Terco y obsesionado por ser presidente municipal de Apizaco, el estúpido Javier Rivera Bonilla que invirtió millones de pesos y que transitó por todos los partidos para cumplir su fantasía, hoy que detenta el poder gracias a Morena, no sabe qué hacer ni cómo resolver los problemas de la ciudad.

 

 

Al parecer ya se dio cuenta que no es lo mismo contar dinero de las ventas de sus tiendas y acomodar abarrotes en los anaqueles que solucionar la deficiente prestación de servicios públicos y enfrentar a los delincuentes.

 

Su idiotez es tan grande que este día por la tarde se aventará la puntada de rendir un informe de sus primeros cien días de trabajo, algo que resulta absurdo porque sencillamente no cumplió nada de lo que prometió durante la pasada campaña electoral.

 

O será que ya adquirió los cinco camiones nuevos para recolectar la basura o que ya dotó a la policía de Apizaco de 25 nuevas patrullas, 10 motocicletas, 10 drones e instaló las mil 500 cámaras de vigilancia que ofreció para reforzar la seguridad en la ciudad rielera.

 

Cuando Apizaco estaba en manos del PAN relativamente se atendían y resolvían los problemas de recolección de basura, el bacheo y pavimentación de calles, así como se esforzaba en la medida de lo posible en brindar seguridad a los ciudadanos, sin embargo hoy el municipio está abandonado por el mandilón Javier Rivera que sólo recibe órdenes de su esposa y sus avorazados cuñados.

 

Se sabe que otros beneficiados del mal gobierno son el trácala Juan Pablo Morales Rico y la que se asume como la primera dama en el municipio, Karina López Guevara, quienes se desempeñan como secretario del ayuntamiento y como directora de Gobernación, mismos que se sienten los grandes operadores políticos y los super “asesores”.

 

La percepción no sólo es mala para el castrado alcalde morenista, sino brutal a la hora de medir su nivel de aprobación. En octubre en la encuesta nacional que hace Consulta Mitosfky para medir el desempeño de los presidentes municipales del país, Javier Rivera se ubicó en el último lugar de una lista de 150 ediles, ya que su respaldo social apenas fue del 28 por ciento.

 

El morenista de conveniencia fue el presidente municipal con la aprobación más baja de todos y para su mala suerte el alcalde capitalino, el también militante del partido guinda, Alfonsa Sánchez García, logró una aprobación del 42.7 por ciento, lo que le permitió estar entre los ediles con una desempeño aceptable y evidenciar que el abarrotero es un fiasco.

 

Y no crea que de octubre a la fecha ha mejorado la percepción, al contrario Rivera Bonilla sigue decepcionando y será cuestión de tiempo para que los ciudadanos de Apizaco muestren su abierto rechazo al edil y a Morena.

 

Resulta irracional que pese a los desaciertos y malas decisiones, el presidente municipal de Apizaco opte por dar un informe cuando no ha hecho nada y sobre todo cuando éste ejercicio se dará en una exclusiva zona de la comunidad de Santa Anita Huiloac y se alejará del pueblo que le dio su voto para llegar al poder.

 

Supongo que ahí dará a conocer que sus cuñados son tan honestos y honorables que son los que recogen y manejan los recursos que cada día se obtienen por los parquímetros y también se informará que el hermano del alcalde mandilón es responsable de la empresa contratada por el ayuntamiento para sonorizar todos los eventos oficiales, evidenciando en todo momento que los únicos beneficiados por el ayuntamiento de Apizaco son los familiares del nefasto Javier Rivera.

 

En materia de seguridad Rivera Bonilla ha sido un rotundo fracaso. Hoy las amenazas para que los dueños de negocios de la ciudad paguen por cuotas de piso son constantes, al igual que los asaltos violentos y los robos de autopartes.

 

Los ciudadanos de Apizaco viven con miedo y zozobra, pues nunca se habían alcanzado los actuales niveles de inseguridad.

 

Y créame que lo que está pasando en la ciudad rielera ya es motivo de preocupación porque el descontento social es real y la gobernabilidad del municipio está en riesgo.

 

Ahora sólo falta esperar para ver qué pasa en ese municipio, donde el gobierno de Morena está dejando una pésima imagen ante la incapacidad de Javier Rivera.

 

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