Cayó como balde de agua fría a quienes ya habían conformado una mixtura de ofensas, presunciones y soberbia…ninguno daba tregua, hasta que la conocieron
La encuesta de El Universal que planteó ayer una ventaja de más de seis puntos del abanderado priísta, Marco Antonio Mena, sobre la del PRD, Lorena Cuellar Cisneros, cayó como balde de agua fría. Hay quienes la celebran, y también quienes la descalifican.
Por ejemplo, el ex diputado federal panista y ex dirigente estatal de ese partido, Sergio González Hernández, plasmó en la sección de comentarios de dicho rotativo la visión lorenista de ese trabajo: Siempre he dicho que hay que leer correctamente las encuestas y sus datos son contradictorios, resulta que el candidato del PRI es el menos conocido y el que tiene la mayor intención del voto, els que tiene las calificaciones de la gente, ¿cómo es que aparece de puntero? Lo más grave de la eneusta publicada es que no tiene firma de la casa encuestadora, no hay duda que es una inserción pagada para inflar al candidato, pero la gente ya lo dice #LorenaGobernadora.
Veamos la contraparte. En esa misma sección de El Universal la firma Fabricio Mena Rodríguez, hermano del candidato de la mega alianza PRI-PVEM-Panal-PS: El Universal está avalado por el INE para cumplir con los requisitos y publicar esta encuesta, esta encuesta no está pagada como la de El Sol de Tlaxcala (el comentario se acompaña por una foto de Fabricio Mena).
Son posturas en los extremos. A unos las cifras los hicieron estallar de indignación. A otros los tienen locos de contentos.
Bueno, Fabricio Mena –según su comentario en El Universal- condenó al El Sol de Tlaxcala, al cual señaló de haber aceptado dinero a cambio de publicar una encuesta favorable a la perredista Lorena Cuéllar. (seguramente se refirió a aquella encuesta sin firma aparecida en dicho rotativo).
Habrá que aguardar a la aparición de nuevos trabajos con un sobresaliente respaldo metodológico para ver qué tanto coinciden con los escenarios encontrados por los encuestadores de El Universal.
Prueba no superada
El pasado domingo, el Instituto Tlaxcalteca de Elecciones (ITE) realizó un simulacro de la jornada electoral del cinco de junio.
Ese trabajo permitió a los consejeros darse cuenta de la lentitud con la que fluyeron los datos y de fallas básicas como por ejemplo la registrada en Yauhquehmecan, donde las instancias virtuales encargadas de concentrar los votos no tuvieron capacidad de captura, a causa de equipos en mal estado o falta del mismo, y por fallas de conexión a internet. Nunca pudieron conectarse.
En consecuencia se activó un plan alterno de crisis. Las urnas virtuales fueron trasladadas a San Miguel Contla, sede del ITE para realizar ahí su conteo.
¿Alguien metería las manos al fuego por el personal que hizo dicho traslado? Es que aún se recuerdan escenarios como los de Apizaco y Hueylotlipan, donde quedó para los anales electorales la presunta maniobra de embarazo de urnas. Bueno eran los tiempos en que el matador Rafael Ortega portaba la marca del tricolor en el pecho.
Seguramente recuerdan ustedes el tristemente célebre cochinero que, devino en la vergonzosa devolución de la alcaldía ya en manos del entonces primer espada tricolor, al entonces panista Jorge Luis Vázquez Rodríguez (la historia no necesito contársela porque el entonces panista acabó siendo priísta).
Un cochinero distinto
Hoy, los agujeros de fango donde retozan los integrantes del nuevo cochinero pusieron en marcha algunas variantes.
Comenzamos por los tiempos. Procuraron diversificar las fechas en el estercolero. Pasaron por su arco de triunfo los registros de los candidatos a alcaldes. A la fecha se desconocen oficialmente.
Y comenzaron el cochinero gourmet
Recurrieron a una tómbola para tumbar candidaturas a presidencias de comunidad. Antes jugaron un toma y daca con el INE respecto a la reglamentación de la paridad de género. El INE publicó ciertos acuerdos pero el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación se los echó abajo.
Así que el ITE tuvo manos libres para especular con los partidos políticos con esos registros.
Se los solicitaron una y otra vez. Y simplemente lo dejó en la lista de pendientes.
Pero llegó el día en que la sumisión de los consejeros al PRI los obligó a idear algo novedoso. Algo como las tómbolas que solo en la cabeza de los consejeros –porque no tienen un soporte jurídico- pudo tomar forma. Y así, echaron abajo 62 candidaturas a diversos partidos, pero destacan las 33 afectaciones al Movimiento de Regeneración Nacional y otras al Partido Alianza Ciudadana (PAC).
De qué manera harían sus tómbolas los señores consejeros del ITE que le atinaron a las comunidades donde los partidos damnificados por esta arbitrariedad contaban con un cuantioso espectro de votos.
Pues así los neutralizaron.
Un ejemplo grotesco es Apizaco, donde tiraron a los presidentes de comunidad que aportaban más votos a la causa del morenista Alejandro Parra. No repararon en el cumplimiento puntual de la paridad de género. A los consejeros les dio por dar vuelta a la urna de la tómbola, con un tino que son… ¡increíbles!
¿Meterían las manos ustedes al fuego por quienes organizaron la tómbola?, ¿Están seguros que en la urna no nada más introdujeron papelitos con los nombres de las comunidades perjudicadas?
Es el cochinero en pleno.
Y las casillas especiales están autorizadas. No obstante que ayer lunes marcharon cientos de militantes de Morena para protestar por su instalación –también lo hicieron para expresar su enojo por la escandalosa tómbola- la decisión está tomada.
Lo inconcebible es que a excepción de Morena los demás partidos de oposición no movieron un dedo para condenar las casillas especiales y la infamia llamada tómbolas.
Con una sangre fría que a cualquiera congela los artífices de la reforma electoral y quienes han estado tras las decisiones posteriores, han ido afectando en círculo a cada uno de los partidos que disputan algún puesto de elección popular.
Aprovechan esta condición:
Como panistas y perredistas están seguros que sus respectivas candidatas ganan la elección, tanto las casillas especiales como las ordinarias van a ser las más vigiladas de la historia.
¡Bien, verdad, así es la democracia!
Nada más un detalle, las puñaladas ya las dieron: en los registros deficientes de candidatos, en el caos de los presidentes de comunidad, en el impedimento de la candidatura común de la perredista Lorena Cuéllar, en un descarado afeitado del padrón, en la instalación de casillas en lugares parciales, como la terminal de ATAH en Apizaco, y en la Central Camionera en Tlaxcala (parciales porque participa un camionero).
El cochinero está a todo vapor. Los consejeros han sido tan hábiles que hasta hoy han librado su cese fulminante como ocurrió con los de Chiapas.
El INE atropella a toda velocidad.
Y los partidos de oposición… los partidos de oposición creen que van a ganar.