El domingo que viene se podrá saber si el grupo Unidad Panista está en posibilidades de quitarle a Adriana Dávila el control de la dirigencia estatal del partido que ha tenido por casi seis años.

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Un proceso más que interesante es el que se vive al interior del PAN en Tlaxcala, donde el ajuste de cuentas, venganzas y el desplome de supuestos líderes azules son la constante en las últimas votaciones para elegir consejeros estatales y nacionales.

Los resultados de las votaciones para integrar la lista de panistas tlaxcaltecas que serán propuestos como consejeros evidencian, sin duda, el gran malestar de la militancia contra el grupo de Adriana Dávila Fernández y Adolfo Escobar Jardinez.

Al contabilizar los resultados, el grupo Unidad Panista conformado por diferentes liderazgos como Aurora Aguilar, Alejandro Aguilar, Claudia Pérez, José Gilberto Temoltzin y otros, logró sumar 50 propuestas a consejeros estatales que serán votadas por los delegados que asistan a la Asamblea Estatal del PAN programada para el 4 de diciembre.

Un número similar fue el que obtuvo el equipo de la senadora y ex candidata del PAN al gobierno Adriana Dávila, a quien le está saliendo muy cara la alianza que estableció con el alcalde capitalino Adolfo Escobar, quien apenas si pudo sumar 18 propuestas a consejeros.

Con esos número el grupo Unidad Panista enfrentará al bloque de Adriana Dávila y Adolfo Escobar en la Asamblea Estatal, evento al que se espera la participación de casi 700 panistas que sin duda se darán con todo y difícilmente ocultarán sus fobias con determinados líderes de su partido. Tendrán que elegir 80 consejeros estatales y 4 nacionales.

Hay ejemplos claros de que el binomio Dávila-Escobar dejó de ser atractivo para la militancia. Hace unos días el líder del partido Carlos Carreón Mejía fue exhibido al perder las votaciones y sólo contabilizar nueve sufragios. Este fin de semana Raúl Gutiérrez -hermano de Ángelo Gutiérrez y Valentín Gutiérrez , diputado local y alcalde de Apetatitlán, respectivamente- no pudo ganar la votación en Xaloztoc y perdió tres a uno frente a Omar Corte.

En el municipio de Ixtenco el sobrino de Adriana Dávila, Francisco Cuevas fue derrotado por Demetrio Torres, quien le dobló el número de sufragios. Una de las cartas fuertes de Adolfo Escobar simplemente no pudo ganar nada. El ex diputado Juan Bárcenas perdió en Santa Cruz Tlaxcala y Tetla de la Solidaridad.

En Españita, el ex delegado de la Sagarpa, Rolando Romero derrotó al constructor de Adriana Dávila de nombre Cristóbal Cruz.

Adolfo Escobar y Leonor Romero simplemente fueron ratificados en el municipio de Terrenate, donde no se llevó a cabo la votación debido a que no hubo más propuestas para consejeros.

El que de plano está quedando muy parado en este proceso interno es Adolfo Escobar, ya que no sólo le cuestionan su supuesto liderazgo, sino su nula capacidad para operar.

El próximo domingo saldrán rayos y chispas de la Asamblea Estatal, pues sin duda será el primer antecedente real que se tenga para ver que grupo se quedará con la dirigencia estatal del PAN que se renovará en febrero del 2017.

Más sobre el fraude de venta plazas en la USET

Sobre la denuncia de ventas de plazas que se realizó en la USET con el aval de funcionarios y que se presumen obtuvieron más de 17 millones de pesos siguen apareciendo evidencias que confirman que para timar a las personas se puso en marcha un complicado entremado en la Unidad de Servicios Educativos de Tlaxcala.

La cara visible de la venta de plazas y el que recibía el dinero era Ismael Paleta, quien se desempeñaba como secretario particular del entonces responsable del sistema de Telesecundarias.

Con el aval de sus jefes y después de repartir los recursos captados por esa operación – Roberto Serafino Bravo y Armando Hernández, responsables de la Dirección de Recusos Laborales de la USET-, Ismael Paleta se daba a la tarea de presumir su riqueza. Compró autos disfrutó de viajes y hasta abrió un restaurante cerca de la Cruz Roja.

Ismael Paleta era el responsable de entregar los supuestos documentos oficiales que avalaban la asignación de las plazas. En la mayoría de los casos se utilizó sellos falsos y las firmas que tenían los documentos no correspondía al del funcionario en cuestión.

Sin embargo, hay pruebas de que otros documentos si eran legales porque algunas personas muy cercanas a Ismael sí lograron su plaza.

Si bien la Procuraduría General de Justicia en el Estado nunca abrió una investigación oficial, lo cierto es que varios directores de escuelas de Tlaxcala comprobaron que se estaban cometiendo irregularidades, pues fueron ellos los que detectaron los sellos falsos en las órdenas de presentación que las personas defraudadas entregaban para iniciar sus labores.

Sin embargo, la Contraloría del Ejecutivo tampoco optó por investigar esa anomalía, situación que hace suponer que las personas encargadas de investigar ese asunto también fueron beneficiadas con algún estímulo.

Se sabe que fueron 50 personas las que entregaron cada una la cantidad de 500 mil pesos a Ismael Paleta para lograr una plaza en la USET. Hoy nadie les hace caso y lo peor es que ya fueron amenzadas por los familiares de ese exfuncionario para que dejen de hablar del asunto.

Quien dice que el crimen organizado no está en el gobierno.

http://archivo.e-consulta.com/blogs/senoriotlaxcalteca/?tag=adolfo-escobar-jardinez