A confesión de partes, relevo de pruebas.
La cínica secretaria de Turismo de Tlaxcala, Josefina Rodríguez Zamora, no sólo confirmó que antes de ser funcionaria pública es una empresaria, pero de las que el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, consideraría que pertenece a la mafia en el poder porque miente, oculta información y aprovecha su condición para hacer negocios.
Durante la comparecencia realizada ayer, los diputados y las diputadas comprobaron que en el gobierno estatal labora una descarada funcionaria que puso muy mal a la actual administración no sólo porque mintió al contestar a través de una solicitud de información del área de transparencia que la dependencia no había invertido ningún peso en el video musical del cantautor huamantleco Carlos Rivera denominado “Te Soñé”, sino que de manera hipócrita terminó por reconocer y confirmar que en esa producción la Secretaría de Turismo canalizó más de cuatro millones de pesos.
Imitando el comportamiento rupestre, malhumorado, agresivo y déspota de los hacendados tlaxcaltecas que el ex gobernador de Tlaxcala, Mariano González Zarur, siempre sacaba a relucir en sus entrevistas o actos públicos, la empresaria restaurantera y taurina asumió su papel de diva para fanfarronear sobre sus negocios, su familia y sus ilustres apellidos.
Y para continuar esa mitómana empresaria y servidora pública presumió la campaña publicitaria de Tlaxcala Si Existe para manejar cifras alegres que resultan una farsa más, como es el hecho de asegurar que en el 2022 se logró impactar a más de 60 millones de personas en el mundo con esa promoción y el mentado video de Carlos Rivera, pero que los efectos se empezarán a reflejar en este año, lo cual es absurdo porque las cifras evidencian las incongruencias expuestas por Josefina Rodríguez.
De acuerdo con información del INEGI, en 2021 (último año del que se tienen datos) llegaron al estado 249,001 turistas, de los cuales 245,595 residían en el país, mientras que 3,406 radicaban en el extranjero.
No obstante lo anterior, en años previos a la pandemia de Covid-19, la llegada de turistas al estado sobrepasaba las 400 mil personas, es decir, en 2017 la cifra alcanzada fue de 437 mil visitantes; en 2018 se contabilizaron 440 mil personas y para el 2019 arribaron a Tlaxcala 458 mil turistas.
En cuanto a los visitantes que residen en el extranjero, desde 2015, por lo menos 10 mil personas de otras naciones habían realizado actividades turísticas en nuestra entidad, casi tres veces más que la cifra del último año reportado y que fue del 2021.
Si antes de la campaña Tlaxcala Sí Existe y del video de Carlos Rivera se recibían a más de 400 mil turistas, lo lógico sería esperar que en el 2022 se duplique esa cifra y que ésta se mantenga en este año, pero si no es así se confirmará que los dichos de la secretaría de Turismo son puras falacias.
Exponer más incongruencias y abusos de esta funcionaria estatal sería una pérdida de tiempo, porque lo más seguro es que se mantendrá en el cargo abusando y evidenciando su clara patología de mitómana sin que nadie le inicie un procedimiento de responsabilidades por las anomalías cometidas hasta este momento.
Josefina Rodríguez jamás hubiera trabajado en un gobierno priista, panista o perredista porque a leguas se le ve su inexperiencia, su falta de honestidad y sobre todo su nula capacidad administrativa y política.
Pero al final tuvo la suerte de ser llamada a colaborar en un gobierno morenista, donde obviamente aceptan a este tipo de funcionarias que son una vergüenza para los tlaxcaltecas.
Se mueven las piezas del ajedrez del TSJE
Ayer le daba a conocer que la grilla al interior del Tribunal Superior de Justicia del Estado está a todo lo que da por la disputa que existe por la representación de los jueces ante el Consejo de la Judicatura.
Por esa razón, no pasó desapercibida la renuncia a la Secretaría General de Acuerdos del TSJE de Carlos Hernández López, posición que ayer mismo fue ocupada por Rita Torres Pérez.
A la par de los movimientos y reacomodos que se llevan en los juzgados, se espera que Carlos Hernández sea designado juez interino para luego ser nombrado representante de los jueces ante el Consejo de la Judicatura, posición que la actual presidenta del Poder Judicial de Tlaxcala, Mary Cruz Cortés Ornelas, quiere para su amigo.
Carlos Hernández pertenece a una dinastía de claroscuros. Su hermano Porfirio Hernández López fue juez, sin embargo fue destituido por incurrir en actos de corrupción. Su otro hermano Luis Hernández fue Secretario General de Acuerdos con el ex magistrado Mario de Jesús Jiménez Martínez. Se dice que por sus manos habría pasado dinero y sentencias producto de la corrupción.
Actualmente, está en un juzgado de control del Distrito de Sánchez Piedras y se rumora que anda por las mismas acciones de supuesta venta de decisiones corruptas que involucraría a una juez de nombre Nancy, quien anda en un lujoso automóvil Mercedes de más de 700 mil pesos, cifra que muchos dudan que haya podido pagar cuando gana 18 mil pesos mensuales.
Una juez afectada por los movimientos y reacomodos del TSJE fue la panista Claudia Pérez Rodríguez que fue enviada a impartir justicia a un juzgado de lo Civil y lo Familiar de San Pablo del Monte.
La ex diputada federal es de las pocas juezas que no tiene ninguna queja administrativa y es una juez penal certificada, sin embargo su distanciamiento con quién hoy ejerce el poder en Tlaxcala la ha llevado a ser relegada y sin ninguna posibilidad de representar a los jueces en el Consejo de la Judicatura.
No cabe duda que ciertas decisiones siempre tienen consecuencias. O no.
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