Universitarios de Veracruz realizaron el pasado fin de semana una encuesta patito para medir el posicionamiento de los aspirantes a suceder al gruñón hacendado.

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En el PRI lo inevitable llegó y es obvio que ya optó por conducir su proceso interno para elegir candidato a gobernador por el camino que conduce a la división y a la fractura, ruta que siempre le ha representado descalabros y entregar el poder del estado a otro partido como sucedió con Alfonso Sánchez Anaya y después con Héctor Ortiz Ortiz.

Lejos de garantizar la equidad y el piso parejo para los priistas que están interesados en suceder a Mariano González Zarur, el CEN del PRI y Manlio Fabio Beltrones cobijan el desaseado proceso interno y contribuirán al desmembramiento tricolor en Tlaxcala.

Cómo pedirle imparcialidad al delegado del CEN del PRI, Javier Michel Díaz, cuando trasciende que recibe desde el inicio de la administración de González Zarur un salario. Cómo se puede tener un candidato competitivo y de aceptación social si la estructura del gobierno es obligada a respaldar a un priista sin presencia y sin carrera. Cómo se puede hacer un llamado a la unidad cuando el PRI estatal y sus sectores son usados para beneficiar a una sola persona.

Mariano González no puedo evitar la tentación de imponer a su sucesor en la persona de Marco Antonio Mena Rodríguez y ahora hace hasta lo imposible por conseguir esa misión que parece imposible y para lo cual usa a su hijo Marianito González Aguirre como su operador principal.

El hacendado convertido en mandatario estatal maltrató y se deshizo de dos colaboradores que minimizó y que hoy en día, le guste o no, se ubican en las preferencias electorales arriba de su eunuco delfín que se deja pilotear por su dueño a quien le deberá todo si logra la disputada candidatura.

Sin embargo, esos dos priistas probados y con trayectoria decidieron seguir su camino. Anabell Ávalos es incansable y su trabajo en la Sedesol le ha permitido convertirse en la aspirante priista mejor posicionada rumbo a los comicios del 2016 y Noé Rodríguez, ex delegado de Gobernación en Puebla, opera y hace amarres con diferentes grupos, situación que le ha valido para entrar de lleno a la competencia dentro del PRI.

Los dardos envenenados

Y es precisamente Noé Rodríguez quien decide enviar los primeros dardos envenenados al debilitado y gruñón gobernador en una entrevista concedida al periodista Juan Ramón Nava.

Ex el funcionario calificó de autoritario, indolente y desleal a Mariano González y confirmó que Marianito González envuelto en su traje de soberbia fue el emisario para pedirle que se bajara de la lucha por la candidatura tricolor al gobierno de Tlaxcala.

Noé Rodríguez se trazó su propia ruta crítica y sabe que los siguientes sesenta días serán claves para sus aspiraciones, por ello decidió expresar lo que muchos piensan del gobernador pero que pocos se atreven a manifestar.

Sin lugar a dudas hacer público su rompimiento con Mariano González se traducirá en mayor aceptación no sólo dentro del PRI, sino entre los ciudadanos que ya demostraron el pasado domingo que reprueban el gobierno del hacendado.

Lo que nunca midió Mariano González es la polarización interna del PRI. Decir que el mandatario no tiene el control del partido sería mentir, pero también sería mentira asegurar que el PRI del gobernador tiene todo para ganar, pues hay militantes que no avalan su desempeño y su forma de hacer política y otros que están resentidos porque en el 2010 fueron usados y después marginados.

Si alguien conoce el sentimiento de esos priistas es Noé Rodríguez, quien fue uno de los principales colaboradores de Mariano González durante la campaña del 2010 en la que el PRI recuperó el gobierno de Tlaxcala, de ahí que el ex funcionario federal dejó entrever que si hay imposición en su partido no descarta competir en el 2016 por la vía independiente, lo que sin duda dejará un hueco en el tricolor.

Además, el gobernador sabe de las cualidades de Anabell Ávalos, pues cuando andaban en campaña en el 2010 no se cansaba de decir que si el PRI quería recuperar y ganar la presidencia en el 2012 necesitaría a 32 Anabeles porque era una mujer incansable y una gran operadora política.

La delegada de Sedesol goza del respaldo de priistas que la perciben como una mujer capaz de encabezarlos para retener el gobierno del estado.

Quizá por esa razón, González Zarur decidió pedirle ayuda al también desprestigiado gobernador de Veracruz, Javier Duarte, quien a través de estudiantes universitarios de aquella entidad  levantaron el pasado fin de semana una encuesta para medir el posicionamiento  de los aspirantes.

Dicho estudio que tendrá dedicatoria será presentado en el CEN del PRI y después se buscará difundirlo a través de las plumas amigas del manchisistema para cacarear que Mena Rodríguez es un fenómeno electoral y que de la noche a la mañana es el precandidato mejor posicionado y con aceptación.

Insisto, la torpeza de Mariano González crece cada día y lo único que muestra es desesperación porque las cosas no caminan como quiere. Su pánico por dejar el poder lo hace cometer errores que incluso invaden a su novillo y aquí una anécdota que lo dibuja a la perfección.

Marianito por qué te casas en abril del 2016 en pleno proceso electoral, mejor espérate y lo haces en el 2017. No, debo casarme ya. No es lo mismo que digan que se casa Mariano a que se casa el hijo del gobernador. Asústame panteón.

Pero qué pasará si el PRI designa como candidato a Anabell Ávalos o Noé Rodríguez u otro priista que no sea Marco Antonio Mena, seguramente el gobernador hará berrinche y lo dejará solo y operará a favor de otro aspirante aunque no sea de su partido, de ahí que la fractura en el PRI es inminente.