El señor senador perredista es tan hábil que, arrojó un anzuelo de doble acción para ver si los ingenuos operadores de Adriana lo muerden; pero en realidad es la avanzada para entregar la causa al PAN.

En concordancia con el documento interno girado por el PRD a sus candidatos y representantes en las doce entidades que participan en la elección de julio, el senador Carlos Navarrete Ruiz, puso en la mesa de discusión este lunes en Tlaxcala, el tema de la alianza entre perredistas y panistas, que no había considerado a esta entidad.

El documento al que nos referimos señala la instrucción de la dirigencia nacional del Sol Azteca, aparentemente obedeciendo “órdenes superiores”, para que sus abanderados junto con sus respectivas estructuras, “realicen dimisiones, campañas paralelas y otro tipo de acciones para fortalecer la causa panista”, como una medida desesperada que en realidad no busca el retorno del PRI a la Presidencia, sino pretende refrenar la caída libre de la derecha y la izquierda moderada (afín) frente al reposicionamiento del tricolor.

Navarrete Ruiz, con el estilo claro y frío que le es peculiar, propuso entonces a Adriana Dávila, la candidata de la alianzapalprogreso (PAN, PANAL, PAC) sumarse al proyecto de Minerva Hernández, la abanderada de la alianza transparenciayhonestidad (PRD-PT-Convergencia), esgrimiendo un par de puntos de interesante contenido:

1.- Adriana Dávila Fernández, carece de aceptación y nivel como para encabezar una gran coalición, a la cual incluso, podría sumarse la candidata del Partido Socialista, Rosalía Peredo Aguilar –según mister Navarrete-. Lograda esa tremenda coalición, entonces estaría en todo su esplendor el programa de emergencia ese que ofrece las campañas paralelas y dimisiones a favor del PAN.

2.- Nadie puede regatear reconocimiento a la preparación de Minerva Hernández Ramos, lo mismo en el ámbito académico que, en el político; por lo tanto, según Navarrete, es ella quien debe encabezar la alianza todos unidos contra Mariano (Tucom) (¿dónde escuché esto antes?).  Nada más hay un detallito. La alianza que respalda a Minerva, no despega. No sube más allá de once o doce unidades en intención de voto.

Con todo y la nulidad que como política padece la candidata de la alianzapalprogreso, duplica a Minerva en las encuestas. Y no por mérito propio, sino por el tamaño de los aliados a fuerzas a su lado. Eche números: la UAT, la Red de Mujeres (Lupita Lozano), el sector campesino de Antonio Velázquez, entre muchos otros que no tuvieron más opción que sumarse a la causa de la wild girl.

Y como en este entorno pragmático de panistas y casi perredistas, lo que los une es su anti priísmo qué mejor oportunidad de uno de los carnales de Chucho, para comenzar  a calentar el ambiente con la siguiente lógica:

a)      Minerva es mejor que Adriana (según sus cuates)

b)      Adriana tiene más lana y aliados. Luego entonces:

c)       Como dinero mata carita, qué tal todos unidos con Adriana.

De maravilla ¿verdad?

No es por faltar a la contundencia de mister Navarrete, pero su actuación se me hace un flirteo sustentado con psicología inversa. Respetado líder parlamentario y destacado en la diplomacia, Carlitos también tiene su lado de grillo (y vaya si es grande).

Así que la presencia del senador perredista puede interpretarse, con elevados niveles de acierto, como la avanzada perredista para entregar la causa a los panistas, pero eso sí, exigir una buena tajada pues, para eso cuentan con el excelente nivel de Minerva.