Hoy se llevarán a cabo intensas negociaciones al interior del Congreso del estado que incluirán no sólo la designación de su representante ante el Consejo de la Judicatura del Poder Judicial, sino que también se podría definir como terminará el proceso de renovación del titular de la Comisión Estatal de Derechos Humanos.

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El proceso de renovación del Consejo de la Judicatura del Poder Judicial evidencia que la magistrada Elsa Codero Martínez dejó de ser una persona confiable para el sistema y el poder en Tlaxcala.

Se percibe un distanciamiento con el gobernador Marco Antonio Mena Rodríguez y con los diputados locales, así como con sus compañeros magistrados y jueces que la han ignorado para apoyar la llegada de incondicionales a ese órgano.

Lo anterior quizá tenga que ver con la actitud que Cordero Martínez asumió hace unas semanas cuando intentó madrugar para lograr los consensos que permitieran a Emilio Treviño Andrade, abogado de cuestionada reputación, ser ratificado por el Congreso del Estado como su representante ante el Consejo de la Judicatura por otos tres años más.

Si bien ese abogado de poca monta se presentó a una evaluación ante los diputados locales, es un hecho que no tiene ninguna posibilidad de repetir en el cargo tal y como lo deseaba la presidenta del TSJE, Elsa Codero.

Aunque hay once aspirantes registrados en el proceso que lleva a cabo el Poder Legislativo para designar a su representante, el que se perfila como el favorito es Emilio Antonio Velásquez Leiva, quien aunque nació en Guatemala dicen que ya goza de la nacionalidad mexicana, lo cual tendrá que demostrar con documentos.

El principal impulsar del ex secretario del ayuntamiento de Apizaco para convertirse en representante del Congreso del estado en el mencionado Consejo es Mariano González Aguirre.

Otro candidato que podría dar la pelea por esa posición es Claudia Pérez Rodríguez, quien representa el Plan A del diputado perredista Alberto Amaro Corona, quien como buen jugador traé en Gerardo Felipe González Galindo su Plan B.

Como se puede obsevar la vanidosa Elsa Cordero no tiene ningún tipo de influencia sobre los aspirantes con más posibilidades en llegar a ese órgano como delegado del Poder Legislativo.

Pero lo mismo sucede al interior del Tribunal Superior de Justicia del Estado, donde los magistrados Rebeca Xicoténcatl Corona y Mario Antonio de Jesús Jiménez Martínez se muestran más que interesados en impulsar la llegada de un nuevo representante de los jueces.

Cordero Martínez pretende que Lázaro Castillo García permanezca por un periodo más en el Consejo de la Judicatura como portavoz de los jueces, sin embargo al mostrarse como una presidenta débil y sin liderazgo sus pretensiones no tendrán ningún tipo de respaldo entre los 32 impartidores de justicia que existen en este momento.

Si Cordero Martínez no tienen influencia en su territorio, es obvio que tampoco tendrá ningún tipo de relación con el abogado o abogada que designe el gobernador Marco Mena en ese órgano que deberá tener nuevos miembros a más tardar el próximo sábado.

Con este panorama quién puede creer que Elsa es un factor de poder en Tlaxcala.