Para muchos fue simbólico no sólo que el PRI haya recurrido a la estructura administrativa del gobierno del estado para enseñar músculo y fortaleza, sino que el mandatario Marco Antonio Mena Rodríguez haya encabezado, junto con el líder nacional de su partido, Alejandro Moreno Cárdenas “Alito”, el evento para ungir a Noé Rodríguez Roldán y Mildred Vergara Zavala como presidente y secretaria general, respectivamente, del Comité Directivo Estatal del tricolor en Tlaxcala.

Mena Rodríguez como buen jugador de ajedrez ha empezado a mover sus piezas y a marcar los tiempos de su sucesión. Al parecer antes de concretarse el relevo de la dirigencia estatal del PRI dio su venia para que Anabell Ávalos Zempoalteca, presidenta municipal de Tlaxcala, se moviera y alzara la mano, con la clara intención de que el nombre de esa política este presente y vigente no sólo entre los priistas, sino entre los ciudadanos que aún no definen su voto rumbo a los comicios del 2021.

El PRI no dio una señal de cambio o renovación, lo cual quizá resulta alentador para su causa, pues recurrió como siempre lo ha hecho a la estructura de las dependencias estatales y de uno que otro ayuntamiento para abarrotar el palenque del recinto ferial y mostrar un júbilo que contagió a la ex gobernadora Beatriz Paredes Rangel que ayer se ubicó como la militante más representativa del priismo tlaxcalteca.

Sin salirse de su estilo y guardando las formas hacia el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, el gobernador pidió a los priistas alzar la voz y señalar sus inconformidades contra el gobierno federal pero sin recurrir a la descortesía o a las groserías.

El mandatario Marco Mena aseguró que es tiempo de que su administración y la militancia de su partido vayan juntos en esa labor y promocionen los resultados conseguidos en la entidad con un gobierno priísta. “Vayan a buscar a los ciudadanos y hagánlo con entusiasmo, sin temor y con el orgullo de saber que hemos entregado buenos resultados”, insistió.

Entre los logros que pidió promover a los priístas es el crecimiento económico a más del 4 por ciento, el hecho de que Tlaxcala tenga el mayor número de empleos formales en su historia, de que sea la tercera entidad a nivel nacional en disminuir la pobreza extrema y de que estamos en posibilidad de convertirnos en el estado del país que más pobreza extrema haya reducido en la historia de México.

En su oportunidad, Alejandro Moreno aprovechó el momento y arremetió contra el gobierno que preside López Obrador, pues según él no cumple y tampoco da resultados. “Morena es ave de paso. Nació ayer, gobierna hoy, y se irá mañana, porque le vamos a ganar”, sentenció el ex gobernador de Campeche.

También dejó abierta la posibilidad de conformar una alianza con el mayor número de fuerza políticas para enfrentar los comicios del 2021, lo que sin duda haría competitivo a ese bloque opositor si partidos como el PAN, PRD, PT, Nueva Alianza y otros deciden ir juntos en el 2021 en que será elegido gobernador, diputados federales y locales, así como alcaldes y presidentes de comunidad.

Morena quizá tiene hoy en día a la mejor aspirante posicionado a la gubernatura de Tlaxcala, sin embargo Lorena Cuéllar Cisneros, la “super delegada” del gobierno federal, sigue sin mostrar un equipo sólido y preparado para cumplir su sueño de ser la sucesora de Mena Rodríguez y su improvisación a la hora de hacer política es evidente, por lo que su exceso de confianza puede ser un elemento que la lleve al fracaso como ya le paso en las elecciones del 2016.

Si una cosa quedó clara ayer, es que el PRI en Tlaxcala no está muerto ni desahuciado, por lo que seguramente Noé Rodríguez y Mildred Vergara darán un nuevo impulso a ese partido a fin de tratar de recuperar espacios perdidos y hacer todo lo posible para conservar el gobierno del estado.

En política no hay casualidades y ayer no sólo el PRI enseño músculo en el estado, sino también el PAN que aprovechó el Tercer Informe de Gobierno del alcalde de Apizaco, Julio Cesar Hernández Mejía, para patentizar que tiene fuerza y estructura en Tlaxcala.

Si las negociaciones entre el PRI y el PAN avanzan en torno a llevar como candidata al gobierno del estado a la aún alcaldesa capitalina Anabell Ávalos, Morena realmente debe preocuparse porque a lo mejor la gubernatura de Tlaxcala que ya veía en su mesa se le desvanece.