Aprobada en automático por PRI y PAN, este nuevo documento da al gobernador las facultades necesarias para designar notarios, librando los filtros existentes.

Ley Notariado Mariano Gonzalez Zarur, Marco Antonio Mena, PRI, Corrupcion, Caricatura, Tlaxcala En Linea

El manchisistema soltó al chivo en la cristalería. Y este no va a dejar piedra sobre piedra. Comenzó reformando la Ley del Notariado, como adelanto de lo que será su alocada despedida: luego adquirió el silencio del Legislativo para que nadie cuestionara las 300 mil chamarras con las que abriga certeza mapacheril en la elección del cinco de junio, y habría mandado personeros a municipios a amedrentar a los opositores, porque ustedes saben, los accidentes pueden comenzar a ocurrir.

Es un escenario desquiciante. Realidad que supera ficción. Caso híbrido en los anales del PRI.

Anticonstitucional

Antes de acatar el fallo judicial por el cual debe devolver las patentes a los ortinotarios, Mariano optó por complicar el escenario. Le apostó al retroceso arrogándose la facultad de crear a los manchi notarios. No me crean mucho pero hay personajes, dicen, como Cuauhtemoc Lima y como Hugo René Temoltzin, colocados en la punta de la fila para ser primeros en el turno de recibir su regalo de despedida.

González Zarur no podía desaprovechar la colusión que le permite reunir los dieciocho votos necesarios para aprobar dicha iniciativa, cuyas imperfecciones me llevarían a pensar en una especie de engaño interno a quienes mantienen viva la ilusión de heredar una patente, pese al riesgo que implica lo improvisado del documento aprobado.

Pero finalmente se los puede quitar de encima. Hacerlos notarios de existencia corta y luego, buscar culpables para señalarlos como los factores que impidieron el éxito a sus recomendados.

Sin tomar en cuenta su inexistente nivel académico, se coloca por encima del Colegio de Notarios, y se permite la atribución de decidir quién, dónde y por qué.

En realidad ha comenzado el año de hidalgo a tambor batiente. Pero también incluye la posibilidad de complejos engaños a los propios para quitárselos de encima responsabilizando a priori a quienes sin duda alguna van a impugnar su sorprendente iniciativa, hoy toda una ley gracias a la colaboración de PRI y PAN en un Congreso que ya nada tiene que esconder. Su colusión dejó de ser relativa y a paso a lo absoluto.

Silencio chicho

Como también es la sumisión, porque díganme ustedes si a estas alturas van a creer posible que a ninguna diputada o diputado de esta Legislatura se le prendió el foco para pedir una información detallada de las 300 mil manchichamarras, cuya distribución entre niños de primaria y secundaria comenzó al día siguiente de la unción de Marco Antonio Mena Rodríguez, abanderado tricolor al gobierno de Tlaxcala.

Una extraña energía recorre a cada legislador y lo inhibe de cuestionar origen y sentido, reales de los cientos de miles de chamarras, seguramente a precios inflados como ocurrió con la anterior entrega.

Esa rara fuerza también llegó a las instalaciones de la oposición porque al día de hoy, ni un solo adversario ha sido capaz de levantar la voz. O están ocupados en el proceso electoral, o son tan distraídos que hasta traen su propia manchi chamarra y no se han dado cuenta. Eso es muy probable.

Estamos ante una oposición obesa, torpe y pasiva. No le interesa que el PRI, versión Mariano haga uso de recursos públicos para sesgar con prendas tan rojas como parte del emblema del Revolucionario Institucional (la otra parte se dio el ciclo anterior, con las molestas chamarras verdes operadas por el hermano Tonchis).

Pues después que no se quejen porque les ganen de todas todas. Esa será su culpa.

Como en los viejos tiempos

Nos llega un reporte de Cuapiaxtla, donde una suerte de pistolero-manchi emisario, de nombre Antonio Romero, habría sido visto amenazando a la oposición para desistir en la competencia electoral.

Eso no es todo. Las amenazas se acompañan de temibles ofrecimientos… bueno, bueno, qué le falta los militantes de tu demarcación, les pregunta. Aquellos empiezan a hablar de promesas incumplidas respecto a materiales de construcción ofrecidos y otro tipo de enseres. Entonces el pseudo matón Romero toma nota, garantiza la llegada del cemento, tinacos o el apoyo que sin serle solicitado sirve en cambio como la advertencia sobre la cual no hay engaño. Para quienes la rechazan es una especie de beso de la muerte.

La amenaza en sí consistiría en plantea lo siguiente: “ah, no aceptas la ayuda, pues recuerda que en cualquier momento te puede ocurrir un accidente”…

Lo más grave es que Cuapiaxtla no es el único municipio. Ejemplos así se repiten en toda la demarcación estatal.

El novedoso estilo de los perredistas

Sin más complicaciones, ciertos operadores de la senadora Lorena Cuéllar Cisneros –de quien dicen que Mariano solo espera su salida definitiva del Senado- tienen una nueva estrategia para persuadir a los candidatos a alcaldes propuestos por otros partidos opositores.

Mira, les dicen, tú apoya a Lorena y vas a ser arropado por la próxima gobernadora.

Y así como permeó el rumor de ofrecimientos mil en los cargos, hoy la estrategia rebasa al conflictivo partido amarillo e invade a la demás oposición.

¿Se vale?, ¿entra en los terrenos de la democracia?, ¿es un nuevo chanchullo inventado en la desesperación de una candidata a quien su partido le ha quedado más que flaco?

Mientras esto sucede, el perredismo con el estigma Cambrón-Sesín, pervive en medio de la nueva batalla con Alberto Amaro, quien seguramente trae cuerda para el desquite.

En ese bajo mundo se las tiene que arreglar Lorena Cuéllar Cisneros.