El arranque del año para algunos ayuntamientos será más que complicado, no sólo porque se prolongará la escasez de recursos públicos, sino porque al interior de sus administraciones y de los cabildos el malestar contra los presidentes y las presidentas municipales ha venido creciendo, especialmente por decisiones unilaterales que están afectando a los regidores y a los trabajadores.

 

 

A lo anterior hay que sumar la desaprobación ciudadana que se está registrando en algunas ciudades como es el caso de Apizaco, donde bastaron cuatro meses para que los empleados del ayuntamiento y los ciudadanos terminarán decepcionados del inútil presidente municipal de Morena, Javier Rivera Bonilla, quien está sumido en el sótano de los peores alcaldes no sólo de Tlaxcala, sino del país como recientemente lo documentó Roy Campos, director de Consulta Mitofsky.

 

En Apizaco, los directores y empleados de confianza que comenzaron a laborar en la administración del mandilón abarrotero, están encabronados porque no recibieron la parte proporcional de su aguinaldo, cuando el personal sindicalizado obtuvo puntualmente ese derecho y otras prestaciones de fin de año.

 

Los que realmente trabajan en esa administración es el personal de confianza, pues está comprobado que los sindicalizados simulan y simplemente no realizan ningún esfuerzo adicional, de ahí que Javier Rivera se equivocó al castigar a los primeros bajo el torpe argumento de que el ayuntamiento de la ciudad rielera está en quiebra.

 

Otro caso que también demuestra las torpezas y el desaseo que existe para manejar el ayuntamiento es el de Apetatitlán, donde el edil mandilón Azaín Ávalos Marbán deja que su esposa, la poblana Paola Flores Parra, tome decisiones en función de sus intereses excluyendo las necesidades de los habitantes.

 

En diciembre los regidores no aprobaron el absurdo presupuesto de egresos que propuso ejercer durante este año. A sugerencia de su “asesora” Paola Flores, el torpe Azaín Ávalos quería destinar tres mil pesos de apoyo a los regidores y a la síndico, así como a los presidentes de comunidad, con la finalidad de quedarse con la mayoría de los recursos públicos y ejercerlos discrecionalmente y redoblar los apoyos que entrega a amigos, compadres y familiares.

 

Por ejemplo, el alcalde de Apetatitlán nunca les niega apoyos económicos a sus compadres Efrén y a Arturo Nezahual, a quien habría ayudado para colocar a su esposa en el ayuntamiento de Tlaltelulco y de paso a su tía María Elena Ávalos.

 

Se presume que en la nómina de Apetatitlán cobran algunos recomendados de la presidenta municipal de Tlaltelulco, Rocío Menéndez Pluma. Lo cual formaría parte de un intercambio que es común verlo entre algunos presidentes municipales de la entidad.

 

La imagen del limitado Azaín Ávalos está tan deteriorada que los habitantes en lugar de buscar una cita con él lo hacen con la mujer que toma las decisiones y que de paso también controla el DIF municipal, Para nadie es un secreto que Paola Flores es la que decide a quién recibe su manejable esposo y con quién se reúne, evidenciando claramente que la que ejerce el poder es ella.

 

Otro ayuntamiento donde también hay malestar contra la alcaldesa, es el de Tlaltelulco donde los regidores y empleados no sólo no cobraron aguinaldo, sino que en ocasiones deben esperar unos días más para recibir el pago de su quincena.

 

La crisis en ese ayuntamiento es tan grande, que dicen que la presidenta municipal en ocasiones ya no sabe qué hacer para enfrentar la terrible crisis financiera en que se encuentra su ayuntamiento.

 

El caso del ayuntamiento de Españita, donde el alcalde, Juan Carlos Galindo López, destituyó al Tesorero por perderle confianza podría replicarse en otros municipios, especialmente en aquellos en que los ediles tlaxcaltecas aceptaron la recomendación de un contador para ese puesto, ya que los que ejercer el control sobre el dinero son ellos y no los presidentes municipales.

 

La armonía que prevaleció en los ayuntamientos está por perderse y no descarte que pronto aparezcan conflictos que atenten contra la gobernabilidad que hasta ahora existe.

 

Una buena noticia para Tlaxcala

 

Tlaxcala formará parte de los 13 estados del país donde se realizarán los Foros de Consulta del Plan Nacional de Desarrollo 2025-2030 que presentará la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo.

 

Las sedes de los foros que se llevarán a cabo en la primera semana, del lunes 6 al sábado 11 de enero, son Baja California, Guadalajara, Yucatán, Nuevo León, Nayarit, Sonora, Guanajuato, Hidalgo, Coahuila, Tlaxcala, Colima y Aguascalientes.

 

Sin duda la gobernadora Lorena Cuéllar Cisneros será una buena anfitriona y aprovechará el momento para demostrar que Tlaxcala se está transformando.

 

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