La falta de certeza y legalidad que ha evidenciado el Instituto Tlaxcalteca de Elecciones (ITE) ha provocado que los comicios para renovar las sesenta presidencias municipales de la entidad sean desaseados e inequitativos, lo que sin duda dará elementos para judicializar esas elecciones por la enorme torpeza del árbitro electoral.

 

 

Hasta ayer sólo los candidatos independientes (48) a las presidencias municipales y los abanderados del partido Movimiento Ciudadano eran los únicos autorizados para llevar a cabo actividades proselitistas, lo cual dejó en desventaja al resto de los aspirantes a esos cargos de elección popular que al ver el desmadre provocado por los inútiles consejeros del ITE optaron por arrancar su promoción y retar a la autoridad.

 

En la madrugada de este días los cargados consejeros electorales aprobaron los registros del PRI, PAN, PRD y de otros partidos políticos, sin embargo dejó pendientes los de Morena cuyos candidatos seguirán en espera de la autorización correspondiente.

 

Para nadie fue desconocido que hubo candidatos a alcaldes del PRI, del Verde Ecologista y de otros partidos que comenzaron sus campañas y olímpicamente ignoraron al desacreditado ITE que mantuvo a lo largo de día de ayer su absurda postura de hacer tímidos llamados para que los aspirantes acataran sus indicaciones y se abstuvieran de solicitar el voto de los ciudadanos y las ciudadanas.

 

Las campañas para las alcaldías debieron arrancar el primer minuto del 4 de mayo, sin embargo éstas fueron frenadas arbitrariamente por los consejeros electorales comandados por Elizabeth Piedras Martínez, porque según ellos los partidos políticos incumplieron con las acciones afirmativas en materia de juventud, paridad y diversidad sexual, de ahí que recibieron un plazo de 48 horas para subsanar esas inconsistencias que en teoría hoy quedarán resueltas.

 

Hay candidatos y partidos políticos que se encontraban desesperados por no iniciar sus actividades proselitistas, pues saben que se ubican abajo en las preferencias electorales y que impedirles el contacto con los electores le resta posibilidades de obtener el respaldo ciudadano que requieren para obtener el triunfo el próximo 6 de junio.

 

Así como Morena y sus aliados encabezan las preferencias por la gubernatura de Tlaxcala y las tres diputaciones federales, se sabe que los aspirantes a alcaldes del Movimiento Regeneración Nacional, partido que fundó el actual presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, mantienen una ventaja electoral en 40 de los 60 municipios de la entidad, situación que tiene muy nerviosos a sus rivales.

 

En las próximas horas veremos a todos los candidatos a diputados locales, a alcaldes y a presidentes de comunidad haciendo campaña.

 

Comprobaremos si los tlaxcaltecas aceptan o no que hijos de actuales presidentes municipales busquen un cargo de elección popular con el abierto respaldo de sus progenitores como es el caso de la limitada legisladora con licencia María Félix Pluma Flores que busca convertirse en alcaldesa de Tlaltelulco donde actualmente gobierna su nefasto padre, el voraz petista Rubén Pluma Morales.

 

También está el caso de Scarlett Orea Díaz, candidata del PT a la diputación por el distrito 13 local con cabecera en Zacatelco, municipio que está bajo el poder e influencia del edil Tomás Orea Albarrán.

 

O el de la diputada local morenista Ana Bertha Mastranzo Corona que impuso a su esposo Carlos Antonio Piedras Cantor como abanderado de Morena a la presidencia municipal de San Pablo de Monte cuando era obvio que había mejores cartas para ocupar esa peleada posición.

 

El accidentado proceso para renovar las presidencias municipales de Tlaxcala está en marcha y será hasta el próximo 6 de junio cuando se conozca si la realidad política de los ayuntamientos cambiará sustancialmente.

*****************************************************************************************************