Una vez que se conocieron los nombres de los 21 aspirantes a ocupar el cargo de comisionado o comisionada del Instituto de Acceso a la Información Pública y Protección de Datos Personales, habrá que ver si los diputados aplican la ley y cumplen con lo que se establece en la convocatoria, pues es obvio que algunos prospectos no deben avanzar a las siguientes fases de ese proceso legislativo.
Cómo ayer se le comentaba, se registraron 21 personas que de acuerdo con una primera revisión algunos serán rechazados por no cumplir los requisitos o porque no se ajustan a los criterios que exige la convocatoria y la ley.
La lista de los aspirantes se integran por:
José David Cabrera Canales, académico de la Universidad Autónoma de Tlaxcala y que ya ostentó el cargo de comisionado.
Rocío Flores Xochitiotzi, encargada del área de transparencia del Despacho de la Gobernadora y a quien se le reconocen funciones de dirección.
Arturo De Casa Vega, funcionario lorenista de la Secretaría de Desarrollo Económico, donde se desempeña como jefe de oficina del área Impulso al Comercio Exterior. Ejerce funciones de mando en la administración pública estatal.
Joan Karlo Chavarría Hernández, profesor de Educación secundaria foránea.
Mayra Cuahutle Saldaña, quien labora en el Tribunal Superior Agrario, como profesional ejecutiva de servicios especializados, misma que también cuenta con funciones de mando.
Samuel Morales Pulido, integrante de la plantilla del Tribunal de Conciliación y Arbitraje del Estado de Tlaxcala donde se desempeña como Secretario Técnico de la Comisión de Carrera Judicial ejerciendo funciones de mando. sujeto obligado de la Administración Pública Estatal
Elsa Cordero Martínez, ex magistrada que recibe haber de retiro por parte del Poder Judicial del Estado de Tlaxcala. Además ocupa un cargo de dirección en el Gobierno Federal (Tribunal Superior Agrario) y desempeña funciones de dirección. Es amiga del jurado Francisco Mixcoatl Antonio.
Fernando Flores Xelhuantzi, actualmente es secretario de Estudio y Cuenta del magistrado Miguel Nava Xochitiotzi en el Tribunal Electoral de Tlaxcala.
Julio Rafael Hernández Lucido, académico de la Universidad Tecnológica de Tlaxcala.
Iván de la Fuente Cruz, secretario de Estudio y Cuenta del actual comisionado del IAIP, Didier Fabián López Sánchez.
Erick Tonix Quechol, titular de la Unidad de Transparencia del Instituto Tlaxcalteca para la Educación de los Adultos.
José Alejandro García Vallejo, director de Desarrollo Social del Ayuntamiento de Tlaxcala.
Dagoberto Flores Luna, ex secretario técnico Tribunal Electoral de Tlaxcala.
Héctor Casas Toriz, encargado del Jurídico del ayuntamiento de Atlangatepec.
Zeus Mena López, familiar del diputado priista Fabricio Mena Rodríguez y actual jefe de unidad de Protección de Datos Personales del IAIP.
Maribel Zistecatl Márquez, secretaria de Estudio y Cuenta de la presidenta del IAIP, Maribel Rodríguez Piedras.
Lucero Romero Mora, presidenta del Comité de Participación Ciudadana y de la Junta de Gobierno del inservible Sistema Anticorrupción del Estado de Tlaxcala. Ejerce funciones de dirección.
Jaime Martínez Sánchez, funcionario de la Consejería Jurídica del Ejecutivo del Estado de Tlaxcala, pues se desempeña como jefe del departamento de Expropiación de Inmuebles. También realiza funciones de mando. Es amigo del jurado Francisco Mixcoatl Antonio.
Marlene Tlapale Tlapale, ex secretaria particular de la presidenta de la CEDH (2022). Se sabe que ya laboró en la Comisión de Acceso a la Información Pública del Estado de Tlaxcala.
Sara León Ramos, secretaria técnica del Comité de Transparencia del Tribunal Electoral de Tlaxcala.
Sandy Consuelo Torres Delgado, ex secretaria estatal Jurídica del Partido Redes Sociales Progresistas.
Hasta aquí la lista.
Ahora, habrá que ver si los diputados y las diputadas locales se ponen abusados y aplican la ley y la convocatoria al pie de la letra, en donde se establece que no podrán participar aquellos servidores públicos que tengan funciones de mando o de dirección.
Llama la atención que para ser comisionado del IAIP exijan una residencia en la entidad no menor a cinco años, cuando hace unas semanas modificaron la Constitución local para cambiar ese requisito y establecer que sólo con tres años de residencia se puede estar en condiciones de ser designado como Secretario de Gobierno.
Lo anterior evidencia claramente que los legisladores tlaxcaltecas sencillamente cambiaron la ley en beneficio del actual titular de la Secretaría de Gobierno, el morelense Luis Antonio Ramírez Hernández.
Esperemos que el proceso de designación del nuevo comisionado de la IAIP sea transparente y legal, pues con los antecedentes que se tienen no dude ni tantito que se esté preparando la llegada de un recomendado o un personaje gris y servil al lorenismo, como resultó el auditor del Órgano de Fiscalización Superior, Arturo Lucio Salas Miguela, quien permanece encerrado en su oficina en espera de las instrucciones que le haga el hoy poderoso David Álvarez Ochoa, secretario de Finanzas que no solo maneja el dinero del gobierno del estado, sino que ahora también controla la fiscalización de los recursos públicos.
Y ya que hablamos de poder, un asunto que ayer sorprendió es que el ex secretario de Infraestructura, Alfonso Sánchez García, aspirante de Morena a la candidatura de Morena, ya le compite a la gobernadora Lorena Cuéllar Cisneros los espacios de la primera plana en el periódico El Sol de Tlaxcala, pues quien sabe por qué razón en ese diario se optó por destacar la encuesta que pone al junior en primer lugar de las preferencias electorales y restarle importancia a la construcción de un centro deportivo de alto rendimiento donde se invertirán más de 136 millones de pesos.
Si el hijo del ex gobernador Alfonso Sánchez Anaya como un simple aspirante al Senado ya le compite a la mandataria en los espacios importantes de ese mencionado medio de comunicación, no quiero pensar que pasará si éste logra la nominación y después gana los comicios del 2024.
Me queda claro que la mano de Alfonso Brito Sánchez para beneficiar al junior de Alfonso Sánchez ya se empieza a ver.
O no.
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