Tras más de 15 años de tener una injerencia y control del PAN, por fin este fin de semana surge una nueva generación de dirigentes y militantes que decidió jubilar a liderazgos como el de Adriana Dávila Fernández, Minerva Hernández Ramos, Carlos Carreón Mejía y el de José Gilberto Temoltzin Martínez que nunca aprovecharon la fortaleza del partido para consolidar su presencia y crecimiento en Tlaxcala.
Ahora, surgió un nuevo PAN que bajo el control de un diferente liderazgo busca ganar espacios y consolidar su presencia. El domingo, la base de militantes le dio el último adiós a las viejas prácticas y a los mismos de siempre, esos que tenían secuestrada la voluntad de las estructuras y que se quedan con las posiciones de privilegio.
Tlaxcala requiere de una oposición activa y pensante, que deje atrás sus luchas internas y vea por el bien común de la gente. Los panistas dieron muestra de unidad democrática, al elegir a los 80 consejeros, mujeres y hombres, que defenderán las causas del albiazul.
En su asamblea estatal, en la que participó prácticamente el 90 por ciento de los 412 delegados numerarios que fueron electos en las Asambleas Municipales imperó la unidad y la civilidad en la renovación de los 80 Consejeros Estatales y la elección de los cuatro consejeros nacionales (Ángelo Gutiérrez, Pablo Badillo, María Lized Hernández y Cecilia Hernández Zapata), algo que tenía mucho tiempo que no se lograba sin que hubiera inconformidades, acusaciones y hasta pleitos.
La realidad es que fue la base la que se pronunció a favor de la militancia, porque ahora, dichos órganos están integrados por panistas de a pie; los que por décadas fueron sometidos a la voluntad de unos cuantos, ahora tienen en sus manos el destino del PAN.
La elección del domingo fue la puntilla a los panistas que en su momento saquearon al partido, se quedaron con las posiciones y se repartían los cargos para sus parientes, amigos y socios. La militancia se cansó de esas prácticas y lo dejaron ver en su elección interna.
Ahora, serán los militantes de a pie los que decidan el futuro del partido, sus políticas de participación electoral y la definición de las principales directrices. Basta ver los nombres de las 40 mujeres y 40 hombres que integran ese órgano; la inmensa mayoría son panistas de cepa que siempre habían sido relegados. Ahora tienen voz y voto, como toda la militancia.
La dirigente del PAN en Tlaxcala, Miriam Martínez Sánchez y los panistas tienen el reto de conformar una verdadera oposición en la entidad, una que realmente represente a un número importante de ciudadanos que hoy en día no están contentos con los gobiernos de Morena.
PAN y PRD van encaminados a conformar la oposición real a Morena en Tlaxcala. El PRI como es su costumbre sigue indefinido y sin poder concretar su proceso de renovación, de ahí que está perdiendo tiempo valioso.
En las elecciones del 2024 se verá que partidos hicieron su chamba y cuáles sólo simularon un trabajo.
Cinismo empresarial
Nunca faltan los vivales que buscan engañar y sacar provecho de la confianza de las personas, como es el caso de algunos “empresarios” que sin tener una auténtica representación legal arman foros de dudosa calidad para atraer ilusos y buscar hacer negocios turbios al amparo del poder.
Con el foro denominado “Los beneficios de la formalidad” a realizarse éste día en la entidad, el hoy “presidente” de la Concanaco, Héctor Tejeda Shaar, buscará acercarse a las cámaras de comercio en Tlaxcala para simular una representatividad que está entredicho, pues no sólo los empresarios de ese sector lo desconocen, sino que además es investigado por presuntamente malversar recursos públicos por el orden de los 240 millones de pesos.
A ese empresario se le ha vinculado a la creación y operación de empresas factureras cuando fungió como tesorero de la Concanaco. Por la mala gestión que hizo, el hoy “presidente” de ese organismo empresarial a nivel nacional enfrenta denuncias ante la Fiscalía General de la República.
El evento, organizado por la Canaco Tlaxcala, tendrá lugar en la Plaza de la Constitución. Lo apoyan empresarios de la entidad que tampoco gozan de un buen prestigio como Javier Solís Ruiz y Joseph Rodríguez Ramos.
Ya en otras ocasiones Tejeda Shaar ha manifestado su interés por “generar” acuerdos con diversos empresarios en Tlaxcala, principalmente los de Chiautempan, sin embargo sus antecedentes y la información de la Auditoría Superior de la Federación (ASF) son factores que han mermado su credibilidad.
Apenas en septiembre del 2021 y ante diputados federales, la ASF reveló un documento en donde se señala que Tejeda Shaar estaría involucrado en actos de corrupción por su gestión como tesorero de la Concanaco en el periodo del 2014 al 2016, pues se detectó un daño económico al erario por más de 206 millones de pesos que se suman a otros millones de pesos más que fueron observados.
Con esos antecedentes este empresario es impresentable. O no.
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