A partir de hoy y hasta que se confirmen los registros de los candidatos y las candidatas a alcaldes y sus planillas a los 60 ayuntamientos de la entidad, se vivirá una tensa calma en los partidos políticos, pues en los siguientes días se esperan conflictos y divisiones que podrían afectar las campañas de los actuales abanderados a la gubernatura de Tlaxcala.
En todos los partidos hay molestia con sus dirigentes y candidatas y candidato a la gubernatura, debido a que hay abanderados que ya han detectado deslealtades, dobles caras y un juego sucio que pone en riesgo su triunfo.
Hay abanderados del PRI que ya vieron y detectaron que su candidata a la gubernatura, Anabell Ávalos Zempoalteca, está apoyando a panistas, petistas y ex morenistas en municipios en donde el ex partidazo tiene candidatos competitivos y que no reciben el respaldo esperado por el simple hecho de ser militantes del tricolor.
Se dice que a la abanderada de la coalición “Unidos por Tlaxcala” que integró al PRI, PAN, PRD, PAC y el PS la están engañando, porque le aseguran que los candidatos ajenos al PRI sí pueden ganar los comicios del 6 de junio, cuando la realidad confirma que el tricolor tiene las mejores propuestas y es el único partido con estructura propia, real y efectiva en esos municipios.
En Morena, la división interna sigue presente y cada vez es más evidente que ciertos candidatos a alcaldes lejos de sumar están provocando la desbandada de militantes. En Apizaco el abanderado de la Cuarta Transformación, el empresario Rafael Álvarez Escárcega, no logró la conciliación, pero sí pudo hacer que todos los aspirantes se unieran pero para trabajar en su contra, situación que se está replicando en Chiautempan con Gustavo Jiménez Romero y en Huamantla con Juan Carlos Santiago Pimentel.
El PT, el PVEM y Nueva Alianza son los partidos que se beneficiaron con la división interna de Morena, al grado que registraron a varios aspirantes ex morenistas a presidentes municipales que les pueden dar triunfos en Terrenate, San Pablo del Monte y otros ayuntamientos más.
El Instituto Tlaxcalteca de Elecciones (ITE) hoy estará saturado y con exceso de trabajo. En los siguientes días deberá revisar la documentación y avalar los registros para que los candidatos a alcaldes puedan arrancar campañas el próximo 4 de mayo.
En ciertos municipios la competencia electoral se pondrá más que interesante, sobre todo en aquellos donde el PRI y el PAN se disputarán ciertos ayuntamientos como podría ser Tlaxcala y Apizaco, pues es obvio que los candidatos de ambas fuerzas políticas se lanzarán críticas y fuertes señalamientos que evidenciarán que la “unidad” que pactaron fue exclusiva para la gubernatura, pero no para las diputaciones federales, locales y menos para las alcaldías.
Pronto estaremos viviendo otra efervescencia política-electoral en la entidad y en los 60 municipios tlaxcaltecas. Veremos con qué fuerza llegan los candidatos y las candidatas de Morena y si en estos comicios si ganarán ayuntamientos y presidencias de comunidad, ya que como se recordará en su primera participación como partido político que fue en el 2016 no logró ningún triunfo y sólo se conformó con una diputación plurinominal.
La pelea por los 60 ayuntamientos de Tlaxcala será intensa y al finalizar se tendrá un nuevo mapa que seguramente reflejará una nueva pluralidad que hoy muy pocos visualizan.
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