Uno pensaría que un año sería suficiente para que algunos miembros del gabinete lorenista controlaran su ímpetu y dejarán el protagonismo que los ha llevado a cometer error tras error desacreditando su trabajo como le ha pasado a los secretarios de Salud y Turismo, Rigoberto Zamudio Meneses y Josefina Rodríguez Zamora, respectivamente.
Recientemente el secretario de Salud tlaxcalteca emitió el oficio número 5018/DG-1693/2022 por el que prohibió la venta del dulce “Lucas Muecas” debido a que se halló que estaba adulterado con sustancias tóxicas como anfetaminas, marihuana, metanfetaminas y opiáceo, dejando entrever que la empresa que lo elabora era la culpable y responsable cuando en realidad la alteración de ese producto se habría generado por presuntos criminales que alteraron los sellos y agregaron presuntas drogas.
La imprudencia de Rigoberto Zamudio generó no sólo un escándalo entre la población de Tlaxcala, sino que el asunto trascendió a nivel nacional porque la noticia fue replicada, lo cual provocó una alarma y el descrédito para la empresa que elabora y vende el dulce “Lucas Muecas” que resultó seriamente afectada por el señalamiento de un funcionario tlaxcalteca, quien ahora busca justificar y arreglar las cosas con declaraciones que sólo intentan evadir su responsabilidad en el asunto.
El daño está hecho y sólo es cuestión de tiempo para ver si la empresa afectada procede legalmente contra Rigoberto Zamudio que está comprobado que su especialidad como funcionario es cagarla una y otra vez, pues a lo largo de un año son varios los errores que ha cometido al grado que no le ha importado, en algunos casos, contradecir a su jefa la gobernadora Lorena Cuéllar Cisneros.
Un comportamiento similar es el que también lleva a cabo la secretaria de Turismo, Josefina Rodríguez Zamora, quien sin tener algún acierto o acción positiva de su gestión como funcionaria busca resaltar y atraer en todo momento la atracción de los medios de comunicación.
A principios de noviembre viajó al parque de Xcaret localizado en Cancún, Quintana Roo, lugar al que decidió ir acompañada por artesanos, bailarines, comunicadores, diputados y funcionarios estatales para según ella promover a Tlaxcala. Era tanta su euforia que hasta convenció a la gobernadora de asistir a un evento que al final la mandataria de esa entidad María Elena Hermelinda Lezama Espinosa, mejor conocida como Mara Lezama, nunca se presentó.
En el evento del mencionado parque los que tuvieron preferencia fueron los amigos (Antonio Martínez Velázquez, secretario de Cultura) y familiares de la engreída funcionaria, porque los diputados locales, funcionarios y directores del gobierno fueron ubicados en la cuarta fila.
Y aunque le parezca increíble una de las primeras intervenciones fue la de la gobernadora tlaxcalteca y la última corrió a cargo de la Secretaria del Ayuntamiento de Cancún, porque ni la secretaria de Turismo ni la gobernadora de Quintana Roo aparecieron por el lugar, pues sencillamente ignoraron el festival de la vida y muerte al considerar que no era relevante para ellas.
Ya de regreso por la entidad, resulta lamentable la postura y desfachatez de Josefina Rodríguez en torno a los hechos violentos registrados el pasado 10 de noviembre en el palenque de la Feria de Tlaxcala durante la presentación de la Banda MS, cuando el personal de seguridad contratado por la empresa que obtuvo la concesión de ese espacio agredió a varios asistentes, lesionando a una mujer que tuvo que ser internada en un hospital de la ciudad de Puebla.
Según la voraz secretaria de Turismo y presidenta del Patronato de la Feria, ese hecho y la agresión a una mujer es exclusiva de la empresa encargada de la seguridad, es decir, ni del empresario al que se le concesionó el palenque y menos de las autoridades estatales.
Su falta de solidaridad y empatía con la fémina agredida es insultante, así como su actitud de cuidar por encima de todo las ganancias del empresario encargado del palenque, a quien se le ha tolerado el sobrecupo y la permanente violación al decreto que limita la venta de bebidas alcohólicas.
Incluso, Rodríguez Zamora presumió que si bien la agresión a la mujer y la bronca del palenque se convirtió en tendencia en las redes sociales, ésta no afectó, para el bien de la bolsa del patronato, la afluencia de visitantes a la Feria de Tlaxcala.
La torpeza y la insensibilidad de algunos funcionarios tlaxcaltecas resultan preocupantes, pero es lo que hay y con esa carga es con la que debe trabajar la gobernadora Lorena Cuéllar.
Por cierto, una sincera felicitación al Gobierno del Estado por haber ganó el primer lugar en la categoría “Mejor Imagen o Identidad Gráfica Gobierno” en los Reed Latino Awards 2022, cuyo premio es el más importante de la comunicación política y de gobierno en América Latina, organizado por la Campaigns & Elections México (C&E), que es la revista más prestigiada en español sobre Estrategia Electoral, Marketing y Comunicación Política.
Durante el evento de premiación que tuvo como sede Panamá, dieron a conocer que la pieza “Una Nueva Historia” Estado de Tlaxcala, fue reconocida como la mejor imagen e identidad gubernamental, la cual encabeza la gobernadora Lorena Cuéllar Cisneros, quien prácticamente viene innovando y transformando el quehacer de las autoridades estatales con nuevas acciones y programas.
El premio es bien merecido, felicidades.
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