Será cuestión de días para saber a qué se comprometió el PAN en el Congreso del Estado para que Morena y sus aliados el PT y el PES hubieran aceptado que presidiera la Mesa Directiva del primer periodo de sesiones del segundo año de la actual legislatura a través de Omar Milton López Avendaño, dejando con la ilusión a la perredista Laura Yamili Flores Lozano que simplemente no pudo convencer a sus compañeros para obtener su apoyo.

El jaloneo por ese cargo no sólo remarcó la división existente en la fracción parlamentaria de Morena, sino que evidenció que varios diputados morenistas, del PT y del PES son capaces de acomodarse según sus intereses, es decir, si en algún momento se muestran como aliados incondicionales de la chiquillada (PRI, PAN y PRD) en otras circunstancias como las de ayer que se votó la integración de la Mesa Directiva son capaces de dejar solos a esos grupos minoritarios y jalar con la mayoría para seguir el canto de las sirenas.

Omar Milton López que es partidario de desechar los juicios políticos que se siguen contra los presidentes municipales de San Lorenzo Axocomanitla, Martha Palafox Hernández y de Huamantla, Jorge Sánchez Jasso, será sometido permanentemente a un escrutinio por parte de otros legisladores que saben que el panista tiene un marcado interés en salvar a esos cuestionados ediles, pues incluso ha buscado que las serias anomalías financieras y administrativas que enfrentan no sean investigadas y aclaradas.

Morena y sus aliados al no lograr un bloque mayoritario unido y sólido tuvo que entrar en las negociaciones y finalmente ceder al PAN la representación del Congreso del Estado, pues corría el riesgo que dicha figura fuera ocupada por el ex perredista y neopetista Miguel Ángel Covarrubias Cervantes que después de presidir la Comisión Permanente podría brincar a la Mesa Directiva al no lograrse un acuerdo, situación que no era del agrado de la mayoría de los diputados que optaron por designar a López Avendaño.

Laura Yamili Flores por más que subió y bajó buscando el respaldo de sus compañeros legisladores no logró los 17 votos que requería, en gran medida porque una mayoría de legisladores percibe que esa perredista es manejada y manipulada por el líder estatal de ese debilitado partido, Juan Manuel Cambrón Soria.

Habrá que ver a que se comprometió el PAN y cuál será su postura de ahora en adelante. De entrada es probable que deje de criticar y hacer señalamientos contra el gobierno federal que preside Andrés Manuel López Obrador y se muestre más que amigable con quienes deberían ser sus principales rivales políticos.

Es muy probable que la dirigencia estatal del PAN en manos de José Gilberto Temoltzin Martínez mantenga una línea discursiva y los legisladores de su partido otra. La nueva coordinadora parlamentaria del blanquiazul en el Congreso del Estado, Leticia Hernández Pérez, será sólo una figura decorativa, ya que no sólo carece de liderazgo y talento, sino que es una política convenenciera que se mueve conforme a sus intereses y a los que le dicte su verdadera jefa Adriana Dávila Fernández.

Pronto se deberán analizar y discutir temas espinosos en el Poder Legislativo y se verá a qué se comprometió el PAN y cuál fue la intención de Morena para ceder la Mesa Directiva.

El primer tema tendrá que ver con la aprobación o no de una iniciativa de ley para permitir el funcionamiento de plataformas digitales para ofrecer el servicio de transporte en el estado.

Hasta ahora los diputados sólo buscan autorizar esa modalidad tecnológica para aquellos transportistas tlaxcaltecas que gozan de una concesión y de esa forma prohibir a particulares la prestación de ese servicio, situación que de aprobarse provocará un enorme descontento de las empresas que ya operan y de los usuarios de esas plataformas que muestran su rechazo a los taxistas tradicionales por sus excesivas tarifas.

Al parecer los actuales diputados locales están empeñados en seguir cometiendo errores para que los ciudadanos sigan decepcionándose de ellos.