Mañana sábado por fin se conocerá quienes serán los inminentes candidatos priistas que participarán en las elecciones federales y locales. Veremos si el grupo del gobernador de Tlaxcala Marco Antonio Mena Rodríguez aceptó amalgamarse con los marianistas que lo llevaron al poder y que poco a poco fueron echados de la administración estatal.
Pronto quedarán atrás las especulaciones y rumores que en las últimas semanas se han dejado correr respecto a los candidatos priistas, ya que mañana se sabrá quienes serán los militantes que intentarán llegar al Senado y a las diputaciones federales y locales.
Las designaciones dejarán entrever que tanta confianza le tiene el presidente Enrique Peña Nieto al actual gobernador Marco Mena, pues para nadie es desconocido que el primero funge como el verdadero coordinador de la campaña presidencial del ciudadano José Antonio Meade Kuribreña.
Aunque el ex gobernador Mariano González Zarur se ha mostrado prudente y discreto en la puja por las candidaturas en Tlaxcala, su grupo espera ser incluido en el reparto para sobrevivir políticamente y estar en condiciones de disputar en el 2021 la candidatura priista a la gubernatura del estado a la camarilla de Marco Mena.
Si los marianistas son relegados de posiciones relevantes, el peso total del triunfo o derrota priista recaerá exclusivamente en Mena Rodríguez, quien como mandatario estatal estará obligado a entregar buenas cuentas y recurrir a todas las estrategias posibles para impedir la derrota de Jose Antonio Meade y sus candidatos.
El gobernador deberá operar con reducidos márgenes de error en los próximos comicios, porque si pierde la elección presidencial, el senado y las diputaciones federales y locales su administración y él mismo quedarán vulnerables y ya no tendrá otro proceso electoral para recomponer su situación.
De ahí la importancia de los nombres de los aspirantes priistas a los diferentes cargos de elección popular, porque aunque usted no lo crea entre ellos podría estar el priista que podría suceder a Marco Mena en el cargo en caso de obtener el triunfo.
Se dice que la ex gobernador Beatriz Paredes Rangel podría ser la sorpresa en la lista de candidatos priistas. Ella sería una de las aspirantes a la Cámara Alta y tendría tanto la candidatura de mayoría como la plurinominal a fin de amarrar su llegada al Senado.
Beatriz Paredes es una operadora eficiente y aunque muchos consideran que ha estado mucho tiempo alejada de Tlaxcala, hay que recordar que en los comicios del 2010 influyó para que Mariano González ganara la gubernatura, de ahí que nadie puede dudar de su experiencia electoral.
Otros candidatos que seguramente llamarán la atención, son los que finalmente buscarán un lugar en el Congreso del estado. De ellos dependerá la gobernabilidad en el Poder Legislativo y de la entidad que tiene bajo su mando Marco Mena.
El PRI no se puede dar el lujo de perder el control del Poder Legislativo, porque el gobernador quedaría seriamente debilitado y con un reducido margen para operar en los últimos años de su administración.
En unas horas más conoceremos que tan buen jugador de ajedrez resulta ser el gobernador.
Post Views: 22