opositor al gobierno lorenista y morenista, puede presumir que su compadre el ex consejero electoral Norberto Sánchez Briones fue designado hace unos días como Director de Gobernación de la Secretaría de Gobierno y que su ex secretario particular Arturo de Casa Vega fue nombrado por el Congreso del Estado como del Instituto de Acceso a la Información Pública y Protección de Datos Personales de Tlaxcala (IAIP-Tlax).

 

No quiero imaginar qué piensan los lorenistas que no sólo han sido relegados por foráneos, sino por personajes ligados a adversarios de la mandataria.

 

Lo anterior ha de doler y mucho.

 

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