Será cuestión de días para conocer si ciertos políticos tlaxcaltecas con plazas de maestros siguen manteniendo sus privilegios de cobrar y no trabajar o si es que realmente éstos se harán presentes en las aulas para dar clases y justificar el sueldo que reciben.

 

 

A la Secretaría de Educación Pública de Tlaxcala que encabeza Homero Meneses Hernández le llevó cuatro meses detectar a los aviadores que por años han devengado un sueldo sin dar clases, irregularidad que se viene presentando desde el gobierno de Héctor Ortiz Ortiz, se mantuvo en la administración del rancio priista Mariano González Zarur y se continuó en la gestión del castrado Marco Antonio Mena Rodríguez.

 

Por ahora, el número y los nombres de esos “maestros” sólo los tiene el primer círculo del secretario de Educación Homero Meneses, quien entregó un detallado informe a la gobernadora Lorena Cuéllar Cisneros, misma que dio la orden de solicitar a cada uno de los involucrados incorporarse a las aulas.

 

Los supervisores, directores y jefes de sector tendrán hasta el 17 de enero el plazo que denunciar a los trabajadores de la educación que laboren de forma irregular en la dependencia, con la advertencia de que si no lo hacen serán ellos los que enfrentarán el proceso sancionador de acuerdo con la ley general de responsabilidades administrativas, de responsabilidad de los servidores públicos para el estado de Tlaxcala, el reglamento de las condiciones de trabajo del personal de la Sepe y demás disposiciones aplicables.

 

Durante diciembre los “maestros” con “permiso” o “comisionados” fueron notificados por la dependencia para que de manera inmediata se presentaran a trabajar en las aulas, situación que algunos pensaron que se trataba de una broma o de un proceso normal que terminaría en el olvido, pero se equivocaron cuando acudieron a las oficinas y confirmaron que la orden era en serio y que en caso de no acatar podría enfrentar no sólo el despido inmediato, sino un proceso resarcitorio, es decir, el involucrado tendría que regresar los sueldos que cobró sin trabajar.

 

No crea que ha sido fácil el proceso para terminar con la larga lista de maestros que cobran sin mover un dedo, pues en diciembre el dirigente de los docentes en Tlaxcala, Cutberto Chávez de la Rosa, secretario general de la Sección 31 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), intentó negociar con las autoridades estatales la autorización de más de “90 comisionados”, petición que fue rechazada por ser excesiva, de ahí que sólo lograron ese privilegio alrededor de 25 o 30 miembros de ese gremio.

 

Será cuestión de tiempo para que se conozca los nombres de esos maestros tlaxcaltecas que fueron privilegiados por muchos años y que a partir de este mes ya están presentes en las aulas dando sus clases y justificando sus jugosos salarios que consiguieron por ser amigos de algún ex gobernador o de influyentes ex funcionarios del sector educativo.

 

Si bien la relación entre las autoridades educativas y el SNTE no pasa por su mejor momento, lo cierto es que después de que concluya el proceso para terminar con la presencia de aviadores y “comisionados” es probable que las diferencias se incrementen, al grado que los maestros buscarán cualquier pretexto para iniciar protestas y llevar a cabo paros, sobre todo porque el sindicato cada vez se ve más debilitado.

 

Una prueba de lo anterior es que el SNTE intentó conseguir el pasado lunes 12 de diciembre como un día no laborable pero fracasó, como ha pasado en sus intentos de suspender las labores presenciales en la Secretaría de Educación Pública bajo el argumento de que los contagios de Covid-19 se han multiplicado en los últimos días.

 

El argumento del SNTE para exigir el cierre temporal de la dependencia, es porque en la Contraloría Interna ya se detectaron 7 casos, en el área de Ecología Educativa otros 3 y dos más que están en observación, así como uno en los departamentos de Infraestructura y Equipamiento, Planeación, Becas. Tesorería, Inventarios, Consejo de Participación Social y Educación Especial.

 

Por lo pronto, tiene mucha razón Homero Meneses cuando suele presumir entre sus más cercanos colaboradores que él ve al SNTE como un lindo gatito que ya no asusta ni genera miedo.

**************************************************************************************************************