Por el momento está descartado un cambio en el gabinete legal, pero en el ampliado si habrá movimientos, fueron las palabras pronunciadas por la gobernadora Lorena Cuéllar Cisneros durante una entrevista ofrecida en vivo a e-consulta Tlaxcala.
Sentada en el despacho que tiene instalado en la Casa de Gobierno, la mandataria sostuvo que está contenta con el trabajo que han estado realizando sus funcionarios del gabinete legal, porque los resultados de su desempeño están a la vista.
Donde sí habrá ajustes y cambios, es en el gabinete ampliado, porque en la evaluación semanal que se está llevando a cabo se sabe quiénes son los que están cumpliendo con las metas y los objetivos y quiénes han tenido atrasos y problemas para adaptarse al trabajo y al estilo del nuevo gobierno.
Al menos 17 funcionarios lorenistas de primer nivel podrán estar tranquilos y disfrutar de las fiestas decembrinas, sin embargo otros 28 tendrán que enfrentar cierta incertidumbre y preguntarse si alguno de ellos es el candidato con más posibilidades de dejar la administración estatal en los primeros días de enero del siguiente año.
Por lo pronto no descarte que Max Hernández Pulido, titular del Centro de Control, Comando, Comunicaciones y Cómputo (C4) y encargado de la Secretaría de Seguridad Ciudadana sea ratificado en esa última posición. Tampoco deseche la posibilidad de que el ex líder del PRI en Tlaxcala, Noé Rodríguez Roldán, aparezca en los siguientes días como funcionario de primer nivel (responsable de la Secretaría del Trabajo y Competitividad) o asumiendo un cargo en el gabinete ampliado.
El 1 de enero de 2022 iniciarán funciones la Secretaría de Bienestar, la Secretaría de Ordenamiento Territorial y Vivienda y la Secretaría de Trabajo y Competitividad, de ahí que habrá que esperar los nombramientos de los o las responsables de esas nuevas áreas de la administración estatal.
Pierde fuerza la intención de crear el fondo moches
Ayer cuando los diputados locales votaron para determinar la forma en que aprobarían el presupuesto de egresos del 2022, es decir, a través de cédula o no, los legisladores evidenciaron su división y que cada vez va ganando la posibilidad de no avalar el llamado “fondo moches” que permite etiquetar a los 60 presidentes municipales 500 millones de pesos para obras de infraestructura.
Los morenistas y sus fragmentados aliados, así como con la ayuda de un amaestrado priista lograron imponerse al grupo opositor que sumó doce votos, incluidos los cuatro que tiene la bancada del PT, mismos que no fueron suficientes para lograr que el presupuesto se votara por cédula.
Se dice que al pleno se presentarán dos presupuestos de egresos, uno que incluye los “fondos moches” y otro que no los considera, por lo que a la hora de ser votados se verá qué propuesta es avalada y cuál es desechada.
Anoche la operación de los lorenistas para obtener más respaldo y evitar la aprobación de los “fondos moches” empezó a ganar más simpatías de uno que otro legislador que formaría parte del grupo opositor, de ahí que existe la confianza en que esa bolsa manejada por los diputados no será creada ni avalada para el 2022, tal y como lo ha venido sosteniendo la gobernadora de Tlaxcala.
Sólo es cuestión de tiempo para que se compruebe que Lorena Cuéllar y Morena terminarán imponiéndose y que su propuesta de presupuesto de egresos del siguiente año será la que se apruebe.
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