Por los hechos y evidencias que se tienen, la hegemonía al interior del PAN que por años mantuvo el grupo de Adriana Dávila Fernández en alianza con el clan que comanda el ex alcalde capitalino Adolfo Escobar Jardinez se ha empezado a extinguir, lo que seguramente los privará de los espacios de poder a que estaban acostumbrados a detentar a través de los cargos plurinominales.


José Gilberto Temoltzin Martínez, actual líder del PAN en Tlaxcala, ha sido el artífice de la limpia que vive ese partido, cuya militancia estaba harta de los excesos y el autoritarismo que por casi una década ejerció la dos veces candidata al gobierno del estado y eterna legisladora federal, Adriana Dávila que siempre contó con el contubernio del desprestigiado Adolfo Escobar.

El pasado fin de semana se llevó a cabo 17 asambleas municipales para elegir a nuevos dirigentes, así como también se realizaron las votaciones para elegir a las propuestas que serán sometidas para designar a los consejeros nacionales y estatales del PAN.

En 13 asambleas el grupo de José Gilberto Temoltzin se alzó con el triunfo, siendo el equipo del ex presidente estatal del PAN y actual diputado federal, Carlos Carreón Mejía, el que mostró más fuerza y pelea, pues Adriana Dávila sólo se adjudicó el municipio de San Pablo del Monte donde el alcalde panista Cutberto Cano Coyotl operó para conseguir esa única posición.

La alianza por conveniencia que por años mantuvieron Adriana Dávila y Adolfo Escobar parece que se le acabó el gas y el empuje, porque prácticamente fue borrada de los comités municipales, lo cual también podría repetirse con la próxima elección de los futuros consejeros nacionales y estatales de ese instituto político.

El siguiente fin de semana se realizarán otras 17 asambleas municipales, cuyos resultados se esperan que también sean favorables para el actual grupo dominante del PAN, que sin hacer mucho escándalo mediático, ha cumplido su objetivo de desmantelar las estructuras que por años manipularon Adriana y Adolfo.

Hace unos meses habíamos comentado en este espacio que Adriana Dávila estaba encaminada a perder el control del PAN porque sus intenciones estaban en conseguir espacios y una mayor presencia a nivel nacional, lo cual ha empezado a lograr porque aunque usted no lo crea la tlaxcalteca junto con otros diputados federales de su partido está en la puja por obtener la presidencia de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados del segundo año de la 64 Legislatura.

Temoltzin Martínez está haciendo lo que parecía imposible, quitarle el control del partido al grupo de Adriana Dávila y Adolfo Escobar, personajes que quizá son los principales responsables del estancamiento que tuvo el PAN en Tlaxcala y la pérdida de fuerza electoral que en su momento llegó a tener ese instituto político en pasados comicios.

Puede ser que el estilo y la forma en que se conduce actualmente el partido no sea del agrado de muchos, sin embargo habrá que ver si la estrategia de José Gilberto Temoltzin funciona para las elecciones del 2021 en que los tlaxcaltecas elegirán gobernador, diputados federales y locales, alcaldes y presidentes de comunidad, pues se espera que obtenga más espacios de poder o por lo menos conserve los que se tienen en estos momentos.

Con este reacomodo de fuerzas y liderazgos, es muy probable que el actual presidente municipal de Apizaco, Julio César Hernández Mejía, empiece a tener un mayor juego y proyección rumbo a las elecciones del 2021, pues sin duda ha sido un importante aliado de José Gilberto Temoltzin en el proceso de limpiar al partido de adrianistas y adolfistas.

El PAN deberá demostrar con hechos que en Tlaxcala es el único partido de oposición, porque está más que comprobado que el resto de los institutos políticos sólo la hacen de comparsa ya sea al gobierno del estado encabezado por Marco Antonio Mena Rodríguez o a la administración federal que preside el tabasqueño Andrés Manuel López Obrador.