Yerra quien supone que el pueblo no advierte la cantidad de dinero invertido en hacer campaña para personajes surgidos a la política por generación espontánea.
Creo que el activismo político en el marco de acciones de gobierno no beneficia a las figuras que son el blanco para gastar recursos oficiales. Quien se halla tras dicha intención no ve más allá de sus ambiciones familiares, pese a que al inicio ofreció despojarse de ese tipo de tentaciones: «ni amigos ni familiares…»
Candidez y sangre fresca en la política presentados como inversiones con gastos muy onerosos porque se desbordan los intereses en allanar espacios de representación popular que mejor se ganan con liderazgo.
Es una vulgar adquisición de curules con dinero del pueblo. Un negocio que al paso de los meses pretende pasar inadvertido, ¡en el primer estado con alternancia!
Eso es un despropósito. Ver la cara de tontos a electores de la talla de los tlaxcaltecas trae como consecuencia los sonoros fracasos de nombres cuya promoción, de veras fue tirar el dinero al caño.
Es lamentable que la figura de una persona con una trayectoria limpia se someta a este tipo de proceso contaminante… a los políticos les hierve el corazón para demostrar de lo que son capaces, pero hacerse político porque las circunstancias lo facilitaron, eso es perturbador.
Llegar al ruedo sin la menor idea de servir al estado o al país, alimenta la tentación autoritaria de que otros se asuman en el verdadero poder, lejos de ser leales al país y respetuosos con la gente.
Hay que ahorrar en las extraordinarias
El papelón de Eunice Orta y otros consejeros -no todos- ha quedado inscrito en la parte obscura de la historia moderna del estado.
Uno pensaría que ante la oportunidad de enmendarse, organizando elecciones extraordinarias, esas personas priorizarían no volver a cometer los mismos errores.
Para sorpresa de todos, lo que Eunice propone es ahorrar recursos económicos.
¿Le preocupa cuidar el bolsillo de un Poder o garantizar elecciones democráticas?
Tal vez este es un ejemplo de esos personajes sin rumbo que, una mañana en algún restaurante económico pacten con su pareja iniciar una aventura donde lo único seguro sea su degradación, y también una cuenta bancaria.
Organizar elecciones va más allá de gastar poquito.
Si se hace con decencia, Tlaxcala tendrá estabilidad, pues no se trata de un proceso normal, sino de la repetición de los comicios ante las condiciones siniestras registradas el siete de julio.
Acaso estamos ante la organización de un bodrio más.
A la consejera presidenta del IET, lo que le hace falta es un diálogo consigo misma, para saber hacia dónde tiene que dirigir sus actos, ella misma, no los patrocinadores y protectores que le resultaron de improviso.
El mail de Brasil… ¡sorprendente!
Crece la versión que a las oficinas del senador Emilio Gamboa y del diputado Manlio, llegó un mail escrito por una persona de mucho peso político. Escrito con la habitual y a veces molesta prosa que decanta en loco afán, decía más o menos: «es responsabilidad suya la llegada de quien ha causado el peor desorden en mi estado, por consecuencia anuncio mi retorno, por ahí de marzo, «porque yo sí voy a poner orden en mi patria chica».
Pácatelas.