De ser ciertos y estar actualizados los datos que maneja la Secretaría de Salud en Tlaxcala en torno a los enfermos y fallecidos de Covid-19, entonces es muy probable que la entidad se esté encaminando al color verde del semáforo epidemiológico, aunque para otros el escenario alentador que se tiene pronto cambiará porque no descartan un rebrote de infectados ante el relajamiento de las medidas sanitarias.

 

Tlaxcala registraba hasta ayer siete mil 880 casos positivos y mil 194 fallecimientos, es decir, que en el primer apartado el estado no reporta ni el uno por ciento de los contagios a nivel nacional, pero si supera el uno por ciento en lo que se refiere al número de personas que han perdido la vida por la mortal enfermedad que en México ya alcanzó la cifra de 83,781 mexicanos.

 

En la primera semana de octubre se detectaron 222 infectados de la enfermedad y en la segunda un total de 173 pacientes, cifra que es menor a los casos que se reportaron en tres de cuatro semanas de mayo, pero aún así estamos lejos de lograr los niveles de contagios que se conocieron en abril que sumados apenas si fueron de 126 pacientes con coronavirus.

 

En lo que se refiere al número de personas fallecidas en Tlaxcala, en la última semana que concluyó se acumularon 23 decesos, cifra muy similar a la que se obtuvo en una semana de junio y en otra de mayo, lo que demuestra que el personal médico ha logrado disminuir la letalidad del Covid-19.

 

La primera y última semana de julio han sido las más complicadas para las autoridades sanitarias, debido a que se alcanzó una cifra de 90 y 112 fallecidos, respectivamente, convirtiéndose hasta ahora como las más mortales de la actual pandemia.

 

Ante tal realidad pareciera que Tlaxcala va encaminado al color verde del semáforo epidemiológico, rango que sólo tiene en este momento el estado de Campeche que desde hace varios días logró adaptarse a la nueva normalidad.

 

El fin de semana pasado hubo entidades como Chihuahua, Coahuila, Sinaloa, Durango, Aguascalientes, Querétaro y Oaxaca que retrocedieron y se vieron obligadas a pasar del riesgo medio o color amarillo, al color naranja, lo que significa que nuevamente impondrán medidas restrictivas tanto en lo económico, comercial y lo social.

 

El color naranja indica que existe un alto riesgo de contagio, de ahí que Tlaxcala debe evitar un retroceso y seguir por la ruta que lleva a fin de lograr las condiciones sanitarias que permitan la nueva normalidad que, entre otras cosas,  considera las clases presenciales.

 

En Tlaxcala hay 16 municipios que cada uno reporta hasta ahora menos de 30 casos de Covid-19, siendo estos Acuamanala 27, Xiloxoxtla y Atlangatepec 26, San José Teacalco y Zacualpan 25, San Damián Texoloc 23, Sanctórum 22, Muñoz de Domingo Arenas 21, Mazatecochco 20, Españita y Lázaro Cárdenas 15; Santa Cruz Quilehtla y Santa Apolonia Teacalco 14, Benito Juárez 11, San Lucas Tecopilco 9 y Emiliano Zapata 7.

 

En contraste hay 14 municipios que han concentrado el mayor número de los siete mil 880 casos positivos, siendo estos Tlaxcala registra mil 389 casos, Apizaco 880, Chiautempan 537, Huamantla 477, Zacatelco 374, Contla 282, Yauhqumehcan 228, San Pablo del Monte 225, Calpulalpan 217, Tlaxco 191, Totolac 181, Ixtacuixtla 179, Tetla 162 y Papalotla 149.

 

Seguramente el gobernador Marco Antonio Mena Rodríguez es uno de los más interesados en lograr que Tlaxcala alcance el color verde del semáforo epidemiológico, pues sin lugar a dudas tendría un tema a destacar en su cuarto y penúltimo informe de gobierno que podría realizar en diciembre, mes en que arrancará la cuenta regresiva de su administración que en agosto del 2021 concluirá formalmente sus funciones.

 

Los datos confirman que después de todo la pandemia fue manejada correctamente por el gobierno del estado.