¿Se acabó la magia?
Esa es la pregunta que nos hacemos quienes en su momento fuimos testigos de los frenéticos partidos que daba La Franja semana a semana de la mano de su técnico “Chelis”, y es que después de ver el desarrollo del partido del domingo frente a Querétaro, nos damos cuenta que el Puebla perdió más que un partido, perdió la fisonomía, el hambre, las ganas de trascender y de dar satisfacciones a sus fieles seguidores.
Por momentos pareció que el Querétaro era el Puebla, los jugadores en ocasiones se vieron confiados y sobrados, como si en el momento que quisieran definirían el encuentro, incluso note a un Chelís muy parco, muy tranquilo en el banquillo, como si no pasara nada, un Chelís desconocido que ni siquiera daba instrucciones constantemente y al que incluso ni los cambios le funcionaron.
Sabemos bien que Puebla es un equipo emotivo, que basa su éxito en el despliegue físico y las ganas a nunca renunciar a obtener un buen resultado, pero honestamente desde aquella eliminación en el Interliga el equipo no ha vuelto a ser el mismo, perdió el primer partido frente a Tigres como local, después en un juego “raro”, donde se utilizó a una gran cantidad de jugadores reserva se le ganó a unos Tecos que incluso ganaban el partido, y por último se vuelve a perder en casa frente a uno de los candidatos al descenso.
Lamentable, sin duda, que el equipo esté esperanzado a obtener buenos resultados fuera de casa pues en Puebla nada más no podemos.
Algo tendrá que hacer Chelís y rápido pues es un hecho que algunos jugadores no pasan por su mejor momento y eso se está traduciendo en malos resultados, y lo peor, un mal al que no estábamos acostumbrados como es el exceso de confianza.
Parió la abuela
Si de por si las broncas a nivel directivo en el Puebla están a la orden del día, pues ahora con la resolución de la FIFA con respecto al caso de Fabiano Pereira y en la que la institución se verá obligada a pagar 850 mil dólares por concepto de salarios caídos y recisión de contrato, asunto que bien vale la pena mencionar se encontraba a cargo del Contador Público Álvaro Flores, que en lugar de dedicarse a cuidar y defender el asunto, optó mejor por irse a seguir al Puebla en el Interliga, por lo que según trascendió en un arranque de furia y después de la mentada de madre de rigor, Francisco Bernat decidió despedirlo por ineficiente y huevón, veremos si los lazos de corrupción que unen a estos dos personajes no hacen que a esta decisión se le dé marcha atrás.
Lobos, uff
Vaya punto que obtuvo el equipo universitario en su visita a Aguascalientes, donde Necaxa desde que descendió no había perdido ni un punto, y créame que fue más que difícil, pues los Licántropos tuvieron que jugar todo el segundo tiempo con nueve jugadores en el campo por las expulsiones de Cercado y Metlich, como sea, seguramente este resultado servirá para que la motivación aflore en el campamento de los jugadores de Orduña y éste repercuta en mejores resultados para el equipo. Nosotros seguiremos en línea. Hasta la próxima.