Los nervios se han apoderado de los que sueñan con ser llamados al próximo gabinete. Las horas pasan y nadie recibe la tan esperada confirmación, por lo que los rumores van y vienen, sin embargo el gobernador electo ni se inmuta y sigue en lo suyo.

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El silencio del gobernador electo Marco Antonio Mena Rodríguez ya puso nerviosos a varios que daban por un hecho su incorporación a la próxima administración estatal.

La esperada llamada no llega a once días de que entre en funciones el gobierno de Mena Rodríguez, por lo que algunos han buscado al aún mandatario Mariano González Zarur para saber si él puede garantizarles su permanencia en la burocracia dorada.

Dicen que Mariano González también anda incrédulo sobre la integración del futuro gabinete, pues aún no tiene la certerza de que sus recomendados llegarán a las posiciones solicitadas.

Por esa razón, el hacendado busca desde ahora proteger a un reducido número de personas que durante su gestión estuvieron muy cerca de él y para lo cual les encontró espacio en el gobierno federal. Las hijas de su chofer de nombre Roberto renunciaron a las dependencias estatales donde laboraban para ser incorporadas recientemente a la delegación de la Sedesol, así como seis funcionarios del DIF estatal que cuidaron a su hija Mariana González.

Marco Mena sabe que sin la estructura del gobierno del estado no hubiera ganado las pasadas elecciones. Conoce a los funcionarios que operaron y él sabrá si los suma o no a su proyecto, suele expresar Mariano González a aquellos que lo buscan para obtener su recomendación.

También es común escuchar las quejas del gobernador sobre las traiciones que sufre por parte de algunos subordinados, quien según él fueron hablar mal de su persona con el gobernador electo.

Hay tanta incertidumbre en torno a los futuros miembros del gabinete de Mena Rodríguez, que incluso hay funcionarios como Ubaldo Velasco, Oficial Mayor del gobierno del estado, que andan presumiendo que pueden repetir en el cargo porque él representó en la actual administración la cuota de Joaquín Cisneros, de ahí que su marianismo sólo fue coyuntural, postura que nadie le cree.

Pero así como hay quienes esperan la llamada, hay otros que desde ahora presionan al futuro gobernador para obtener posiciones.

No se lo cuente a nadie, pero el «grupo arcoiris» aquel que arreaba Arnulfo Arévalo Lara en la elección para diputados federales -posiciones que fueron ganadas por la intrascendente Rosalinda Muñoz Sánchez, la ingenua Anabel Alvarado Varela y el fanfarrón Ricardo García Portilla- esta que no la calienta ni el sol.

Resulta que sus más de 30 integrantes -principalmente de Calpulalpan, Huamantla, Tlaxcala, Zacatelco, Chiautempan, Altzayanca y Apetatitlán- no encuentran por ningún lado al gris Arévalo Lara, lo que les parece extraño pues en plena campaña para diputado local el papel era completamente opuesto.

Este grupo se dice engañado por Arnulfo Arévalo –quien sueña con regresar al liderazgo del PRI en Tlaxcala-, pues afirman que tanto en la campaña para diputados federales como en la de gobernador, el hoy diputado electo por Huamantla le prometió candidaturas y puestos en la administración.

Sin embargo, al menos en Altzayanca lo buscan no sólo para cuestionarle su pobre apoyo y sus chapuzadas, pues en este municipio en particular fue descubierto su juego perverso, ya que aunque inicialmente apoyaba a Oliverio Pérez Hernández (del PRI), éste mismo acabó portando los colores del PAC y fue vencido por Noé Parada Matamoros, quien eventualmente ocupó al tricolor para contender por la alcaldía que al final del proceso ganó.

El gran problema es que ambos fueron engañados por Arnulfo Arévalo, toda vez que en su afán de ganar votos, el hoy diputado electo coqueteo con PRI y PAC sin importarle sus respectivas causas. La realidad era ganar votos por ambos bandos.

La misma historia se repitió en Huamantla, en donde inicialmente «prometió» la candidatura del PRI a Carlos Cervantes, algo que no sucedió pues todos sabemos que esa posición la ganó finalmente Jorge Sánchez Jasso, por lo que el priista declinó su capital hacia su hermana la panista Maria del Carmen Cervantes.

Desplegados o manifestaciones en la toma de protesta son algunas de las estrategias que el grupo arcoiris prepara, todo con tal de hacerse escuchar y reclamar posiciones… aunque muchos de ellos, dadas las traiciones de Arévalo Lara, hayan participado como candidatos de institutos ajenos a PRI y por ende, hayan luchado en contra de Marco Antonio Mena Rodríguez.