La ex magistrada Rebeca Xicohténcatl Corona perdió el pleito legal que estableció para mantenerse como integrante del Tribunal Superior de Justicia, pues anoche trascendió que la justicia federal dejó de protegerla para determinar que su proceso de no ratificación por parte de los diputados locales es válido.
La abogada que siempre mostró una proclividad a los gobernadores del PRI y a sus candidatos a diferentes cargos de elección popular, fue evaluada por la pasada legislatura controlada por Morena y sus aliados el PT y el PES que determinó el 29 de diciembre del 2020 no ratificarla por incurrir en actos ilegales que redundaron en su falta de probidad e incumplir con los principios de independencia, imparcialidad y honestidad en el desempeño de sus funciones como magistrada del Poder Judicial de Tlaxcala.
Simple y llanamente los integrantes de la LXIII Legislatura local determinaron que no era posible su ratificación, pues durante su cargo, abandonó su función jurisdiccional, incurrió en omisiones y hasta llamó mediocres a quienes votaron por el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, en los comicios del 2018.
En la sesión de ese día también la diputada local de Nueva Alianza, Luz Guadalupe Mata Lara, presidenta de la comisión especial, presentó un dictamen de minoría, que fue respaldado por los legisladores María Isabel Casas Meneses de Movimiento Ciudadano, Zonia Montiel Candaneda del PRI, Omar Milton López Avendaño del PAN y Miguel Ángel Covarrubias Cervantes del PT, en el que consideraba que sí era viable la ratificación de la magistrada Rebeca Xicohténcatl, sin embargo en la votación se impuso el no.
Arropada por el aún gobierno del castrado priista Marco Antonio Mena Rodríguez, Xicohténcatl Corona emprendió un pleito legal para tratar de revertir la decisión de los diputados locales, situación que terminó por afectar el proceso de designación que se emprendió a través de una terna enviada por el entonces mandatario, la cual se integró por abogados sin méritos como Rodolfo Montealegre Luna, Leonel Ramírez Zamora y Casimira Pérez Sánchez.
Rebeca Xicohténcatl dejó el cargo de magistrada el pasado 31 de marzo del año pasado y casi once meses después un Tribunal Colegiado de Circuito determinó anoche negar el amparo de manera definitiva, con lo cual prácticamente se pone punto final a ese asunto legal y se confirma que la demandante no podrá regresar como integrante del Poder Judicial de Tlaxcala.
La magistrada interina Marisol Barba Pérez que asumió el cargo a finales de abril del 2021 por un tiempo determinado tras el litigio que inició Xicohténcatl Corona, ahora deberá esperar que los actuales diputados tlaxcaltecas revisen la terna que se envió por el anterior gobernador o que éstos decidan desecharla para solicitar una nueva propuesta a la actual mandataria Lorena Cuéllar Cisneros, con el propósito de emprender una evaluación para designar al siguiente integrante permanente del Tribunal Superior de Justicia del Estado.
El único caso que sigue pendiente por resolverse es el del ex magistrado Mario de Jesús Jiménez Martínez, quien también emprendió un litigio para permanecer en el cargo. Pese a que ya había completado los dos periodos legales a los que tenía derecho, en el último los diputados locales “incurrieron” en ciertos errores de procedimiento que le dieron armas y elementos legales para que el abogado iniciará la defensa y buscará permanecer en el puesto de manera vitalicia.
Pero mientras ese asunto no se resuelva de manera definitiva, Anel Bañuelos Meneses, seguirá desempeñándose como magistrada interina.
La derrota legal de Rebeca Xicohténcatl ya se esperaba y ahora esa abogada tendrá que aceptar que sus excesos y arrogancia le costaron muy caro.
No cabe duda que “Todos somos iguales ante la ley, pero no ante los encargados de aplicarla”.
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