Esta si es fiesta, no como las reunioncitas ahí de pobretones… no, aquí hay gallos, toros, verde con verde, y sobre todo el asunto temático que los convoca: entre los González hay un gobernador, además contador y político de grandes vuelos; ¡no faltes!, ¿te invitaron?

Hay que ser muy cuidadosos a la hora de incorporarse a la carretera. Tú sabes… el famosísimo verde con verde y su nula palabra de honor –una maravilla de bebida legada por don Pancho Hernández- y la barbacoa, y las carnitas, ah claro el pulque y demás brandis, whiskys, cervezas y redbules, llevados por la inmensa lista de invitados a la madre de todas las fiestas.

Cada región del país tiene su lado amable, relajado… su jet-set que, aquí suele darse en el pachangón de Los González, con sede en Coaxamalucan una bellísima ex hacienda, con plaza de toros y muros carcomidos por los años, evocativa de aquellos tiempos en los que el territorio entero era propiedad de tres docenas de ricas familias, muy metidas a aquello de las tiendas de raya y hasta de andar pagando con pulque a los acasillados (cuando la hacienda era pulquera).

Coaxamalucan es un sitio de ensueño. Despierta al maletilla que todos llevamos dentro y te traslada sin escalas, de las vulgaridades de lo cotidiano al esplendor de la vastedad.

Ahora imagínala pletórica de las familias originales que generación tras generación han mantenido su status de ricos y que, en la enorme mayoría desbordaron sus capacidades para hacer fortuna.

Corría el primer año de gestión del perredista Alfonso Sánchez Anaya, invitado principal a un pachangón, digamos espontáneo allá en Coaxamalucan… y entre las peleas del palenque y las tientas de vaquillas se dijo a sí mismo, “mi ASA, por qué no hacer de estas fiestas una celebración con fecha y hasta con nombre porque, el ambiente de aquí es la esencia de los millonetas de Tlaxcala… llamémosla ‘la Gonzalada”.

Y hay de aquél que siendo del clan no asista. Esta vez, por ejemplo el invitado de honor, ¡pues claro!, es el gobernador Mariano González Zarur, quien aquí entre nos, es posible que se ponga guapo con los tremendos gastos requeridos para pagar que las viandas, músicos, meseros, carnitas, tortillitas, consomés, barbacoa de borrego (y de borrega), el infaltable verde with green… ah, y las servilletas.

Sí porque si quieres beber, pues lleva tus cajas de lo que quieras… ya sabes entre más caro, pues te luces más y como el convivio se da en un sitio cuasi aislado, pues no hay bronca si de repente las cucharadas se te pasan y el suelo se te mueve.

Según valiosas crónicas testimoniales, los asistentes a la primera Gonzalada casi llegan a las tres mil personas. Aquella ocasión -1999, a penas iniciaba el gobierno de la casta divina- nadie tuvo empacho en portar una camiseta amarilla… ah qué tiempos… por ejemplo Minerva Hernández qué se iba a andar imaginando vestida de panista y menos de amiga de la plebeya de la seño Adri.

No crea usted que estas tertulias son tan simples. Se trata de aquelarres multitudinarios con una especie de causa común: hagamos fortuna a costa del indio…

Bueno y en este régimen del priísmo retro, nota usted la empatía de aquella como doctrina de los pudientes con la insistencia marianista de instalarse en escenarios idos, entre frases de la talla de, “se me hace chico el mar para echarme un buche de agua” (Gustavo Díaz Ordaz), y el inolvidable, “Arriba y Adelante”, del portentoso don Luis Echeverría.

Y en el ámbito local, cómo no recordar el: “no se trata igual a los desiguales”, de don Emilio Sánchez Piedras.

Cómo no van a ser razones para reunirse a departir, recordando aquellas páginas, lindas u obscuras dependiendo de quién las evoque.

Bueno, pues la fiesta de fiestas tendrá lugar mañana al medio día en Coaxamalucan, con la interesante novedad de que los gastos ya no tendrán que reunirse en una especie de vaquita entre todos los invitados… pues para qué tenemos gobernador de apellido González… ah sí serás tarugo, pues para qué crees que ya despedimos a tantos… olvídate de los recortes que apenitas nos vino Calderón a gritar a la cara… nombre, esta, esta que les platico, es la cara bonita del Tlaxcala que resurge entre los escombros de una cosa a la que Tulio Hernández Gómez describía con singular estilo: “tanta democracia nos partió la madre…”

Este año, las invitaciones salen –según gente muy íntima a la organizadora- de la oficina del mismísimo mandamás, don Mariano González.

Como año con año, se ha requerido de la capacidad organizativa de Susy Carvajal González, carnala de César –el desplazado- ambos, sobrinos del hacendado gobernador.

Como todos los eventos de esta envergadura, habrá que ser temático. Entonces en cada mesa la conversación versará en que hoy, entre los González hay un gobernador, además contador, hacendado y político de los que ya no caben acá, sino tienen su planta en la “suidá”.

Entre esa divina casta podremos esperar la presencia de la familia González Vergara, dueños de gasolinerías y socios de la UVT, universidad beneficiada con recursos públicos en la contratación de cursos.

También estará la familia García Méndez González, otros socios de la UVT.

No podrán faltar la familia Carvajal González, Muñoz González, Sesín González, González García Moreno, Iturbide González.

A la fiesta no se sabe si irá Daniel Herrera Murga, ex secretario de Turismo en el sexenio de Héctor Ortiz, pues esa lindura de político está casado con Alejandra Carvajal González.

Otra duda que existe, es si el obispo de Tlaxcala, don Pancho Moreno Barrón, oficiará la misa de la Gonzalada, en la capilla de la hacienda.

Una buena parte de los asistentes serán los dueños de las ganaderías que operan en Tlaxcala como Iturbide Hermanos, Coaxamaluca, Tenopala, Piedras Negras, Rancho Seco, Apizaco, Felipe González, La Soledad, Manuel González, Zacatepec y García Méndez.

No les hacen caso

El diputado orticista Fulgencio Torres Tizatl, expresó en la tribuna su mohín porque el gobernador Mariano González Zarur, no ha girado instrucciones a su golpeador de planta… digo, al secretario de Seguridad Pública, Orlando May Zaragoza, para acudir al Congreso y presentarse ante las señoras y señores legisladores.

Recordemos que el hoy titular de la SSP llegó con las cartas credenciales del secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna, tras la intervención de fuerzas federales para acallar la inconformidad político laboral de policías locales.

May Zaragoza, causó baja en Tabasco, última plaza donde laboraba antes de llegar a Tlaxcala, al tener una injerencia no aclarada en asuntos de narco y además, labrarse una imagen de jefe torturador, en estos tiempos de respeto a los Derechos Humanos.

Torres Tizatl, cuyo protagonismo es de comentarse, no ha perdido oportunidad para destacar, lo mismo convocando a la creación de un mapa de antros y prostíbulos que, a exigir al Ejecutivo la presencia de su nuevo funcionario en las tierras tlaxcaltecas.