El convulsionado arranque de la nueva administración estatal y las municipales ha generado el despido y la contratación de personal, lo cual podría demostrar que hay quienes actúan con cierta ingenuidad y otros con una descarada malicia que raya en el cinismo, porque han optado por emplear los servicios de sus parejas sentimentales de manera directa, lo que obviamente representa un claro caso de nepotismo y de violación a la ley.

 

 

La flamante priista y hoy Contralora del Ejecutivo y próxima secretaria de la Función Pública, Eréndira Cova Brindis, designó como su secretario particular que es ni más ni menos que su actual pareja sentimental y su concubino José Manuel Hernández Sánchez, a quien le fue asignado un sueldo quincenal bruto de $10,845.80 pesos.

 

Para nadie es un secreto que Hernández Sánchez no sólo es conocido con un limitado Médico Veterinario Zootecnista egresado de la Universidad Autónoma de Tlaxcala, sino que ya tiene varios años siendo el amor de la marianista Eréndira Cova.

 

A la encargada de la Contraloría del Ejecutivo en el gobierno morenista poco le importó los principios de la Cuarta Transformación de no robar, no mentir y no traicionar, ya que sin importarle el qué dirán y menos la ley, decidió contratar a su concubino, situación que manda una pésima señal en el nuevo gobierno de Tlaxcala, porque si la responsable de vigilar que los funcionarios acaten las normas y tengan un comportamiento apegado a derecho infringe las reglas, es obvio que habrá otros intentos por seguir ese mal ejemplo.

 

Se dice que la priista Eréndira Cova ocultó a la gobernadora Lorena Cuéllar Cisneros su relación con José Manuel Hernández, de ahí que no sería extraño observar algunos cambios en esa dependencia que está en vías de transformarse en la Secretaría de la Función Pública de Tlaxcala, sobre todo cuando el personal de esa área clave en el gobierno debe acordar los temas relevantes con el Médico Veterinario Zootecnista y no con la politóloga que siempre dice andar muy ocupada.

 

No faltarán las voces que tratarán de justificar y hasta defender el actuar de la priista Cova Brindis, sin embargo es obvio que esa ex diputada local recomendada de la ex gobernadora Beatriz Paredes Rangel está actuando con malicia porque sabe que lo que hizo no se puede y es un claro ejemplo de nepotismo.

 

Un caso similar, es lo que está pasando en la administración de Araceli Martínez Cortez, quien se desempeña como presidenta municipal de El Carmen Tequexquitla, quien en su afán por recobrar la seguridad en su población aceptó nombrar como director de la policía a su consuegro Víctor García Chéver.

 

Ese personaje ligado a la “Hermandad” y conocido de los “4 Fantásticos” que operan y controlan la Procuraduría General de Justicia en el Estado tuvo vínculos cercanos con el subprocurador Edgar Bayardo del Villar en los tiempos de la administración del entonces gobernador perredista Alfonso Sánchez Anaya.

 

Hasta donde se sabe Víctor García estuvo detenido en el 2002 por robo y extorsión en el Cereso de Apizaco y quizá su llegada a la policía municipal se deba a que es consuegro de la alcaldesa Araceli Martínez, pues una hija del ex policía ministerial está casada con el hijo de la presidenta municipal que prometió, según una nota publicada en El Sol de Tlaxcala, “crear los programas Vecino Vigilante y Oficial Mayor con una policía acreditada, capacitada y equipada a fin de garantizar la tranquilidad de las familias de Tequexquitla”.

 

El nuevo jefe policiaco sabe lo que pasa actualmente en la población de Santa María Las Cuevas de El Carmen Tequexquitla con los robos de repartidores y camiones de carga. Junto con él también llegó como comandante Antonio Aguilar Bonilla, otro ex elemento de la Policía Ministerial.

 

Ese personaje al parecer también habría estado recluido en el mismo Cereso de Apizaco por homicidio al estar presuntamente involucrado en la muerte de un asaltante que pertenecía a una banda de robo a transporte de la población de San Bartolomé Matlalohcan perteneciente al municipio de Tetla de la Solidaridad, la cual recibía protección por parte de agentes de la PGJE.

 

Tales nombramientos de la policía municipal de El Carmen Tequexquitla están generando ruido y una enorme desconfianza, porque si hay una zona insegura en el estado por el alto índice de robos y asaltos en las carretas es esa y no hay la certeza de que las cosas vayan a mejorar cuando la seguridad se puso en manos de ex policías ministeriales que tienen malos antecedentes.

 

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