Y viene lo peor, cuando a se defina cuál de los dos grupos, maderistas o corderistas va a quedar al frente de un partido que antes, se conducía con principios.
e1313

Bueno, está tan cerrada la disputa panista por su dirigencia nacional que desde ahorita se pueden ver dos mitades enfrentadas, de militantes que en otra época actuaban con principios, y no nada más con el interés al que el futurismo les mueve.

Maderistas y corderistas no ceden y ni siquiera pichojean. Y aquí los vemos muy preocupados porque de quien quede en la dirigencia nacional se deriva el futuro de los azules, las alianzas que pueden darse, y hasta el plan B, por qué no, haciendo uso de algún político en el contexto de la discreción (algo así como un alcalde) porque ya ve lo protagónicos o protagónicas que son, estas que no se dan tregua.

Estemos pendientes verdad, del desenlace de la elección nacional y que no nos resulte sorpresivo si al quedar Gustavo Madero o Ernesto Cordero, aquí, como va a ocurrir en todo el país con influencia albiazul, las cosas se van a definir.

Una más de la secre con más millas

Dicen que hace poco, la nada simática supersecretaria se acercó a la planta automotriz más importante de la región y pidió –con esos modos que ya la van caracterizando- le prestaran un auto descapotable, no sé si para algún desfile o para filmar algún promocional.

Ahí tiene usted a los alemanes, preparándole un Cabrio (ya va a haber de nuez) de un modelo adelantadísimo, pulidito, con el tanque lleno de un combustible especial y listo para que la super secre oprimiese el acelerador con sus juanetudas panteras.

Y así como ya se dieron los desplantes a Audi, a Liverpool y en Apizaco, a los inversionistas de la Antigua Estación, pues por qué no hacerlo con Volkswagen. Y sin mayor miramiento, llegó por allá el oficio del desdén: “ya no nos interesa su carrito”.

Nombre… si le digo que los teutones se pusieron verdes del coraje y juraron por Adolf, no volver a hacerle favor alguno a gentes de la talla de la seño Adri, aclaro, la de más millas acumuladas.
La falta de seriedad con corporativos nos coloca como la entidad federativa con menor, o ausente inversión extranjera, o bien como la entidad donde fuertes firmas de la talla de Nestlé, han preferido poner millas de pormedio, ya sea por la pésima atención de Moreno Durán, o por la gravísima inseguridad, acompañada también por una indolencia oficial que nadie es capaz de soportar.

Sede de la Conago en materia de Seguridad

Una cosa es cacarearnos como el estado más seguro y otra hablar con las víctimas del delito. Y resulta que ni somos los más seguros, como tampoco los más calificados para alzar la mano, presumiendo de lo que carecemos.

Vienen personalidades de la talla del secre de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong y varios gobernadores.

Yo creo que hay que hablarles con la verdad. Luego resultamos los más vivos para lanzar adulaciones al Presidente y ganarnos el aplauso fácil, pero qué tal cuando nos enfrentamos a las estadísticas, esas que son frías y no mienten.

De antemano, bienvenidos a tan distinguidos personajes. La súplica a los de casa para que digan las netas, cambien sus estrategias, y hoy que andan estrenando secre de Gobierno, pues en verdad se apliquen a fondo, porque no sabe usted lo que son los últimos años de una administración tan ralita como esta (sí, donde el mero mero aparenta un carácter tremendo, pero al final del camino resultó más ingenuo de lo que nos imaginábamos)

Disputa en el PT

Mariano creía cosa sencilla formar a los petistas con la mano puesta para darles migajas, pero desde la llegada del malencarado este de Silvano Garay, como que se dio cuenta que no es tan sencillo tratar con opositores de a deveras (no como algunos que tenemos de puro adorno).

No sé quien aguante más, si los partidarios de un instituto realmente libre de tomar sus decisiones sin la presión del ejecutivo, o aquellos que ya se acostumbraron a engordar la lonja haciéndose pasar por gente de Izquierda.

Sacaron a Mateo de Protección Civil, pero parace que nada más fue para ponerlo a convencer compañeros suyos de partido para ponerse en charola de plata para que los devore el mandamás.