La equivocación de cifras y la manipulación de datos oficiales que se han difundido con motivo del Segundo Informe de Gobierno de Lorena Cuéllar Cisneros abrió la caja de pandora, hecho que puede resultará muy negativo para la actual administración, pero en especial para los funcionarios que insisten en engañar a su jefa.

 

 

Aunque los encargados de la difusión y la contratación de los espectaculares y lonas relativos al informe lo nieguen, en los hechos se optó por pagar nuevamente esos materiales para corregir los evidentes errores que contenía esa publicidad, sin embargo dieron la pauta para corroborar los datos que se manejan como logros cuando en realidad no lo son.

 

Por ejemplo, la publicidad oficial presume la cifra histórica de que Tlaxcala alcanzó 15 mil trabajadores afiliados al IMSS, pero resulta que en el 2023 se generaron 5,116 empleos, es decir, 1,668 menos que los reportados en el 2022 que en total fueron 6,784.

 

El año pasado la entidad cerró con 109 mil 884 trabajadores con seguridad social, cifra que creció 6.6 por ciento con la reportada en el 2021 que fue de 103 mil 100 empleos registrados ante el IMSS.

 

No se usted, pero me queda claro que el desempeño y eficiencia del secretario de Trabajo y Competitividad, Noé Altamirano Islas, sencillamente deja mucho que desear porque no logró superar lo alcanzado en el 2022.

 

Pero no crea que es el único funcionario lorenista que jugó con las cifras oficiales, pues está el caso de Javier Marroquín Calderón, quien desde que inició la administración se ha dado a la tarea de difundir cifras poco creíbles.

 

En la publicidad oficial y en declaraciones del funcionario poblano se ha insistido que la entidad ha acumulado en los últimos dos años una inversión de 15 mil millones de pesos a través de la llegada de 29 empresas y la expansión de otras 23.

 

Sin embargo, el dato de inversión es imposible de corroborar, porque ni siquiera sumando la inversión nacional y extranjera nos arroja tal cantidad, de ahí que se duda que esa cantidad sea real. En segundo lugar, Tlaxcala no es la quinta entidad con mayor captación de inversión extranjera directa, según los datos de la Unidad de Inteligencia Económica Global de la Secretaría de Economía.

 

De acuerdo con la información disponible, Tlaxcala reporta un total de inversiones de 7 mil 906 millones de pesos, poco más de la mitad de la cifra que maneja el gobierno lorenista que es de 15 mil millones de pesos en los últimos dos años.

 

Habría que ver cómo manejan las cifras y corroborar que tanto manipulan la información, porque no se sabe si el Centro de Distribución de Walmart que se instalará en Huamantla ya fue contabilizado dos veces, pues la primera vez se presumió esa obra en diciembre del 2021 y en enero del 2022 cuando se aseguró que se canalizarían 3 mil millones de pesos y que el centro iniciaría operaciones en 2024, con lo cual se tenía proyectado generar más de 1,200 empleos directos.

 

Resulta que de enero del 2022 a la fecha no se hizo nada y por lo tanto es obvio que no se invirtió ningún peso de lo que se había anunciado, ya que a mediados de noviembre de este año la gobernadora Cuéllar y los directivos de Walmart manejaron nuevas cifras y nuevas fechas.

 

Ahora ese centro tendrá una inversión de 4 mil 800 millones de pesos, generará más de 896 empleos directos permanentes y tendrá la capacidad de atender a más de 680 tiendas y clubes de Ciudad de México, Hidalgo, Oaxaca, Puebla, Tlaxcala y Veracruz. Se espera que esté funcionando a finales del 2025.

 

Lo anterior quiere decir que esos 4 mil 800 millones tampoco han sido ejecutados y que ese mentado Centro de Distribución de Walmart sigue siendo un proyecto.

 

La manipulación de la información oficial puede convertirse en un serio dolor de cabeza para la mandataria que en mi opinión sigue siendo engañada por sus funcionarios, quienes para presumir que trabajan y que son eficientes interpretan la información a su conveniencia que al final termina siendo una mentira.

 

Como es el hecho de que en dos años 80 mil tlaxcaltecas abandonaron la pobreza gracias a los programas sociales del gobierno lorenista, lo cual resulta algo muy grave porque lo que pasó es que esas personas dejaron de estar en condiciones de pobreza extrema, pero al final siguen siendo ciudadanos y ciudadanas que enfrentan al menos una carencia social (rezago educativo, acceso a servicios de salud, acceso a la seguridad social, calidad y espacios de la vivienda, servicios básicos en la vivienda y acceso a la alimentación) y sus ingresos son insuficiente para adquirir los bienes y servicios que requiere para satisfacer sus necesidades alimentarias y no alimentarias, por lo que siguen siendo pobres.

 

Este día se entregará al Congreso de Estado el documento oficial del Segundo Informe y éste se podrá desmenuzar para comprobar qué tanto se avanzó en comparación con el primer año y que tanto se ha logrado la transformación, la cual sólo la ven los lorenistas porque los tlaxcaltecas siguen percibiendo inseguridad, escasez de medicinas, falta de obra pública, nulo combate a la corrupción y otros problemas más.

 

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