Aunque el PRI en Tlaxcala tratará de entregar buenas cuentas en el 2018, es un hecho que para lograrlo deberá proponer a candidatos que cuenten con resplado social y aceptación al interior del partido. Un error en la designación de los abanderados puede poner en riesgo el control que hoy se tiene del Congreso del estado.

los priistas

A 45 días de que inicie el proceso electoral federal y a 120 días que suceda lo mismo con los comicios locales, el PRI inició el análisis de los aspirantes a fin de determinar quiénes podrían ser los mejores candidatos que garanticen el triunfo en una jornada que se espera muy competida y que concluirá con las votaciones del primer domingo de junio del 2018.

Los electores tlaxcaltecas elegirán al próximo presidente de México, a dos senadores, tres diputados federales y 15 legisladores locales.

Al interior del PRI hay dos grupos con fuerza y con posibilidades de disputar las nominaciones, el primero lo encabeza el actual gobernador de Tlaxcala, Marco Antonio Mena Rodríguez, que buscará impulsar a sus más cercanos colaboradores y a una nueva generación de políticos, mientras que el segundo lo comanda Mariano González Zarur, quien como ex gobenador tratará de obtener posiciones que le permitan la sobrevivencia del marianismo hasta el 2021.

Un primer grupo que está siendo evaluado como aspirantes priístas es el conformado por los miembros del gabinete donde aparece Anabel Alvarado Varela, titular de la Secretaría de Gobierno, Manuel Camacho Higareda, responsable de la Secretaría de Educación Pública, José Luis Ramírez Conde, jefe de la Secretaría de Fomento Agropecuario y Noé Rodríguez Roldán que despacha en la Secretaría de Comunicaciones y Transportes.

Anote también a Lenin Calva Pérez, secretario de Políticas Públicas y Participación Ciudadana, Roberto Núñez Baleón, titular de Turismo y a Eladia Torres Muñoz, secretaria particular del Despacho del Gobernador, pero con la salvedad que serían candidatos de otros partidos que terminarán sumándose al PRI rumbo a los comicios del 2018.

Entre los alcaldes tricolores que están siendo considerados está Anabell Ávalos Zempoalteca, presidenta municipal de Tlaxcala, Gardenia Hernández Rodríguez, edil de Tlaxco y Noé Parada Matamoros alcalde de Altzayanca.

El único diputado federal con posibilidades reales de buscar otro cargo es Ricardo García Portilla, pues sus otras dos compañeras Rosalinda Muñoz y Fabiola Rosas son dos bultos que sólo tendrán algún reflector mientras sigan cobrando como legisladoras, porque es evidente que su carrera política está basada en la suerte.

De las estructuras priístas se siguen los pasos del ex alcalde de Chiautempan Ángel Meneses Barbosa y del actual líder del partidazo Florentino Domínguez Ordoñez.

Por lo que se refiere a los diputados locales del tricolor, en los hechos todos quieren mantener el cargo a través de la reelección o brincar a otra posición, sin embargo los que están siendo considerados realmente por el PRI son Erendira Cova Brindis, Mariano González Aguirre y Enrique Padilla Sánchez.

Es obvio que faltan nombres y en especial de algunos marianistas que han optado por trabajar sin hacer públicas sus intenciones, pues saben que si sacan la cabeza se las pueden cortar antes de que inicie el proceso electoral.

En unos meses veremos el alcance del relevo generacional que el gobernador Marco Mena se comprometió a impulsar. Desde ahora el mandatario buscará impulsar y preparar a su delfín para el 2021, por lo que sólo falta ver sus movimientos para saber cómo jugará.