La conformación del Bloque Opositor Amplio (BOA) en Tlaxcala está casi amarrada y pactada, por lo que será en diciembre cuando se confirme y se conozca el nombre de la priista o el priista que lo encabezará y enfrentará a Morena y sus aliados en las elecciones previstas para el primer domingo de junio del 2021.

 

El acuerdo del BOA que ya fue palomeado por los representantes de los partidos políticos que lo integran y el mismo mandatario Marco Antonio Mena Rodríguez, establece que el PRI será el que ponga el candidato a gobernador, mientras que el PAN, el PRD, el PAC y el PS se quedarán con las nominaciones a las 15 diputaciones locales.

 

De no haber cambios, será un hecho que el PAN designará al candidato a diputado federal por el primer distrito electoral federal, el PRI nombrará al abanderado por el segundo distrito electoral federal y el PRD llevará mano en el tercer distrito electoral federal.

 

En la elección para alcaldes y presidentes de comunidad no habrá alianza, aunque quizá el BOA podrá hacer una que otra excepción en algunos municipios donde haya serias posibilidades de conseguir el triunfo como en Tlaxcala, Apizaco y Tlaxco donde el PAN encabeza las preferencias en las dos últimas poblaciones.

 

El PRI sabe que será suya la candidatura al gobierno del estado y de la terna conformada por la alcaldesa capitalina, Anabell Ávalos Zempoalteca, el secretario de Educación Pública, Florentino Domínguez Ordoñez y el actual líder estatal del ex partidazo, Noé Rodríguez Roldán, saldrá el elegido que deberá demostrar su posicionamiento y aceptación a través de una encuesta que ese instituto político llevará a cabo en los siguientes días.

 

Hay que decir que entre los panistas y perredistas, así como entre los seguidores del PAC que controla la familia Ortiz y el PS bajo la tutela de Rosalía Peredo Aguilar, la priista Anabell Ávalos es la que logra el mayor consenso y respaldo rumbo a la gubernatura de Tlaxcala, de ahí que se da como un hecho su inminente nominación que, de no haber cambios, estará siendo confirmada en diciembre.

 

Los últimos estudios demoscópicos realizados para medir el posicionamiento e intención del voto de los aspirantes a la gubernatura de Tlaxcala, refieren que la alcaldesa capitalina encabeza las preferencias y logra una ventaja importante sobre sus compañeros de partido que para muchos sólo se trata de dos arlequines que son usados en la estrategia para legitimar la proclamación de Anabell Ávalos como la aspirante oficial del PRI y del BOA.

 

Aunque también hay quienes aseguran que hay una estrategia para apuntalar la nominación del gris Noé Rodríguez, quien habría recibido el apoyo de importantes figuras de su partido en una reunión que se realizó hace unos días en un salón en el municipio de Ixtacuixtla, donde por cierto estuvo presente el edil de esa población Rafael Zambrano Cervantes.

 

Otra versión, es que hay una cargada oficial del gobierno de Marco Mena para el desgastado y débil secretario de Educación, Florentino Domínguez, pues para nadie pasa desapercibido el hecho de que ese pésimo y mediocre funcionario utiliza su cargo y los recursos públicos para llevar a cabo una torpe e ilegal campaña de promoción.

 

Respecto a los distritos electorales locales, le puede comentar que el PAN se quedará y designará a seis candidatos, tres hombres y tres mujeres que competirán por las cabeceras distritales donde registra un alto nivel de competencia como en Yauhquemehcan, Apizaco, Tlaxco, Chiautempan, Calpulalpan y Huamantla.

 

El PAC tendrá la potestad de designar a cuatro candidatos a diputados locales, mismo número que tendrá el PRD, para dejar al PS un solo aspirante.

 

En la elección para ciertas presidencias municipales no se descarta establecer una alianza. Tlaxcala capital está pensada para que la encabece un priistas que tenga probada militancia, capacidad y estructura, cualidades que sólo reúnen el junior Héctor Martínez Zamora, hijo del actual síndico, Héctor Martínez García, así como el títere de Pedro Bañuelos Morales que es manejado por varios ex alcaldes capitalinos y el tenebroso Carlos Bailón Valencia, responsable de la Secretaría Técnica de la oficina del gobernador Mena.

 

En la competencia también aparece un iluso y mediano empresario metido a funcionario de nombre José Antonio Carvajal Sampedro, quien no crece en las encuestas pero sigue visualizándose como el impoluto priista que, según él, tiene todas las cualidades y atributos para administrar el ayuntamiento de Tlaxcala, cuando en realidad carece de carrera y experiencia para ser considerado como un aspirante serio a ese cargo.

 

En fin, el BOA avanza y la competencia por la gubernatura de Tlaxcala se pondrá más que interesante.